Justin, al ver que salieron, se voltea y entra otra vez al cuarto de sus padres con la perra.
Ellos me preguntaron por mi uniforme, lo que me dice que yo trabajo con ellos.
Rápido buscó su libreta antes de salir y escribe en ella los nombres de ellos con la pregunta de quienes eran. En eso, entro Keila y lo ve escribiendo. Acercándose lentamente hacia él, le pregunta:
– ¿Qué haces? –
– Oh, no es nada. Estoy apuntando cosas mientras me voy acordando para tener un mapa de quien soy. –
– Enserio no recuerdas nada. –
– No. ¿Saben dónde está mi familia? –
– Todos los que desaparecen los hacemos muertos hasta que los vemos, entonces confirmamos si están muertos o no. –
– ¿Y tengo que fingir que toda mi familia está muerta sin saberlo? –
– Es la realidad. Lo lamento. –
Justin suspira hondo y desalentado para después de terminar de apuntar en la libreta, entrarla en el bulto.
Sé que es difícil Justin pero tienes que hacerlo. ¿Qué pasa? Antes parecías ser mas fuertes para estas cosas. Aun así me da mucha pena con él.
La perrita olfateaba a Keila mientras ella seguía parada ahí mirándolo y le ladraba. Ella la mira y sonriéndole le dice:
– ¿Que pasó cosita linda? –
– Ella extraña. –
– ¿Cómo se llama? –
– Lucy. –
– Que linda. ¿Cuánto tiempo tiene? –
– Pues no lo sé pero es bien juguetona así que yo la haría una bebe. –
– Cierto, no recuerdas nada. Perdón. –
– No te preocupes. –
Después de acomodar todas las cosas se puso el bulto en la espalda y agarra a la perrita en sus brazos. Keila lo mira mientras le pregunta:
– ¿Listo? –
– Sí. –
– Pues andando. –
Ellos fueron caminando por el pasillo hasta la sala. Justin tira una última mirada a las perras tiradas en el piso y demuestra una cara de pena.
Adiós Chevi y Lisy.
Seguía caminando con ella hasta la ventana rota y cuando mira para el lado, todo seguía igual. Mira hacia el comedor y las ventanas estaban rotas. Luego mira hacia afuera para la marquesina y la puerta igualmente estaba rota. Luego mira hacia al frente para seguir a Keila. El portoncito que estaba al lado no estaba abierto.
Quizás treparon, no tienen que abrir el portón.
De pronto ella mira para el portón y suspira hondo. Justin la mira extrañado porque no sabía lo que hacía. De pronto se dobla y cuando sube, da un brinco grande que llega a pasar del techo de la casa. Ella mueve sus brazos artísticamente mientras daba una vuelta de espalda en el aire. Cuando cae, cae añingotada en el piso. Justin se le quede mirando con la boca abierta y cuando se para le dice:
– ¿Vienes? –
– ¿Ustedes también pueden brincar así? –
– Si, cada uno mejoro una habilidad pero todos tenemos las mismas. Vamos, ya veo que descubriste eso de ti. –
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Amnesia
ActionUn joven despierta en un mundo reinado por el apocalipsis sin el más mínimo recuerdo de su vida. Intentando encontrar a su familia perdida y recobrar la memoria descubre lo inimaginable. Muertos andantes, soldados cuyas habilidades fueron triplicada...