Haz de mi corazón un lugar mejor. [Editando]

Cap.34 (parte 2)

_______.-Pov.

Le había gritado que se fuera, vi el sufrimiento en sus ojos y aquello me hizo llorar más, pero no le podía permitir que me siguiera viendo de esta forma, me levanté del suelo ayudándome con la pared, dios las piernas me temblaban, su presencia me debilitaba, el también se levantó. Quería ayudarme, pero no le dejé, me limpié las lágrimas con rudeza.

Tu: Déjame tranquila Jacob Black -Le dije con una mueca de enojo.

Jacob: ¿Por qué lloras? -Preguntó, ignorando lo que había dicho.

Tu: No es tu problema.

Estaba molesta, realmente lo estaba, por algún motivo estas noches me he sentido mucho más sola que de costumbre y aunque debo decir que la sensación no era agradable, de cierto modo me estoy acostumbrando a no tenerlo. A veces no duele tanto.

Pero ahora con el aquí, en frente de mi, sentía otra vez, el dolor insoportable debajo de mis costillas y en mi pecho. Maldición tenia que salir de aquí. Quise irme pero él me detuvo por el brazo, miré hacia donde me había agarrado, la piel me quemaba.

Jacob: ¿Sabes qué es lo más increíble de todo? -Su voz sonaba ronca, parecía contenerse -Que casi siento que es mi culpa -Hizo una pausa antes de continuar- Que merezco que me trates así.

Lo miré aburrida, mientras dentro de mi una inmensa culpa se extendía por todo mi cuerpo, después de todo ¿El se culpaba a él? ¿Es que acaso no me odiaba por todo esto?

Jacob: ¡Me molesta esa maldita indiferencia! -Me tomó por los dos brazos y me sacudió levemente -Tu maldita indiferencia y esa forma fría que tienes al hablarme, tal vez no te importe, pero me duele como no tienes idea.

Vi como una lágrima se deslizó por su mejilla y se la quité sin pensarlo, mi mano se quedo hay acariciándolo. La garganta me ardía, si abría la boca, solo saldría un sollozo así que me quedé en silencio observándolo, luego me di cuenta de que el sonreía y de lo que estaba haciendo así que me aparte.

Entonces lo sentí acercarse más a mí, y me acorraló en la pared, no le quería mirar a los ojos. Pero a el no le importo, pues acercó su boca a mi oído.

Jacob: Dime que no me quieres -Me retó, me estremecí, su aliento era caliente, como el.

Tu: No te quiero -Mentí, aún no lo miraba a los ojos.

Jacob: Embustera -Volvió a susurrar, esta vez me tomó por la cintura pegándome más a el, solté un suspiro, y sentí mis mejillas arder. Quería besarlo ya mismo, y que me besara, cada parte de mi cuerpo, quería que me hiciera el amor aquí mismo, que me hiciera gritar de placer.

Pero vamos, volví a la realidad, eso no pasaría.

Tu: Cree lo que quieras -Dije indiferente.

Jacob: Sé que me quieres -Dijo seguro sin borrar aquella estúpida sonrisa -y voy a averiguar porque estás haciendo todo esto.

Tu: Debo decir que tienes un ego bastante grande Jacob Black.

Jacob: Sabes muy bien que no es ego, tú me quieres, siempre lo has hecho y eso no es algo que cambia de la noche en la mañana.