Cap.7 (parte 2)

35.3K 2.3K 167
                                    

Tu: Creo que ya me tengo que ir. -Dije cuando dejamos de hablar y se prolongó un incómodo silencio.

Edward: Este... claro. Oye - lo miré - ahora que me conoces, ¿Sigues pensando lo mismo de mi?

Tu: No te conocía Edward... lo que pensé antes... no te lo tomes como algo personal.

Edward: ¿Te han enseñado a odiarme no es así? -Dijo con los ojos apagados, me sentí mal por él.

Tu: Soy amiga de una manada de lobos - reí - los cuales detestan a los vampiros, creo que eso responde tu pregunta.

El asintió y rió.

Tu: No te conocen.

Me despedí de Esme y Carlise para irnos en el Volvo de Edward, en el camino seguimos charlando un rato más hasta que mencionó un tema un tanto incómodo.

Edward: Sabes... le diré a Bella que te de una tarjeta.

Tu: ¿Tarjeta?

Edward: Si, la de nuestra boda... estaré feliz si vas. Puedes ir con Seth y Jacob, no creo que Leah aparezca...

Tu: ¿Cómo? ¿Invitarán a Jacob?

Edward: Sí... se que a Bella le encantaría verlo allí, si no su felicidad no sería completa.

Lo dijo con expresión triste, como si le doliera que Jacob formara gran parte de la vida de su novia o prometida, lo que sea.

Tu: Pero... no crees que eso lastimaría a Jake? - dije lentamente, luego bufé - Claro, todos piensan en Bella ¿no? En lo que la haría sentir bien, ¿y quién piensa en Jacob? Nadie se pone a pensar ni en un momento lo que le dolería presentarse allí. ¿Su insignificante dolor no cuenta verdad? Porque al fin y al cabo Bella estará Feliz.

Las palabras me salieron tan rápido y con tanto enojo que mis manos se habían convertido en puños y no me di cuenta que por primara vez desde que estaba con Edward me sentía con ira.

Estacionó el coche y se quedó mirándome fijamente, su rostro era de confusión y luego abrió los ojos como si hubiera descubierto algo.

Edward: Lo amas. - Susurró - Lo amas - repitió.

Yo me había quedado paralizada, y respiraba entrecortadamente... ¿Es que todo el mundo se iba a enterar menos él? Que me delató...? ¿defenderlo o mis pensamientos? En este momento dudé si sería bueno tener un amigo vampiro lee mentes. ¿Qué no hay privacidad?

Edward: Sufres por el... por su amor, lo quieres tanto que duele. -Dijo haciendo una mueca, como si de nuevo estuviera sintiendo todos mis pensamientos y emociones.

Mientras yo solo deseaba... ¡que dejara de hablar de una vez por todas!. Al parecer oyó eso.

Edward: Lo siento - pero no sé si lo decía por Jake o por leerme la mente, tal vez por los dos - ¿Cómo puedes soportar tanto dolor?

Tu: Lo que no te mata, te da más fuerza. Olvida lo que descubriste, ¿quieres? -Miré a mi alrededor y me di cuenta de que habíamos llegado, estábamos cerca de mi casa, me imagino que llegamos hasta aquí porque a partir de aquí comienza el territorio de los licántropos o algo así.

Edward: Si hasta aquí puedo llegar; por el tratado - Asentí.

Miré hacia mi derecha y mi xorazón palpitó tan fuerte contra mi pecho que creo que Edward lo escuchó.

Jacob estaba recostado en un árbol viendo fijamente hacia donde me encontraba, tenía los brazos cruzados en el pecho y su cara estaba seria. Suspiré.

Edward: Está algo enojado -Rió mirándolo con los ojos entrecerrados, como tratando de ver algo mas allá de Jake, no le preste atención y me despedí.

Tu: Gracias por todo Edward -Dije con una débil sonrisa. Recordando todo lo que me habían dicho de él y su familia, los había llegado a odiar en su momento, pero ahora todo eso había desaparecido. Los Cullen no eran malas personas, al menos los que yo conocía no -Cuídate - Expresé sincera dándole una última mirada y abriendo la puerta del coche.

Cuando salí y cerré la puerta Ed bajó la ventana.

Edward: Eres tú la que debe de cuidarse, hay personas que te echarían de menos si te sucede cualquier cosa. -Al terminar de decir eso, mi cuerpo se paralizó ¿Qué habría querido decir con eso? Cuando abrí la boca para preguntar el subió la ventana y arranco el motor del Volvo.

¡Perfecto! Ahora a enfrentarme a Jake. Cómo haré para explicarle a alguien tan terco, que no fue mi intención hacerme amiga de un "chupasangre" como él lo llamaba, y no uno cualquiera, sino Edward Cullen... el ser inmortal con el que luchaba por el amor de Bella.

Haz de mi corazón un lugar mejor. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora