Obsesión

Sexta Parte

"Hola, hago un espacio para hacer ciertas advertencias. Bueno, este capítulo es muy largo. Tiene 2000 palabras. Más o menos, hay algo de lemon, no lo recomiendo a menores de 17 años, sí lo lees, es bajo tú propio riesgo (Mentira, léelo, yo sé que quieres 😏)  Y por último, me veo obligada a decirles que sí van a tener relaciones, cuídense chicos. 👌

(...) Aún estoy a tiempo

En el momento en el que entré a la casa, pude sentir la calidez que todo hogar tiene. Nunca había entrado a la casa de el señor Jiraiya, pero era una casa bonita, muy acogedora. En cuanto entras puedes observar la sala, con la chimenea, además de ser bonita y expresar elegancia, calentaba más las casas en estas épocas. De igual manera, había un pasillo, que supongo lleva hacia la cocina, una puerta al fondo, puede ser la puerta del garaje. Y las escaleras que van a el segundo piso. Mientras yo observaba la casa con detalle, Naruto me extendió la mano, quería mi abrigo. Me lo quité, tomando en cuenta que estaba algo mojado, lo sacudí un poco, cayeron varias gotas al piso, pero no pareció importarle a Naruto, lo colgó, y cerró la puerta.

-Gracias por venir- se puso en frente de mi, al agradecer sonrió, y después fue hacía la sala, tomó un poco de madera, que después terminó en la fogata, haciendo más fuego.

-No quería encontrarme a los bomberos al despertar, a Jiraiya le daría un ataque.- río un poco, mientras observaba de cerca el fuego crecer. Se puso de pie.

-El pollo te espera- dijo en el momento que se fue en dirección a la cocina, lo seguí. Al girar por el pasillo, me encontré una pequeña puerta me dio una gran curiosidad, así que la abrí lentamente.
No podía ver nada, estaba muy obscuro así que metí mi cabeza para buscar algún interruptor, cosa que no encontré. Decidí avanzar un poco, metí uno de mis pies, había una escalera de madera, lo supe por el crujido que hizo al soltar mi peso, no estaba muy firme, así que regrese, en el momento en el que salí, la puerta se asoto, me asuste un poco, después de ver que había sido Naruto.o

-Es el sótano.- dijo serio-la cocina está por allá.- apunto hacia el fondo del pasillo.

-Sí, lo siento- espere a Naruto para seguirlo, pero parecía que no se movería de allí. Así que comencé a caminar. No sentía su presencia después de varios pasos, gire un poco la cabeza, estaba cerrando la puerta con llave. Me causo cierto escalofrío, parecía que ocultaba algo allá abajo. Ignore el momento incómodo y seguí  mi camino, después de unos segundos supe que iba detrás de mi porque pisó una parte de ese pasillo que rechinó. Giré de nuevo y me encontré con la cocina, en cuanto vi una gran olla me acerqué, dándome cuenta que lo que había dentro no era un pollo, era un pavo. Miré a Naruto con cierto fastidio, es estaba en la entrada de la cocina con los brazos cruzados.

-¿Qué?- pregunto inocentemente.

-Esto no es un pollo, es un pavo.- dije mientras sacaba el pavo crudo.

-¿Cuál es la diferencia?- se acercó a mi y me quitó el pavo- Ambos son aves ¿no?- dijo sonriendo de lado, le arrebaté el pavo.

-No puedo cocinar un pavo, todo lo que tienes en la mesa, es para cocinar un pollo- solté el pavo en la mesa, trate de parecer molesta.

-Bien, pidamos pizza entonces.- lo miré, en verdad. Era un buen chico, lo podía notar en su mirada. Aunque no pueda distinguir un pavo de un pollo.

No pude evitar reírme al pensar eso.

Eran las 2:13 de madrugada, no había ninguna pizzería abierta a esas horas, así que condujimos por 15 minutos a una tienda de 24hrs. Para comprar pizzas congeladas, en cuanto llegamos, nos dimos cuenta que eran pizzas de microondas, electrodoméstico que Jiraiya no tenía. ¿Quién no tiene un microondas en su casa?
Así que fui a mi casa por el mío y regrese. Las preparamos, Naruto sacó una botella de vino, y unas copas, al terminar de cenar nos sentamos en la sala a charlar.