Obsesión

Décimo Novena Parte

(...) Él no es tú único héroe mamá. Se dijo a si mismo después de ver a Naruto tomar la cabeza de Neji y golpearla en el casillero.

Fui llamada por el director Shinigami, estaba realmente nerviosa. ¿Se habrán enterado de lo qué pasó con Kakashi? ¡No lo sabía! La intriga me comía entera, cada vez estaba más cerca de aquella sala, mis manos sudaban a motón, mi respiración era agitada, tenía que controlarme, necesitaba escuchar y negarlo todo, eso debe funcionar. Sí, ¡no! A quién quiero engañar, no son niños a los que les mientes sobre Santa Clous, El Hada de los Dientes, o de dónde rayos vienen los hijos. Tomé el picaporte y entré.

El director estába en su silla oficial, no vi a esa cabellera gris, mi corazón se calmo, en vez de ver a Kakashi sentado allí, me tope con dos figuras masculinas. Unos era rubio y el otro era... ¡Sasuke! Son Naruto y Sasuke, si antes estaba preocupada ahora sudo miedo.

-¡Sasuke!- lo llamé mientras me ponía al lado del director para poder mirarle la cara. -¡Dios mío!- me acerque a él con extrema preocupación. Estaba completamente lastimado, tenía vendas y moretones que no se pueden ocultar, ¡¿Qué mierda le hizo esto a mi pequeño?! Instintivamente miré a Naruto, él no estaba tan mal, sólo algunos rasguños y moretones en la cara, sus muñecas estaban manchadas. Me lance sobre aquel idiota. Lo tomé por el cuello de aquella camisa que llevaba.

-¡ESTÁS TAN MUERTO UZUMAKI!

Él parecía esperar esa reacción de mi parte, no dijo nada. Sólo me miro serio. El director y Sasuke me tomaron para alejarme de él.

-Tranquila Haruno.

-¡Mamá!

-¿Lo defienden?- dije arqueando mi ceja molesta

-Él me defiende.

-¿Qué?

-Miré señorita Haruno. Estos presentes aquí quisieron probar su fuerza en mi instituto.

-¿A qué se refiere?

-Dejaré que ellos se lo expliquen.

Fulminé a Sasuke con la mirada.

-Unos chicos llegaron a molestarme, así que los golpee a algunos. Me ganaban en número, así que me dieron una paliza.

-¿Cuántos eran?

-No importa.

-Sasuke Haruno.

-Cinco.- ¿cinco bestias contra mi hijo? Esos son de grupos nada más, yo los haría pedazos uno a uno.

-¿Y él que tiene que ver?- dije señalando a Naruto. Sasuke lo miró y no dijo nada.

-Él, señorita Haruno dejo heridos a esos cinco chicos.

-¿Qué?

-Les rompí la puta cara a esos idiotas.

-Cuida tu lenguaje Uzumaki- adivirtió el director.

-¿Cuál fue el escándalo de todo esto?- hubo un incómodo silencio. Parecía que no iban a decirme nada.

-Me llamaron orines.- dijo por fin Sasuke.

Me alegra que Naruto les diera su merecido a esos idiotas.

-Eso pasó según su versión de la historia- habló Shinigami- pueden retirarse, su castigo es la expulsión. Ahora pasaremos a los demás para poder ver si sus historias coinciden.
Salimos los tres de allí, aquellos abusivos ya estaban fuera esperando entrar. Naruto se detuvo y los miro, todos reaccionaron con temor, no los culpo, aquellos ojos eran como ver a miles de personas arder en el infierno.