Aunque jamás me ha traicionado la memoria.
Ahora mismo no sé, ni tu nombre,
ni como lucia tu cabello
podría llamarte poemas de Bécquer o canciones de Cerati
y a tu pelo quizás huracanes o media noche de selva.
Ahora mismo quién fuera Silvio Rodríguez,
y tu imagen se borrase de pronto
quizás una luz cegadora, o un disparo de nieve.
y se lleve de mi mente tus pestañas de historias
y tus ojos de vida.
Ahora mismo no recuerdo tus pupilas,
pero el humo de un café
asegúrome eran oscuras de amargo chocolate
yo juro son sublimes, como zumo de uva,
cual añejo tinto.
Ahora mismo en exactitudes perfila tu nariz,
y aunque no recuerde sus dimensiones;
de lejanas madrugadas
me suscitan nostálgicas sensaciones,
un gélido roce de su punta
como fuego en las mejillas.
Ahora mismo no estoy seguro,
sobre el carmín de tu boquita vampira
fuese miel, fuese fresa o fuese droga en mí,
o fuese simplemente...
solo sé que tus labios detienen el tiempo
y son candela de hoguera
en este pecho de invierno.
Ahora mismo que llueve y no encuentro la luna,
me confunde la añoranza de lo que pudo ser
menguante si me sonreías ,
creciente si arqueabas tu espalda de gata
y si era llena tus pechos mi estrella.
Ahora mismo se me ha olvidado tu cuello,
debióse ser algo así como el beso suave
de la blanca muerte.
Ahora mismo desconozco tu silueta,
epifanía en el humo del tabaco,
uno fragmentos de noches de fiesta
reconozco tu lengua asesina,
tus caderas de serpiente
y sétambién dé un paraíso en venus.
Ahora mismo se ha borrado de mis recuerdos tu voz de te quiero,
de no te vayas, de tampoco me he olvidado de ti,
pero escucho como cantan los ángeles
y suenan como tu respiración cerca de mi rostro
la acompañan tambores al ritmo de los latidos del corazón.
Ahora mismo no recuerdo tu piel,
pero sé que era un universo cobre
porque a pesar de los libros de estrellas
tuve la duda siempre,
si acaso aquellos puntitos que en tu pecho escondes,
forman galaxias o constelaciones.
Ahora mismo no recuerdo tus buenas noches,
ni tus palabras de despedida
y así, yo no te puedo soñar,
pero sé que aún te guardo aquí en algún lugar
por qué cada mañana
pienso en ti al despertar.
Ahora mismo no recuerdo un sitio favorito para estar,
pero al caminar por la ciudad
pienso en verte y abrazarte en cualquier calle
y que calle quien cursi me diga
aunque sé, que lo que más se identifica,
es una pista con música sensual,
y tu mi sol bailandome libre
siempre con las manos hacia arriba.