ENFERMA DE VENGANZA

CAPÍTULO # 4

-Cinco minutos más, por favor.-suplique a mi alarma.

No tenia ánimos de asistir al instituto.

Abrí lentamente un ojo y después el otro, me di una bofetada al ver que no era mi alarma la que me había despertado de mi profundo sueño, si no que era el timbre de la puerta.

Me levante perezosa y abrí la puerta. Me sorprendí bastante ya que no desperté en mi habitación si no en el sofá.

-Maldita bruja, llevó horas llamandote a la puerta y tú ni tus luces.-me recrimino Casie.

-Buenos días, Casie.-dije soltando un bostezo.

-Mujer, no quiero asustarte pero, ¡¡llevamos quince minutos de retraso!!.-grito obligándome a abrir completamente los ojos.

-Dame cinco minutos.

Corrí a mi habitación, ya no me daría tiempo de tomar una ducha así que me cambie rápidamente de ropa, cepille mi cabello, ya me maquillaría un poco en el auto.

-!Listo!.-dije corriendo escaleras abajo.

Mala idea.

-Joder Riley, ¿Estas bien?.

-Auch.-dije poniéndome de pie.

Mis pies me fallaron cuando bajaba y termine de bruces en el piso.

¿Ya les había contado que odio la clase de biología?

¿No?. Pues ya lo saben. La Odio.

Cuando finalmente termino la aburrida clase (en la cual me quede profundamente dormida), camine junto con Casie a buscar algo de comida.

-Hola chicas ¿Qué cuentan?.-dijo Janel, llegando a nuestro lado.

-Hola.-Contestamos al unísono.

Pasamos el almuerzo conversando un poco. Aunque a decir verdad no ponía mucha atención a la charla de mis amigas.

-¡Tierra llamando a Riley!.-dijo Rachel.

-Hmm, lo siento chicas.-me disculpe.

-¿Qué pasa contigo? No has dado ni un solo bocado a tu, ensalada.-dijo con una mueca de asco Casie, ya que ella odiaba la ensalada.

-Ya, dejala.-hablo Rachel

-Si, es obvio el por que no ha comido ni un poco.-esta vez hablo Janel.

Frunci el ceño.

-¿Ah, sí?.-pregunte confundida.

Quizás era muy obvia al momento en que mi mente viajaba al pasado.

-Sí, obviamente estas enamorada amiga.-sonrió pícara y con cierta burla que no comprendí.

Pero lo único que logro fue que mi ceño se frunciera más de lo normal y el poco sentido del humor que habitaba en mi, se esfumara por completo.

-Te equivocas Janel.-conteste mas fria de lo que hubiera querido sonar.-El estar enamorada es algo que no esta en mis planes, desde hace un año.-susurré lo ultimo.-Y te agradecería que olvidarás ese pensamiento, ya que es algo estúpido pensar que podría enamorar teniendo en cuenta todo por lo que he pasado.

-Hey, calmate no tienes que ponerte así, solo bromeaba.-se escudo Janel.

-Pues no me agrada tu sentido del humor.-dije poniéndome de pie.

-Riley ¿a dónde vas?.-pregunto Casie algo preocupada.

Ella mejor que nadie sabía como me afectaba ese tema.