Problema. (Minseok)

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-¿Xiumin? —Preguntó con un hilo de voz. Mis ojos estaban completamente abiertos, abría y cerraba mis labios levemente intentado hablar. Suho entró lentamente a la habitación y cerró la puerta detrás de él. Desvié la mirada. –No me llames así...—Murmuré. –Tú sabes muy bien que ahora odio que me llamen así. —Dije en seco.

-Lo lamento...—Susurró y lo escuché. Sonreí fríamente aun sin mirarlo. Le di la espalda mientras guardaba las pastillas de la pequeña mesita en un cajón de la misma. -¿Cómo está... él? —Pregunté con miedo. No tenía que mirar a Suho para saber que su expresión había cambiado a estar sorprendido.

-Él está... bien. Al menos está mejor que antes. Ahora mismo se encuentra de viaje. —Dijo con un tono que no pude identificar. Volví a sonreír pero esta vez no era una sonrisa del todo fingida. Me alegraba saber que se encontraba bien. No como yo, que estoy repitiendo las mismas acciones que hicieron que él llegara a odiarme.

Mientras Jongdae mejoraba, yo empeoraba.

«-Estudiaré medicina...—Anuncié y ambos chicos me miraron boquiabierto. -¿En serio? ¡Me alegro mucho por ti Xiumin! —Exclamó Jongdae mientras me abrazaba con cariño. Suho se limitó a sonreír. »

Los tres nos conocemos desde muy jóvenes, el mayor, Suho, siempre nos ha tratado como niños a Jongdae y a mí. Ha sido como un hermano mayor para nosotros. Jongdae y yo hemos sido mejores amigos desde siempre. Eso nunca cambiará, o eso creía.

Desde muy niño, siempre he sido... especial. Siempre fui muy distante con las personas, nunca me ha interesado la gente. He sido una persona muy reservada y no confío fácilmente en las personas.

Mis padres murieron cuando yo era bebé. Fui criado por mi abuela y mi tía. Nunca me he puesto a pensar sobre mis padres, no me interesaban. Siempre pensaba que si me llegara a gustar alguna persona en específico, trataría de nunca alejarla de mí.

Y la primera persona fue Jongdae.

No podía decírselo, sin embargo, mis acciones dijeron bastante sobre mis sentimientos. No entiendo por qué me obsesiono de esta manera, debido a mi raro problema, Jongdae me odiaba.

«-¡¿Qué estás haciendo?! ¡Xiumin! —Exclamó asustado Jongdae mientras que yo revisaba su teléfono con mi entrecejo fruncido. Tenía varios mensajes de una chica y me molestaba bastante que me lo ocultara. Intentó arrebatarme el celular mientras que yo esquivaba perfectamente cada uno de sus torpes movimientos.

-¿Quién es ella? ¿Por qué se hablan tan cariñosamente? ¡Explícame! —Arrojé el aparato y chocó fuertemente con la pared tanto que se hizo trizas. Jongdae abrió sus ojos como platos al ver su móvil destrozado en el suelo.

-¡¿Qué demonios pasa contigo?! —Gritó mientras señalaba su móvil hecho trizas en el suelo. -¡Tú solo debes estar a mi lado Jongdae, no al lado de esta tipa! ¿Acaso no somos amigos? ¿Acaso no me quieres? —Como acto seguido, me abalancé sobre él y presioné sus labios contra los míos. Besé sus labios bruscamente mientras fruncía mi ceño con los ojos cerrados al darme cuenta que Jongdae no correspondía, sus labios estaban fuertemente cerrados.

Me empujó y velozmente sentí su puño contra mi pómulo. Caí al suelo y coloqué mi mano sobre el lugar recién golpeado, podía sentir el sabor metálico de la sangre en mi boca, me sangraba la nariz. Mi expresión era de sorpresa y enojo.

-Minseok... Tú tienes un problema...—Murmuró mientras restregaba el dorso de su mano contra sus labios, intentando limpiar su boca. Odiaba que me llamara por mi nombre. Rápidamente me levanté y le devolví el golpe, esta vez en su estómago. Gruñó de dolor y cayó de rodillas al suelo.

- ¡Yo no tengo ningún problema! Jongdae... yo...—Me arrodillé frente a él y empecé a besar su cuello, Jongdae tenía una expresión de miedo y dolor que por alguna razón, me emocionaba. Tomó mis hombros e intentó alejarme pero yo fui más fuerte. Lo tumbé en el suelo quedando yo sobre él.

- ¡Aléjate Minseok! Me estas asustando. —Exclamó Jongdae y sentí un fuerte golpe en mi cara de nuevo. Golpeó fuertemente mi ojo, este ardía y veía borroso. Me empujó y golpeó fuertemente mi torso, su golpe fue tan fuerte que juré que me había roto algo. Me tumbé en posición fetal en el suelo y Jongdae se levantó y me pegó una fuerte patada que dio a mis costillas. Ni siquiera chisté. Me lo merecía ya que ni yo sabía lo que estaba haciendo.

-Te quiero lejos, fuera de mi vida, para mí Kim Minseok ya no existe. ¡No te quiero volver a ver! —Gritó y salió por la puerta de mi habitación. »

Desde ese entonces, Jongdae nunca volvió a hablarme, debido a eso, me mudé a otra ciudad sin avisarle ni a él ni a Suho. Quería estar lejos, no sabía qué había hecho en ese entonces, estaba claro que yo tenía un problema. Habían pasado 5 años, yo había terminado mi carrera en enfermería. Nunca volví a saber de Suho ni de Jongdae, me sorprendí bastante al ver a mi viejo amigo en esta ciudad.

-Bien. —Me limité a responder. Miré a Suho y tenía una triste sonrisa en su rostro. -¿A qué viniste? —Pregunté desviando la mirada de nuevo. Él ahora para mí era solo un simple conocido. No quería volver a tener que ver con él ni con Jongdae.

-Luhan es mi estudiante... traje unas cartas de parte de los profesores. —Levantó un sobre que traía entre sus manos. Ahora que lo recuerdo, cuando me mudé, Suho estudiaba para hacerse profesor. –Veo que cumpliste tu sueño de ser un gran profesor. —Murmuré. Suho sonrió y dejó el pequeño sobre en la mesa al lado de la cama de Luhan.

-Así es, ahora soy un buen profesor de matemáticas. —Aseguró con una gran y notable sonrisa. Bufé. –Siempre odié las matemáticas. —Susurré fríamente. Suho rió levemente y caminó hacia la puerta.

-Como ahora sé que estás trabajando aquí, te confío para que le entregues esas cartas a Luhan. —Sonrió y tomó el pomo de la puerta. –Él vendrá en una semana. Ahora vive en esta ciudad. —Murmuró y cuando me volteé ya se había ido. Resoplé y revolví mi pelo con desesperación.

No quería saber nada de él y Suho no me ayudaba. Luhan se movía un poco indicando que se estaba empezando a despertar. Rápidamente tomé el sobre y lo tiré en una cesta de basura que había a un lado de la mesa. Saqué un frasco y saqué dos pastillas de este. A pesar de que no tenía las pastillas que le he estado dando a Luhan estos días, siempre tenía un plan B. Luhan me miró y sonrió levemente y yo hice lo mismo.

-Aquí está la dosis del día, Hannie~— Recité y coloqué las pastillas y un vaso de agua frente a él. El efecto de la pastilla anterior había pasado y ya Luhan tenía un poco de fuerzas. Tomó el vaso con una mano y con la otra sostenía las pastillas, las cuales miraba con cierto asco e inseguridad.

-¿Sucede algo? —Pregunté con una sonrisa.

-¿Por qué me haces esto? —

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Hello~ :3

Esta vez vine con un capítulo hablando un poco sobre el pasado de Minseok y por qué se comporta así. Espero que les haya gustado ~ <3

Probablemente actualice todos los domingos ~

Descubrí que soy la única a la que le gusta el kpop en mi colegio #ForeverAlone (???) :'c

Gracias por leer, comentar y votar, en serio <3 ~

Nos vemos en el siguiente capítulo ~

Sad Spring {HunHan / ChanBaek}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora