SUBLIME ||The Vampire Diares||

Uno

DAMON POV

Llevo mucho tiempo huyendo del pasado, hace más de 200 años que me convertí en un vampiro y aún no he encontrado la estabilidad en ningún sitio, siempre estoy haciendo de las mías.

Tras pasar una larga temporada en Nueva York he decidido volver a Mystic Falls, aburrido y pequeño, pero muy sobrenatural y donde está viviendo mi hermano Stefan desde hace poco por los rumores que he escuchado.

Aparqué el coche delante de la gran mansión de Los Salvatore. Sigue estando igual que hace unos años, aunque algo retocada.. Vaya por dios..

Antes de que tocara el pomo de la puerta, esta se abrió dejando ver a mi hermano — ¿Qué estás haciendo aquí Damon? — Preguntó mi hermano con cara de preocupación, como siempre.

— ¿No te alegras de verme? — Sonreí de lado y pase por su lado y caminé por el pasillo hasta llegar al salón.

— Damon hablo en serio, ¿A qué has venido? —Stefan sé acercó a mí.

— Te recuerdo que esta también es mi casa —Me senté en el sofá mientras tomaba una copa de Whisky.

— No quiero que causes problemas, por favor Damon, estoy rehaciendo mi vida — Dijo afligido mi querido hermanito.

— Oh por favor Stefan, me ofendes, ¿Qué clase de problemas podría causar? — Pregunté con ironía.

— No vayas por ahí matando a gente. Solo eso. Consigue sangre de otra manera — Respondió.

— ¿Se te ha olvidado la parte en la que soy un vampiro sin humanidad y que necesito sangre para vivir? — Me reafirmo en que mi hermano es estúpido.

— Róbala en el hospital pero no mates a personas inocentes. — Después de decirme eso, se fue escaleras arriba y me dejó, por fin, tranquilo disfrutar de mi bebida.

EKATERINA POV

Después de más de 600 años de vida creo que ha llegado el momento de asentarme en un lugar fijo, el lugar donde crecí.

Cuando tenía realmente 19 años, huí de mi ciudad, me aleje de mi familia y de mi prometido, vivía en Mystic Falls en una preciosa casa blanca con mis padres y mi hermano mayor Ledd.

Era un día tranquilo, como habituaban a ser en verano, estaba con mi hermano en el bosque paseando como hacíamos todas las mañanas cuando algo nos atacó, vi como un hombre le partía el cuello a Ledd y como le daba sangre.
En ese momento no entendía nada, luego lo vi acercarse a mí y después todo se volvió negro.

Cuando desperté estaba tirada en medio del bosque, me levante y vi a mi hermano de espaldas.

— Ledd.. — Este se dio la vuelta y me miro.

Tenia toda la boca llena de sangre — Dios mío que.. ¿Qué has hecho? — Pregunté asustada y confundida.

— Tranquila Ekaterina, tú tienes que hacerlo también o en unas horas morirás — Se acercó a mí y me abrazó.

Debí de sentir miedo pero por el contrario me sentí segura con el. Confiaba en el.

— ¿Por qué? — No entendía nada.

— Nos ha matado — Creía haberlo escuchado mal pero no, todo era cierto — Y nos ha obligado a beber su sangre y si no bebemos sangre humana en menos de un día moriremos otra vez — Dijo acercándose a mí.

— Yo ya lo he hecho y me siento muy bien. Tienes que hacerlo — Parecía no tener remordimientos.

— ¿Estoy mu-muerta? — Las lágrimas no tardaron en salir y mi hermano rápido me abrazo.

— Sh..tranquila, no le contaremos nada a nadie de esto, solo tú y yo lo sabremos, nadie puede saber lo que somos — Dijo en tono tranquilizador.

— En cuanto bebas la sangre nos iremos y huiremos de aquí, no nos encontrará, nos quiere utilizar, nos ha hecho como él, somos parte de los vampiros originales — Susurró Ledd con preocupación en la mirada.