Capítulo 9

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Felix había llegado más tarde de lo que había informado. Cuando llegó pudo ver a su padre en el sillón de la sala dormido en una posición bastante incómoda. Lo hizo sentir culpable. Fue su culpa por no llegar a la hora acordada más había dejado olvidado su celular así que no contestó las llamadas de su padre.

Es por esa razón que con mucho cuidado movió a su padre para que despertara y lo llevó con cuidado a su habitación. Su padre estaba demasiado dormido como para reclamar algo así que estaba de suerte. Además, al día siguiente tenía trabajo así que no lo molestaría hasta la tarde. Ya pensaría qué decirle para que no lo matara por lo tarde que llegó.

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Chris se encontraba en el trabajo terminando de anotar algunas cosas cuando Woojin entró. Era medio día y sabía que tenían que ir a almorzar.

-¿Aún pensando en tu hijo? -le pregunta una vez salen del lugar en dirección a una cafetería cercana.

-Si. Ya sabes que me preocupo mucho por él. Aún no puedo creer lo que hizo.

-Por Dios Chris. A cualquiera se le puede ir la hora. No es el fin del mundo. Definitivamente comienzo a creer que ya la edad te está afectando. -luego de decir eso abre la puerta del local ya que habían llegado.

Toman asiento en una mesa cercana a un ventanal y miran la pequeña tarjeta de menú que había.

-Deja de tratar de convencerme. Sé que mi hijo está cambiado y no me harás dudar de eso.

-Si tu lo dices... -Woojin rueda los ojos y sigue leyendo la tarjeta hasta que una tercera voz los interrumpe.

-¿Ya decidieron que ordenarán? -Woojin es el primero en levantar la mirada solo para encontrarse con un hermoso mesero.

-¿Te incluyen en el menú, hermoso?

-¡Por Dios Woojin! -Chris solo niega riendo nervioso. Muchas veces su amigo lo avergonzaba y mucho.

-Uy que lamentable, pero un bombón tan dulce como yo no se encuentra en venta. -y Chris sabe que esa voz la ha escuchado en algún lugar.

-No puede ser... -dice bajo y entonces el mesero mira en su dirección.

-¡Oh! ¡Padre dramático! -dice Minho riendo libremente. -Es un gusto verlo por aquí.

-¿Qué demonios haces Minho? Tu turno terminó. -otra voz se une a la conversación y Minho solo lo mira confundido.

-¿De verdad? -Minho observa su reloj. -Oh, es cierto. Entonces te dejo a ti a cargo, Jisung. -sonríe y luego observa a Chris. -Nos vemos, Christopher. -luego de eso Minho se retiró sin dejar su sonrisa de lado.

Jisung miró extrañado como su amigo se iba y Woojin miraba confundido a Chris.

-Disculpen ese pequeño inconveniente. ¿Qué desean ordenar? -los dos hombres reaccionaron y Jisung anotó todo para luego irse y dejarlos solos.

-¿De dónde conoces al mesero bonito? -pregunta Woojin mirando a su amigo.

-Es el chico ese raro de Instagram. El nuevo amigo de Felix.

-Es más bonito en persona. -dice simple.

-¿Si sabes que puede ser tu hijo?

-Uy, por Dios Chris. Solo admiro la belleza. No estoy diciendo que me voy a meter con el chico. Tranquilízate. -se ríe y Jisung regresa con los pedidos de ambos.

-Buen provecho. -le dice y se va de nuevo.

Luego de eso la charla entre ambos hombres va de manera normal sin fijarse en la pequeña figura que esperaba fuera de la cafetería.

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Ambos estaban saliendo de la cafetería, pero no hicieron más que girar para ir de vuelta al trabajo cuando una figura se paró frente a ellos.

-¿Puedo hablar contigo? -pregunta mirando al rubio.

-Yo los dejo. -dice Woojin simple y sigue caminando hacia el trabajo solo.

-Entro en media hora. -dice Chris.

-No tomará mucho. Vamos. -Minho comienza a caminar y Chris se coloca a su lado.

Caminaron hasta llegar al pequeño parque del centro y se sentaron en una banca.

-Escucha, sé que ayer Felix llegó algo tarde a la casa, pero agradecería enormemente que no seas muy duro con él.

-No eres quien para decirme qué hacer con mi hijo.

-Ay, si que eres idiota. -Minho rueda los ojos y se cruza de brazos. -No sé si alguna vez lo haz notado, pero Felix te aprecia mucho. Creo que deberías dejar de tratarlo como si fuera un completo extraño ahora. Sigue siendo tu hijo. Solo es una persona más madura. -Chris solo se ríe y Minho frunce el ceño. -¿Ahora te burlas?

-Escucha. Como te dije ahora, no eres quien para decirme qué hacer con mi hijo. Sé que ha cambiado y nada me quita de la cabeza que fuiste tú.

-Definitivamente fuiste alguien sin causa en tu juventud. -Minho lo mira de forma analítica y Chris bufa. -Dime algo que haya hecho mal Felix y que no sea lo de anoche. Tal vez así pueda considerar poder entenderte un poco. -Chris pensó un poco y dijo lo primero que se le vino a la mente.

-Se tiñó de rubio.

-Tú eres rubio teñido. -dice de inmediato al ver el cabello de Chris

-Sin mi permiso. -habla de nuevo.

-Bien. -Minho vuelve a mirar hacia al frente y habla de nuevo. -¿Qué le dijiste cuando lo viste?

-¿Que qué dije preguntas? Estaba en shock. No sabía que decirle. Cuando reaccioné le reclamé lo que hizo. Creo que debió informarme antes de hacerlo.

-¿No crees que debiste decirle lo bien que le quedaba en tinte? -Minho voltea a verlo y Chris hace lo mismo sin saber que decir. -Lo sabía. Solo lo regañaste cuando al menos debiste decirle algo bonito. Está bien el shock inicial por la sorpresa, pero no es que haya hecho algo malo. ¿Le preguntaste por qué lo hizo? -Chris una vez más se quedó sin palabras y Minho solo se levantó para mirarlo a los ojos. -¿Sabes? Eres un buen padre. Tal vez tienes unos pequeños defectos, pero eres un buen padre. Arregla esas pequeñas cosas. Solo eso. -luego se giró y sonrió un poco nostálgico. -Hubiera sido genial tener un padre como tú, Christopher. -y luego de eso sigue caminando dejando a Chris sentando en la banca.

Chris pensó un rato y entonces entró en razón. Tal vez, solo tal vez ha estado algo equivocado con respecto al cambio de su hijo.

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