Minho y Hyunjin habían salido luego de la charla tal y como había pedido Hyunjin en un inicio. Luego de la charla con su amigo supo que este no había venido realmente para salir, pero aún así lo hicieron. Fueron al centro comercial a dar vueltas, nada del otro mundo. Compraron un helado y se sentaron a charlar frente al centro comercial. Se tomaron unas cuantas fotos y Minho había decidido subir una. Ahora se encontraban en su departamento de nuevo con Hyunjin abrazándolo con fuerza, como si le fuera a pasar algo. Su amigo de verdad estaba preocupado y le hacía sentir mal en cierto modo. De verdad le gustaría decirle todo, pero tampoco podía meter a Chris de la nada cuando ni siquiera sabía qué eran exactamente.
-Vamos a estar todos ocupados un tiempo. Tal vez no nos veamos hasta que las clases inicien nuevamente. ¿Estarás bien ese tiempo? -le sonreí y Minho asiente.
-Por supuesto. -se separa un poco. -Siempre lo estoy.
-Bueno, aún así trataré de verte antes. Nos vemos. -sonríe de nuevo y se despiden con otro abrazo.
Cuando se separan Minho le agita la mano como despedida y cuando Hyunjin desaparece por el ascensor cierra la puerta. Suspira y va a sentarse en el sillón. De verdad se sentía algo culpable, pero ya podría hablarle a todos con sinceridad en algún momento.
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.Christopher por su parte no tuvo un día en extremo interesante. Felix estaba en la casa, pero su hijo no tenía ganas de salir así que se habían puesto a ver películas todo el día. Habían visto cuatro películas cuando decidieron que era momento de dejar el reproductor descansar antes que este explotara.
La noche anterior Felix estaba en su habitación cuando llegó así que no hubo problema en tratar de ocultar algunas cosas. Chris había ido directo a la suya propia para desvestirse e ir a tomar una ducha. Cuando salió y estuvo listo para dormir fue a la cocina a por un poco de agua y ahí sí estaba Felix. Su hijo le había preguntado dónde había estado, pero fue algo normal. Le contestó que solo había ido a cenar porque tenía las ganas. Felix no preguntó nada más ya que sabía que su padre a veces hacía ese tipo de cosas, pero al igual que Minho, Chris se sintió mal al mentir.
Lo que había sucedido con Minho no sabía cómo explicarlo. Simplemente desde que comenzó a convivir con el menor se le hizo una persona interesante. La noche anterior le pareció más bonito de lo normal, si es que eso era posible, y solo tuvo el impulso de besarlo y pasó lo que debía pasar. No se arrepentía para nada y de hecho tenía unas ganas tremendas de verlo de nuevo.
Con ese pensamiento se preparó de manera casual y tomó algunas cosas para salir. Su hijo se había metido a su habitación de nuevo así que le envió un mensaje avisándole que iba a salir un rato. Su hijo respondió con un simple ok y un corazón al final. Sabía que ese corazón era su manera de decirle que lo amaba.
Condujo hasta la casa de Minho, pero luego no sabía que hacer. ¿Qué haría cuando lo viera? ¿Había significado algo para Minho lo de la noche anterior? Minho era joven. ¿Y si solo quería algo de sexo? ¿Pero qué son esos pensamiento? Chris agitó su cabeza para tratar de quitar todos los malos pensamientos de su cabeza y bajó del auto para entrar al complejo en el que vivía Minho. Una vez estuvo en el piso del chico tocó la puerta sin más. Chris escuchó unas pequeñas pisadas y se puso nervioso sin saber porqué. Cuando Minho abrió se veía sorprendido así que solo levantó su mano en forma de saludo.
-Hola. -le dice simple y Minho parece reaccionar un poco.
-Uh si. Pasa. -se hace a un lado para dejarlo pasar.
Cuando ambos están dentro se miran a los ojos sin saber que decir. ¿Por qué era tan incómodo? Era tan difícil hacer algo en ese momento. Ninguno de los dos sabía como reaccionar. Chris creía que Minho no lo quería ver o algo así, mientras que por la mente del menor pasaba que tal vez Chris había venido en persona para rechazarlo de una vez por todas.
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Curioso
FanfictionChristopher Bang era un hombre común y corriente de 37 años. Tenía un adorable hijo llamado Felix Bang. Su hijo tenía 18 años y siempre fue un joven tranquilo y educado. Meses antes de que Felix cumpliera sus 18 años, Chris había notado un cambio un...