Somos 7 rubios

31. Porcinos

Al final estacionamos frente a un parque y buscamos un lugar lindo para sentarnos.

Como no teníamos nada en que apoyar nuestros traseros nos sentamos en el césped.

Kendall y Matt repartieron las cosas y luego se unieron a nosotros.

— Siento que falta algo — dijo Nina y todos la miramos.

No. ¿Que podría faltarnos...?

Ay dios.

— ¡Xavier! — gritamos varios.

— Dios, ¿Cómo pudimos olvidarlo? — dijo Jace.

— Alguien que le mande un mensaje — pidió Kendall.

— Ya le envió.

Tomé mi móvil y lo encendí.

Para: Xav:)
¡Ey! Estamos en un parque con los chicos, ven y trae algo para comer.

De: Xav:)
Claro, sólo se más especifica, tarada... Hay como diez parques en esta ciudad.

Para: Xav:)
Es uno que tiene un lago, esta frente al hospital. Te esperamos.

De: Xav:)
Ya se cual es. Estoy saliendo.

— Viene para acá — informé al resto.

— Cualquier cosa no nos olvidamos de invitarlo, sólo nos juntamos aquí de improvisto — dijo Nina y todos asentimos.

— Somos unos bastardos — dije.

— Lo sé — dijo Jace. — Estamos siempre con él y nos olvidamos de invitarlo.

Mi celular volvió a sonar y era una llamada de papá. De la desesperación tiré el móvil al piso y comencé a gritar.

— ¿Qué pasa? ¿Qué tienes? — me preguntó Clara asustada.

Miré a mis hermanos; — Papá nos está llamando.

Ellos palidecieron.

— ¿Sólo es eso? — preguntó Clara. — No debe ser para tanto.

— Tu no entiendes — dije con miedo mientras tomaba el móvil del suelo. — ¿Contesto?

— Si no lo haces seguirá llamando — dijo Daxon comiéndose las uñas.

— Lo pondré en altavoz — avisé y ellos asintieron.

Atendí y de inmediato lo puse en altavoz. Mis hermanos se acercaron para escuchar mejor.

— ¿Hola? — pregunté temerosa ya que nadie hablaba del otro lado de la linea.

— Charlotte — respondió con voz calma — sólo llamo para decirles que encontré la cámara y el micrófono...— mierda. — Y también para informarles que... ¡ESTÁN CASTIGADOS! — tuvimos que alejarnos cuando gritó aquello. — ¡Son unos mocosos malvados! ¡Los castigaré de por vida! ¿Me están escuchando? ¡Los mataré en cuanto pisen la casa!