12.

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Día 15.

Mi cabeza estaba recargada en la mesa, esperando a que Jimin llegará con el par de helados que debía comprar.
El clima era bueno, aunque alocado, podías ver el sol pero sentir una suave brisa de frío.
Acomodaba los holanes de su pequeña falda, se había puesto coqueta este día.
No había nada en especial.
Solo sintió que debía dejar que ese lado suyo saliera.
Aunque sea un rato.

Jimin no paraba de señalar las cosas que quería encima de su helado, quería granola, gomitas, chispas y fruta.
—¿Oye y viste a la chica de allá?

——¿La pelinegra?

——Sí, ¿Deberíamos acercarnos? Parece que está sola... olvídalo viene para acá, le preguntaré su nombre...

——¡Jimin! ¿Necesitas ayuda con-?

Justo daba la vuelta y al escuchar a aquellos destruyó sus helados.
——¿...los helados?

——¡Ah! Qué mal, parece que están defectuosos, tendremos que ir a otro lugar a comer helado.

——Pero...

——¡Vamos!——la tomó del brazo llevándola lejos.

—¿La habías visto por aquí antes?

——Si que es linda.

——Está para ponerla de cachorro.

——Que suertudo es, teniendo eso solo para él.

Con cada frase apretaba más y más el agarre hasta el punto que Jung tuvo que sacudirse para que le soltara.

——¿¡Se puede saber qué te ocurre!? ——recuperaba el aliento.

Él no respondía, en su lugar solo se le vio cerrar los ojos y respirar profundamente.

——Te di dinero para comprar los helados que rompiste, dijiste que iríamos a otro lugar a comprar alguno y me trajiste a la salida de la plaza, ¡¿Qué es lo que te pasa?!

Sonrió de manera angelical o ¿De manera natural?——Lo siento, ¿Volvemos a casa?

¿Por qué actúa tan raro? El trayecto fue callado, él ni siquiera miraba por dónde iba.

Iba caminando con los ojos cerrados, su semblante de notaba pensativo.

Al llegar a casa, me coloque algo más cómodo, empezaba a llover por lo que deduje que no saldríamos más.

Jimin estaba afuera, siendo empapado por la lluvia.

Puse la cafetera, dos tazas adornaban mi mesa de dos. Suspire tomando mi sombrilla.

——Lo que sea que estés pensando, ¿No sería mejor enfrentarlo dentro?

Prestó una toalla para secar su delgado cabello.
——Jimin...

——Lo siento, sé que prometí un día entretenido.

Negó. Indicando que todo estaba bien. ——Eso no me importa, ¿Te encuentras bien? Parece que estás enfadado.

——Y confundido.——agregó.

——¿Sobre qué...?

——No es importante, es algo que debo resolver solo.

——Se supone que cuidas de mi, ¿No es así? Procuras que mis problemas se resuelvan y ayudas a qué no me sienta tan mal, incluso ahora he estado tranquila en estos días debido a ti...——Jimin sintió esa punzada en el pecho otra vez.—— Quisiera que tú también te apoyaras en mi, como yo en ti.

——¿Por qué tiene que ser tan dulce, Señorita Jung?

Eso sonrojo a la chica, haciendo que mirara a otra dirección.

——No pude soportar.

——¿Mmm?

——No pude soportar oír todos esos comentarios sobre ti.

Exaltada, pedía una explicación a lo que confesado.

——Parte de mi no los culpa, eres hermosa, hoy te veías linda, capturaste muchas miradas y fue gratificante verte tan confiada, pero... Esa gente pensando en ti...——apretó sus puños—— A veces odio poder leer las mentes de los demás, no fue algo que disfrutará este día.

——Jimin...

——Es por eso que te saque de ahí.

——Si ese era el problema, pude haber comprado algo que me cubriera.

——¿Por qué habrías de cambiarte solo porque esos simios no pueden comportarse? Puedes usar lo que gustes, ellos no tienen porqué verte con ese morbo.

——Siempre cuidando de mi, ¿Eh?

——Es por eso...que no soporte estar ahí.

Jung daba un sorbo a su café algo avergonzada.
——No podía soportar a otros mirando a mí Jung.

Lanzó un suspiro ruidoso. Bebiendo el café, ella no podía hablar después de lo que escuchó.
——¡No quiero decir que me pertenezcas! es solo que... Da asco oírlos referirse de esa manera a alguien a quien he cuidado desde que era una bebé. Y me confunde sentir esto, no me había sentido tan impotente nunca, quería solo aventarlos lejos y dejarles en claro que no eres alguien que ellos merezcan. Eres demasiado para esos bastardos.

Dejo que sus ojos rieran por ella.

——Jimin, ¿Está celoso?——pensó.

Ángel I. ◈ 𝕡𝕛𝕞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora