CAPÍTULO 23- Invasión

60 8 0
                                    

KATE

Estoy tan cansada que estoy deseando llegar a casa de Jane y dormir hasta que sea lunes. Me he pasado toda la noche con Jake y los chicos ya que Jane se ha metido en la barra para poder beber gratis. Jake se ha portado muy bien conmigo y me ha estado protegiendo toda la noche de todos los chicos que intentaban hablar conmigo, y se lo agradezco mucho. No se me da muy bien hablar con los chicos, pero con él ya he cogido la confianza suficiente. Al principio me intimidaba un poco, es el triple de grande que yo y siempre está tan serio... pero hoy ha estado relajado como un chico normal. Bueno, relajado hasta ahora. Veo como se le descompone la cara al ver a la mujer que está sentada delante de él. Se desestabiliza un poco y da un paso hacia atrás, al parecer no soy la única que ha bebido un poco de más.

-Mamá –dice cuando han pasado unos segundos desde que él y esa mujer se están mirando.

"Esa mujer" que es su madre. Su madre... Me acuerdo de que cuando contó cómo había conocido a Jane dijo que se había cansado de ayudar a su madre y se había ido de casa, y por eso estaba viviendo con Jane. El silencio tenso dura más de lo que puedo soportar, pero no soy capaz de decir nada. Me posiciono al lado de Jane y veo lo tensa que está, creo que esta situación le gusta tan poco como a mí.

-Estás muy... -empieza a decir la madre de Jake.

-¿Qué haces aquí? –le pregunta este fríamente.

Le observo y me sorprendo al ver como la mira. Es como si para él no fuese su madre, la mira de manera fría, como mira a cualquier otra persona. Su madre mira nerviosa a Jane, pero esta no se mueve, no hace nada. Jake aprieta sus manos en dos puños.

-¿¡Qué coño haces aquí!? –grita y yo me escondo detrás de Jane.

-Yo le he dicho que vives aquí –dice Jane y veo la sorpresa cruzar la cara de Jake.

Jane se mueve y se pone junto a la madre de Jake.

-¿Qué? –dice Jake, y sé que está intentando no perder los nervios.

Esto no me gusta. Los dos van borrachos y si siguen así...

-Llevo un año ayudándola con su problema con las drogas, Jake, y tu madre lleva limpia durante todo este tiempo. Aunque yo tampoco sé que hace aquí... -dice Jane y atraviesa con sus ojos grises a la señora que tiene al lado.

-Yo... necesitaba verte, hijo, te he echado mucho de menos. Estoy muy arrepentida por todo lo que pasó, Jake, por favor... -la madre de Jake da un paso adelante, pero Jake retrocede.

-No me llames así. Hace mucho que no soy tu hijo. –dice Jake fríamente de nuevo.

-Jake, no le hables así, ella es tu madre –dice Jane mientras la madre de Jake agacha la cabeza dolida.

No sé qué hacer. Quiero decir, ¿qué debería hacer? Ni tan siquiera sabía porque Jake se había ido de casa... Jake se pasa las manos por el pelo varías veces, entre nervioso y exasperado. Veo el dolor en su cara, aunque se le da muy bien ocultarlo. Yo me limito a limpiarme mis manos en la falda y a mirar hacia todos lados. De repente, todo el autocontrol que tiene Jake parece esconderse en un lugar muy oscuro.

-Tú... ¿Cómo coño se te ocurre hacer algo así? –Grita Jake a Jane- ¡Siempre eres tú la que no quiere que se metan en su vida! ¿Por qué coño te crees con el derecho de meterte en la mía? ¡Te enfadas cada vez que intento acercarme un poco a ti, ¿y ahora haces esto!? ¿Qué coño se supone que debo hacer con esto? ¿Cómo coño crees que voy a actuar? –anda de un lado a otro y se toca la nuca y el pelo repetidas veces.

LibérameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora