Capítulo 32

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Estados Unidos - Miami, Florida.

Habían pasado algunas semanas. Unas semanas de cambio.

Gracie estaba en una casa del gobierno, donde solo le permitían dos veces a la semana ver a sus familiares.

Selena vivía con Anna, debido que su madre no aceptó su relación.

-¡No tendré una hija lesbiana!- le gritó.

Un nudo en la garganta se dio lugar y trago - Entonces madre, yo ya no soy tu hija, porque esto es lo que soy - se dio la vuelta y se fue con Anna.

Anna y Selena vivían en un pequeño pero cómodo departamento, ambas durmiendo en camas separadas. Debido que Anna le dijo: «Pasara cuando tenga que pasar, no antes, ni después, pasará cuando estés lista».

Precisamente Selena aún no se sentía cómoda llamándose a sí misma «Lesbiana», Anna lo sabía.

Hoy, un día común para muchos. Era el día del orgullo gay, Anna iría al desfile, era algo que hacía cada año.

-No estoy segura Anna - balbuceo Selena observando a un hombre en taparrabo - ¡Dios santo! - se tapó los ojos.

Anna negó y quito sus manos de sus ojos - Si, es un poco - vio a su alrededor - no poco, muy grotesco diría, pero mírame, habemos muchas y muchos que no usamos esa - vio a un hombre vestido de rosa con alas de mariposa, llevando solo un hilo - elegancia - frunció el ceño.

Pero como la alegría no es duradera, y no vivimos en un mundo de fantasías.

Fanáticos religiosos se dieron lugar, llevando carteles cómo:

«Arrepientanse pecadores, Dios lo ama»

«Mujer + mujer = intolerable
Hombre + Hombre = intolerable.
Mujer + Hombre= Natural».

«Arderán en las llamas del infierno».

Selena observaba esos carteles y se preguntaba ¿Porque?, observo a una pareja de jóvenes, uno lloraba y el otro acariciaba su rostro mientras lo abrazaba.

-Todo estará bien amor- le susurraba.

Selena empezó a reflexionar, Si difundieron una palabra de amor, ¿Porque hacen la vida miserables a los demás?. Es decir, no les hacia daño a nadie.

Ambas partes son adultas, ambas partes son conscientes, y apareció una interrogación, si dicen que no es bueno , ¿Porque ocultan a los pedófilos de la iglesia?, eso sería aún peor.

Comprendió que estaba equivocada, que si predicaba amor, no sólo lo haría con palabras sino con hechos.

Quizás esté bien

Quizás no lo éste

Quizás ardería en las llamas del infierno.

Observó a Anna.

«Vale la pena » susurro para si misma.

Tomó la mano de Anna, tomándola por sorpresa, Anna sonrió y Selena por inercia hizo lo mismo.

-Seré libre - le dijo al oído.

Anna se mordió el labio inferior - Ya lo eres ángel, solo aprende a volar - besó su frente.

Anna amaba más que a nadie en el mundo a Selena. Sin saberlo, sin comprenderlo, solo había pasado.

El amor es inesperado
El amor es como una semilla rebelde que nace en la tierra sin ser sembrada, sin ser esperada y esa clase de semilla da el mejor fruto que la que se siembra.

Así que dejaría de miedos y se enfrentaría a quien sea.

-Después iremos a comer una hamburguesa - sugirió Anna.

-Prefiero mejor que la llevemos a domicilio y quedarnos en el sofá - respondió

Anna asentó.

-Buena idea - sonrió.

-Sí - contestó.

-Te amo Selena - se acerco y beso su mejilla.

-Me encanta en la forma que me amas Anna - contestó dejando un corto beso en los labios de Anna.

Y por primera vez se sentía feliz, como si con eso había soltado, se había liberado de alguna cadena invisible.

-Siempre juntas - Anna beso su mano.

-Siempre juntas amor - prometió Selena.

Lo que no sabía Selena era que no se deben prometer, no se deben hacer promesas de largo plazo, debido a que en un instante todo se podría acabar....

**

Ricardo pensaba que todo le había salido perfectamente, puesto no se imaginaba lo que le pasaría.

Salió de su oficina, deshaciéndose de su nudo, y encontró a aquella mujer que había mandado a golpear en un callejón. No solo la golpearon si no abusaron de ella.

Estaba parada junto a dos hombres vestidos de policía.

- Ricardo Gomez, está detenido por intento de asesinato, por lavado de dinero y violación.

Ricardo intentó huir del lugar, pero un golpe en la cabeza lo hizo caer al suelo.

-Si pone resistencia será peor para usted - recomendó un hombre fornido.

-¡Me tienes que pagar! ¡Te pudrirás en la carcel maldito! - escupió ella molesta.

Charlotte usaba unas muletas para poder sostenerse, sus trabajadores no lo habían hecho bien. La habían dejado con vida.

- ¡Puta! - escupió molesto.

Ella le regaló una sonrisa llena de cinismo y burla.

-Te van a abrir el culo en la cárcel Ricardo - escupió.

Ricardo intento zafarse del agarre de los hombres pero le fue imposible, subiendolo a una patrulla.

Charlotte se sentía un poco insegura aunque ya estaba hecho.

Por eso la habían perseguido.

Ella encontró pruebas que pudrirán a Ricardo en la cárcel, su error enfrentarse a él.

Y como se lo había prometido a su hermana, haría justicia.

Por otra parte, Gracie descansaba en el cuerpo desnudo de su novia. Sonriendo y deseando que no se separarán nunca.

- Preciosa - Demi habló con voz ronca.

-Tú - contestó capturando los labios de la mayor.

-No hagas eso - se separó de la menor, bajando sus manos a su desnudez.

-Hazme el amor hasta que no quede ningún rincón de mi piel sin tu roce, sin tu aroma - susurro con voz excitada.

La mayor mordió su labio inferior, las palabras de su novia la volvían loca.

-Escapate conmigo - soltó.

Gracie la vio confundida pero sonrió - ¡Sí!.

Contestó feliz y se besaron, para luego entregarse a su pasión.

Sin imaginar, sin pensar en lo que podría pasar y las destruiría a ambas. O más bien a Gracie....

**

Todo era felicidad, todo era celebración hasta que se escuchó un disparo.

Los ojos de una morocha se abrieron de sobremanera y una chica cayó al suelo....

De su pecho brotaba sangre.....

Cuando Sea Libre |Selena Gomez| •Editando•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora