Capítulo 29

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Dreams.

Aproximadamente dos años habían pasado y aun que Christopher me había propuesto matrimonio hace exactamente dos años y tres meses atras, la boda aun seguía en pie. Cada día que pasaba era mas emocionante, desesperante y frustrante, en parte. Todo seguía de esta manera hasta el gran día. El día de nuestra boda. Ese día me levanté más temprano que nunca. Practicamente no dormí de la gran emoción que tenía. Caminé al balcon del hotel con mi celular y llamé a mi suegra.
|Llamada|
-Hola Diana.
-Hola suegra.-sonreí-¿Como están mis princesas?
-Están bien Diana.-rió-Chris me acaba de llamar casi ahora preguntando lo mismo.
-Ya no molesto mas.-reí-Nos vemos en la boda.
-Hasta luego.
|Fin de la llamada|

Entré nuevamente y luego tocaron la puerta. Deben ser las personas que me van a preparar. Abrí la puerta y justamente eran ellas. Los saludé, los conocía a todos. No me prepararía si. Francheska, así que esperé a que llegara y luego entré a bañar. Me bañé, me puse una bata a lo que me peinaban y maquillaban y luego me puse mi vestido de novia.
-Diana te vez hermosa.-sonrió Francheska.
-Tu te vez igual Francheska.-dije abrazandola.
-No pensé que llegaría este día y lo celebraría con mi mejor amiga. Estoy tan emocionada.-dijo a punto de llorar.
-No llores Francheska,  parece que la que se va a casar eres tu.-dije riendo y ella se me unió.
-Llegó la limosina.-nos dijo Mauro, mi estilista.
-Ya vamos Mauro.-dije sonriendo-Ya, ahora sonrié. No quiero que estes tan emocional el día de mi boda.-dije y reimos.
Bajamos y allí nos esperaban Johann y Zabdiel. Yo los abracé y luego nos montamos. Después de un rato conduciendo, llegamos a la playa, donde sería la boda. Me bajé después de todos. Estaba muy nerviosa. Caminé poco a poco por el hermoso camino que habían echo hasta llegar a el final del pasillo, donde me esperaba Richard. Miré al final, donde estaba Chris juntó al padre. Nuestras miradas se conectaron instantáneamente. La música comenzó a sonar y yo comencé a caminar junto a Richard.  Nuestras miradas no se desconectaban oor nada del mundo. Finalmente llegué al lado de Christopher.
-Te vez...wow.-dijo mirándome de pies a cabeza.
-Tu no te quedas atras.-dije sonriendo.
El padre comenzó a hablar. Yo lo unico que escuchaba era bla, bla, bla hasta que el padre dijo: "Diana, ¿aceptas a Christopher Vélez Muñoz, para amarlo y respetarlo, hasta que la muerte los separe?"
-Acepto.-dije mirando a Christopher directamente a los ojos.
-y tu Christopher,  ¿aceptas a Diana Espinosa De Jesús, para amarla y respetarla, hasta que la muerte los separe?
-Acepto.-dijo mirándome fijamente.
-Lo que ah unido Dios que no lo separe el hombre, puede besar a la novia.-dijo el padre y terminamos la seremonia con un dulce beso.
Salimos de allí de la mano, hacia la fiesta.
-¡Mami, papi!-dijeron nuestras princesas cuando nos vieron llegar.
-Mis amores.-dijo Chris tomando a las dos en brazos.
Ellas comenzaron a reír.
-Mamá se ve linda.-susurró Aliyah a su padre.
-Si, por eso me enamoré de ella.-dijo de igual forma.
-Papá también se ve lindo.-dijo Diana a Aliyah.
-Ustedes se ven mas lindas, princesas.-dijo Christopher a nuestras hijas.
Yo sonreí viendo la escena.
En fin, la fiesta estuvo estupenda. La pasamos muy bien con nuestros familiares y seres queridos. A la hora de tirar el ramo de la novia, Francheska se emocionó un poco pero no logró tomarlo. En ese momento entra Johann, con música muy romanto, por asi decirlo. Francheska se voltea y Johann se arrodilló. Fue muy bonito. Johann ya había hablado esto con nosotros pero, Dios mío. Sus palabras hacia Francheskas fueron hermosas.

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12 años despues.


|Llamada|
-Buenas Tardes, señora Vélez.
-Buenas Tardes.
-Le llamo para informarle que Aaliyah se ah metido otra vez en problemas. ¿Podría venir a la escuela?-preguntó la directora.
-Claro. Nos vemos allá.
-Adiós.
-Adiós.
|Fin de la llamada|

-¿Aliyah otra vez en problemas?-preguntó Christopher divertido.
-Si.-reí.
-Ultimo día de escuela y otra vez está metida en problemas.-dijo Christopher-¿A quien habrá salido?-me miró.
-¿Que me estas queriendo decir Vélez?-lo miré divertida.
-Ya vamos.-rió tomando las llaves.
Conducimos hacia la escuela de nuestras hijas y entramos. Nos pasaron a la oficina de la directora y nos sentamos junto a nuestra hija.
-Estan citados aquí ya que su hija se ah metido en problemas, de nuevo. Ah peleado con Jorge y con Alberto, chicos mas grandes que ella, y eso no es lo peor. Lo peor es que a Alberto le rompió la nariz y a Jorge le rompió un diente.-dijo la directora seria.
En mi no faltaban las ganas de estallar a risas. ¿Enserio Aliyah había echo eso? La miraba con seriedad y ella solo bajaba la cabeza.
-Se lo perdonaré por esta vez, ya que es el ultimo día y no quiero ser desagradable en las vacaciones. Se pueden llevar a sus hijas.
-Gracias, Buenas Tardes.-dijimos y salimos de la oficina.
Chris estalló en risas y yo me uní aunque eso no estaba bien, nunca cambiaremos. Siempre tendremos ese espíritu joven en nuestro interior.
-¿De que se rien?-preguntó Aliyah confundida.
-No puede ser Aliyah. No es la primera vez que te metes en problemas pero al punto de romperle algo a alguien.-dije.
-Lo siento per esos chicos me estaban molestando y quien se mete conmigo le va así o peor.-dijo seria.
-Esta bien pero no lo vuelvas a hacer. Sabes que eso no esta bien.
-Esta bien.-dijo bajando la cabeza.
-¿Donde está tu hermana?
-En el salón de música. Vengan es por aquí.-dijo guiandonos.
Entramos por un largo pasillo y se fue escuchando una voz bastante hermosa. Abrimos la puerta y encontramos a Diana cantando. En verdad cantaba hermoso. Christopher y yo nos miramos. Diana al darse cuenta de nuestra presencia se sonrojó y dejó de cantar. El maestro de música se acercó a nosotros juntó a Diana.
-Buenas tardes. Ustedes deben ser los padres de estas chicas, ¿cierto?
-Si. Mucho gusto.-dijimos.
-Dejenme decirles que aquí tienen a dos potentes voces. Las dos cantan hermoso.-dijo el profesor de musica orgulloso.
Luego de platicar con el profesor de música, volvimos a casa.
-Vallan a cambiarse. Hoy iremos a donde su tía.-dije.
-¡Yay!-dijeron emocionadas y subieron a cambiarse.
Luego de que las chicas se cambiaran, fuimos a casa de Francheska. Saludamos.
-¡Alexander!-gritó Johann.
-¿que pasó papá? Oh,-sonrió-Hola.
Alexander era un niño muy educado. Bastante diría yo. Mis hijas se fueron a cambiar ya que se meterian a la piscina mientras nosotros hablamos. Todos nos divertíamos.

Toda chica sueña con conocee a sus idolos, en un futuro casarse con el hombre de sus sueños, formar una hermosa familia junto a esa persona especial per quien diría que todo ss mezclara y ahota estaría casasa con mi ídolo y tendriamos dos hermosas hijas. Todo es parte de esforzarse y seguir tus sueños. Nunca rendirse y no descanzar hasta verlos realizados. Esta es mi historia, la de una chica enamorada perdidamente de su ídolo que luego de un tiempo terminan casandose a pesar de todos los problemas que se les presentan. Never give up and follor your Dreams.

Fin.

Dreams-Christopher Vélez {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora