¡Hola! Mi nombre es Diana Espinosa De Jesús. Tengo 17 años. Me gusta cantar, tocar guitarra y piano, dibujar, bailar, en fin, hago de todo un poco. Mi primo es Zabdiel De Jesús, uno de los integrantes de CNCO. No hablo con el desde que empezó la com...
*Narra Christopher* Desperté gracias a que escuché risas en la sala. Eran las 9:30a.m. Me levanté, me bañé, me vestí y luego salí. Estaban Sebastian y Diana muriendo de la risa en la sala. Celoso. Estaba celoso. ¿Celoso? No. Es muy poco comparado a lo que sentía. Tenía celos. Muchos celos. Sebastián es el "crush" de Diana. Me la puede quitar en cualquier momento y ella no para de mirarlo de esa manera tan especial. De sonreírle y de hablarle de una forma...agh. Creo que esto es más grave de lo que pensé. Mejor me calmó. Caminé a la cocina, desayuné y luego salí al balcón. Estuve allí un rato pensando hasta que escuché la puerta del balcón abrirse. -Hola.-dijo Sebas sentándose a mi lado. -Hola.-dije sin ánimos. -Oye, tienes una novia increíble. Es muy simpática. A parte se ve que te quiere mucho.-dijo. Lo miré. -¿Por que lo dices?-pregunté curioso. -Me estaba contando todo lo que han echo juntos. Es increíble.-dijo sonriendo. En ese momento mi ilusión volvió y todo el enojo que tenía se fue. -Ey, cuídala. Chicas así son difíciles de encontrar. Eres un suertudo. Ojalá yo tuviese una princesa así.-me sonrió. -Gracias hermano.-dije. Nos levantamos y entramos. Todos estaban en la sala platicando. Todos menos Diana.
*Narra Diana* -Iré a bañarme. Vuelvo ya mismo.-le dije a Sebas. -Está bien.-sonrió. Entré a bañar pensando en muchas cosas como el por que Chris no me había hablado. ¿Estará enojado? Pero, ¿por que? No eh echo nada malo que yo sepa. Suspiré. Salí de bañar, me vestí...
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Y luego salí. Ya todos se habían levantado. Miré a Chris quien hablaba con Zabdiel muy animadamente hasta que me vio. Yo solo bajé la cabeza. Me sentía triste. ¿No se que había echo para que Chris no me prestara atención? Me senté al lado de Francheska. -¿Que pasa con tigo y Chris?-preguntó. -No lo sé.-dije. -¿Como que no lo sabes?-preguntó. -Simplemente no lo sé Francheska. El no me quiso hablar.-dije triste. -Está bien.-dijo como arrepentida. Hoy si que no entiendo a nadie. -Chicos, ¿que tal si vamos a pasear?-propuso Richard. -¡Claro!-dijimos todos. Salimos de paseo. Chris y yo en sitios diferentes. Diferentes espacios. Diferentes pensamientos. Diferentes mundos. Yo sólo pensaba en que era lo que le pasaba conmigo. No sabía nada. Todos estaban raros en el día de hoy y a el único que le hablaba era a Sebas. Dimos vueltas por todo Miami. Veía a Chris forzar sonrisas. Definitivamente no estaba bien. Me dolía. Me dolía el hecho de verlo así. Me dolía el hecho de estar así con el y más me dolía el hecho de no saber nada. Estar más perdida que nunca y que mi maldito orgullo no me dejara hacer nada. Luego de un largo día, llegamos al hotel. Rápidamente entré al hotel y me metí en mi habitación. Entré a bañar, me vestí y luego en silencio, y sin decir nada a nadie, subí a la azotea. Por primera vez en mucho tiempo, lloré. ¿Por que lloraba? ¿Tenía razones para llorar? Si. Lloraba por el simple hecho de estar así con Christopher y ni siquiera saber por que. Lloré en silencio como siempre lo había echo. ¿La única diferencia? Está vez se dieron cuenta. -Diana.-dijo Christopher. Ni siquiera tuve la fuerza para mirarlo. No quería que me viera así. No quería que me viera débil. No quería que supiera mis puntos débiles. -¿Podemos hablar?-preguntó. Sólo asentí. El se paró a mi lado y comenzó a hablar. -Lo siento. Se que estas confundida y tal vez no entiendes que pasa. Todo es mi culpa. No sé no siquiera el por que de no hablarnos. Somos pareja, a veces tendremos nuestras altas y bajas pero, ¿que pasó esta vez? -Lo mismo quiero saber yo. ¿Qué pasó esta vez? -tuve el valor de decir-Todo iba normal ayer. ¿Qué pasó hoy? No se ni siquiera que pasa contigo Christopher. ¿Hoy te despertaste con ganas de ignorarme y hacerme sentir mal? Lo lograste.-dije molesta-Ni doquier te acercaste y preguntaste que me pasaba. Tal vez estoy formando mucho problema por esto pero, ¿te digo como me siento? -No me hagas sentir más mal de lo que me siento, por favor.-dijo bajando la cabeza. -Así me siento Vélez.-dije. -Yo sólo estaba celoso. No pensé que mis celos fuesen a llegar tan lejos y fuese a pasar esto. Yo en realidad lo siento. No quería lastimarte.-dijo mirándome a los ojos. Suspiré y lo abracé. -No lo vuelvas a hacer. Me siento bastante mal por esto.-dije. -Está bien mi princesa.-dijo abrazándome más fuerte. Luego bajamos. Ya estaba más tranquila. Ya era algo tarde, sólo nos quedamos hablando hasta quedarnos dormidos.
