Capítulo I

4K 122 1
                                    



Tal vez siempre las historias empiezan así. Con dos personas que se conocen y se empiezan a gustar, esto no es una excepción. Lo que pasa es que yo nunca estuve tan viva, que cuando te ví, ahí empezó toda mi verdadera historia, mi gran amor y dolor al mismo tiempo porque si amas tanto a alguien que duele, créeme, estas en lo correcto.

Y te vi. Tan lindo e inalcanzable para mí, de esto último estaba segura. Yo era una chica que parecía que tenía todo, esas que no le falta nada y que se van riendo por la vida. Lamento decirles que no es así. Por dentro estoy destrozada, tengo heridas que no se van por más que pasen años y años. Mi vida no fue nada fácil, pero hay que seguir adelante, no? Bueno, es lo que digo ahora, cuando exploto tengo un grave problema que intento cambiar, pero no puedo. Ah, me olvidaba, Soy Bianca.

Pasaré a contarles algo lindo de mi y lo que me hace feliz ya que al principio solo me salió contarles lo que me duele, lo que siempre está presente aunque no quiera. Tengo dos mejores amigas, Lara y Candelaria, me acompañan en todo pero no saben todo de mí. Nunca pude contarle a alguien todo lo que siento, espero encontrar alguna vez a esa persona que se siente a tu lado a escucharte incluso cuando no tienes nada que decir. Hago danza desde muy pequeña y tengo dos hermanas, Ludmila y Emilse.

Hace un año mi vida cambió por completo, todavía no puedo creer que no estés mas conmigo. Pero la vida es así, a veces te golpea, bueno, yo creo que le encanta golpearme desde que nací. Más adelante les contaré pero por suerte tengo a mamá.

Mi barrio es tranquilo, mi casa es bastante bonita, no me puedo quejar. Lo malo es que tengo vecinos bastante adultos, nunca una fiesta, nada pero un día cambió todo por completo, él llegó.

Yo estaba en el frente jugando al fútbol con mi perra Abi, una hermosa Border Collie que a pesar de su gran edad todavía conserva su espíritu de cachorro. Debo admitir que soy una chica un poco rara, mi mamá siempre dice que de chiquita vivía con heridas en mis piernas y parecía una nena golpeada pero la realidad es que me gustan mucho los juegos de niños.

De repente un auto negro llama mi atención al frenar en la casa en venta de al lado, era bastante lujoso y nunca se había visto por el barrio. Después de unos segundos Abi me saca de mi distracción ladrándome para que arroje la pelota, que por cierto, fue a parar cerca de allí. Ella fue a buscarla rápidamente, pero me sorprendí al ver que estaba tardando más de lo habitual así que fui a ver que ocurría. Detrás del auto desconocido estaba un chico de unos 20 años con mi pelota y acompañado de un perro gigante que estaba intimidando a mi perra cada vez más.

BIANZALO-Simplemente único.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora