21.

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Harry y Louis se encontraban en la bañera, ambos pensando en lo último que habia pasado en sus vidas, perdidos en sus pensamientos. Sus manos se movían por sus cuerpos solo por instinto, ninguno hablaba.

Desde que Harry se vió por última vez con Anne había estado muy asustado porque sabia que sus últimas palabras no las había dicho en juego, era capaz de hacerle cualquier cosa a Louis.

Y el castaño también pensaba en su madre y que en cualquier momento entraria en una depresión por la poca atención que ella le prestaba o simplemente por el olvido.

Harry dejó de pensar y se concentró en su novio, le acariciaba la espalda y le encantaba la forma en la que se estremecía al sentir sus manos tocando su hermosa piel. Escuchó a Louis suspirar y sabia que estaba preocupado pero no queria preguntarle nada por miedo a lo que pudiera responder.

Louis volteó un poco la cabeza para poder ver a Harry, lo besó por un largo rato, lentamente. Al rizado eso lo encendió, la forma en la que Louis movía su lengua y rozaba la suya era demasiado excitante. Louis terminó el beso mordiendo el labio de Harry y después pasando su lengua por encima de este.

—Mierda —jadeó el rizado ante las caricias de Louis.

El ojiazul sonrió y después se volvió a voltear y se posicionó entre las piernas del rizado rozando ''discretamente'' su miembro, volvió a sonreir cuando Harry soltó un gemido algo desesperado.

—¿No piensas dejarme así verdad? —preguntó Harry viendo que Louis no tenia intenciones de hacer nada más.

Louis pestañeó inocentemente.

—Solo bañate y ya, Harold.

Harry no se quedaria así, él también lo provocaria. Apretó más a Louis acercándolo un poco más a su cuerpo y bajó sus manos lentamente por su pecho hasta llegar a su miembro y rozarlo lentamente.

—Louis.. —dijo con tono de advertencia.

—¿Puedes quedarte callado y bañarte? —respondió fingiendo estar molesto.

Harry solamente lo miró sonriendo y hizo el intento de continuar bañandose pero con las manos de Louis en su miembro, tocándolo desesperadamente, le era imposible hacerlo. Se le escapó un gemido al sentir la boca de Louis frotarlo, dejó el jabón a un lado, puso sus manos a ambos lados de la bañera y puso la cabeza hacia atrás suspirando.

Mientras Louis hacia su trabajo tocaron la puerta.

—¡Mierda! —gritó el rizado y Louis soltó una risita que fue una melodía para los oidos de Harry.

Ambos terminaron de bañarse lo más rápido que pudieron, se vistieron y Harry fue a abrir la puerta un poco frustrado.

Al abrir, se encontró con un Zayn destrozado. Tenia los ojos rojos, se notaba que no había dormido en días y al ver a Harry unas cuantas lagrimas salieron de sus ojos.

—Zayn..

Zayn solo se lanzó hacia él abrazandolo y sollozando. Harry le devolvió el abrazo, sin saber que estaba pasando, pero sabia que su amigo no estaba bien y necesitaba apoyo. Louis, había salido de la habitación ya vestido, fue hacia la puerta y por primera vez vio a Zayn llorando. El rizado notó su cara de confusión y solo negó con la cabeza igual de desconcertado.

—Hey, zayn.. —habló con un tono suave tratando que su amigo se calmara —Zayn, mirame. —Éste obedeció limpiando sus lagrimas.

—Harry, no estoy bien —fue lo único que pudo decir para después ponerse a llorar de nuevo.

My sweet salvation. {Larry Stylinson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora