Rebecca Robinson

Capítulo 11

Capítulo 11

- ¿Me...Melanie? –Tartamudeé, las lágrimas amenazaban en salir.

De repente todos los recuerdos vinieron a mi mente.

Flashback...

-Mira quién viene... La gorda. –Melanie y todo el instituto comenzó a reír.

- ¡Gorda!

- ¡Foca!

-Vete al océano, ballena.

Me di la vuelta y comencé a correr mientras me secaba las lágrimas. Sé que soy una cobarde, pero esto es lo peor que hay en el mundo.

Fin del flashback...

Flashback...

- ¡No puedes arruinarte la vida por ella! –Me regañó Vicky, estaba llorando, sé que está preocupada por mí, pero yo ya no puedo más. - ¿Cómo has podido caer tan bajo? ¡Cortarte las venas! ¡Estás loca!

Yo seguía llorando, las muñecas me escocían, pero me daba igual, mi vida es una mierda y quiero que acabe ya.

Odio a Melanie Stark, la odio con toda mi alma.

Fin del flashback...

- ¿Quién es Melanie? –Preguntó Tyler. Vicky me miró como pidiendo permiso para decirle quién era esa desagradable persona.

-Melanie Stark, arruinó la vida de Becky. –Dijo.

No aguanté más y corrí hacia el establo de Hope. Rápidamente coloqué su silla y cabalgué lo más rápido posible hacia la orilla del río.

No podía creer que ella hubiera regresado. Pensé que se había ido para siempre, pero no, ha vuelto, y esa es la peor noticia que he recibido en el día.

Primero las revistas, con el maldito rumor de Ryan y mío.

Y ahora con la vuelta de Melanie.

¿Por qué mi vida tiene que ser así?

¿Por qué no puede ser una vida normal y corriente?

En cuanto llegué a la orilla me bajé de Hope y la até a un árbol, yo me senté en el tronco de ese mismo árbol y me puse a llorar. Me subí la manga de mi camisa y me fijé en las cicatrices. Sé que no se van a ir de ahí, sé que se quedarán ahí durante un tiempo, o incluso para siempre, pero supongo que son las consecuencias de ese estúpido día.

Oí un caballo llegar, me sequé las lágrimas y me levanté rápidamente para empezar a desatar a Hope del árbol. Eché un vistazo hacia donde venía el caballo. Pude divisar quién era el que estaba encima del caballo. Era Ryan.

Genial, ahora viene a reírse de mí.

Volví a atar a Hope al árbol y me senté de nuevo en el suelo.

Ya qué más da, ya sabe que estoy aquí, además, con lo pesado que es seguro que en algún momento me preguntará por Melanie.

Ryan llegó a mi lado, se bajó del caballo y le ató al lado de Hope.

- ¿Cómo sabías que estaba aquí? –Pregunté en cuanto se sentó a mi lado.

-No sé... Fue como una intuición. –Se encogió de hombros. –Además, siempre que necesito pensar vengo aquí.

-Llevo viniendo aquí desde hace cuatro años y nunca te he visto. –Dije.

-Pues no sé. –Sonrió un poco divertido. –Será el destino que no habrá querido que nos conozcamos hasta ahora.