MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.

Capitulo 11

El silencio se apoderó de todo el lugar; todos estaban en shock, no podía ser cierto lo que estaban viendo, la mujer que tanto daño les había hecho había regresado de la muerte.

Gonzalo: esto no puede ser verdad, tú estás muerta!

Fernanda: sabía que te había visto antes, pero como no llegue a pensar que se trataba del ser que más he despreciado en mi vida, como te atreves a regresar? Que quieres? Terminar con tu patética venganza?

Santiago: tú estas muerta muerta, lárgate de aquí!!

Anibal: no vas a regresar a Lactos por nada del mundo, entendiste? Eres una asesina, hay que llamar a la policía.

Todos estaban muy molestos, Bárbara Guardaba silencio y escuchaba cada insulto sin protestar.

Antonio: un momento! ya párenle a sus insultos,  sé que clase de mujer es, la saqué de la cárcel y empecé a tratarla, es consciente de los errores que cometió en el pasado,ella no me pidió que la regresara a Lactos, fui yo quien tomó esa decisión, porque fui testigo de todo lo que hizo para recuperar su vida, y saben por qué? Por su hija Aurora, Bárbara no quería seguir viviendo, pero sacó fuerzas para querer superarse, te empezar de nuevo y no te molestes Anibal en llamar a la policía, porque saben perfectamente sobre el caso de Bárbara, al único que meterían a la cárcel será a ti, por robarle a la empresa, porque eso es lo que has estado haciendo últimamente , parece que de nada sirvió la lección que quiso darte tu padre hace un par de años, tengo pruebas de lo que digo así que señores el trato no se puede romper, soy el accionista mayoritario y si no hay cabida para Bárbara en esta empresa, dejaré que se hunda junto con ustedes, porque saben perfectamente que es ella quien puede ponerla en marcha nuevamente.

Bárbara: sé que  les hice mucho daño, pero ya no soy la misma, y no regresé para vengarme sino para ayudar a levantarla, Gonzalo, te pido que me perdones, ya pagué muy caro todo el daño que te hice , Fernanda, Santiago, Aníbal sé que me odian, les arrebaté a su mamá, pero mi intensión ahora es ayudar.

No los voy a presionar para que me acepten, Antonio puede vender las acciones  o darle poder a otra persona.

Antonio: no Bárbara, todo eso es tuyo, en mi locura por sacarte de la terrible situación en la que estabas, le diste sentido a mi vida porque me hiciste sentir que no estaba sólo , el ver tu recuperación física y emocional me ha llenado de una inmensa alegría, eres la hermana que nunca tuve y si no eres aceptada en Lactos no me importa que la empresa se hunda con toda la familia Elizalde, tú no tienes nada que perder porque siempre contarás conmigo pero y ellos

( señalándolos) perderán una vida llena de sacrificios y trabajo.

Fernanda: prefiero morirme de hambre que permitir que esta mujer pise la empresa otra ves.

Eduardo observaba a Bárbara, de alguna manera sentía que estaba siendo sincera, prefirió guardar silencio.

Fernanda: lo mejor es llamar la policía para que te refunda otra vez en la cárcel.

Anibal estaba ya decidido a hacerlo y tomó el teléfono.

Antonio: adelante Anibal, pero tu llamada no servirá de nada, Vamos Bárbara, la familia Elizalde prefiere la ruina, tu y yo no perdemos nada si esta empresa se va a pique, vamos a continuar nuestra vida lejos de aquí.

Bárbara y Antonio salieron, pero algo extraño ocurrió ella volteo su mirada hacia Eduardo, ambos sonrieron al instante, parecía que nadie se había dado cuenta, ambos seguían sin entender por que sentían simpatía el uno por otro cuando antes no se soportaban.

La familia Elizalde estaba alarmada, su socio mayoritario les estaba dando la espalda, solo por respaldar a la mujer que ellos tanto odiaban, ahora que sería de su empresa?

Al regresar a la Hacienda los Elizalde discutían que hacer, estaban realmente preocupados, pues la posibilidad de que cayera en la ruina estaba cada vez más cerca.

Eduardo prefirió subir a su habitación, estaba muy confundido, aquella mujer que tanto lo inquietaba era quien lo había separado de su madre por años, pero tenia la seguridad que ya no era la misma.

Tengo que saber cuáles son sus verdaderas intenciones , sobre todo si su arrepentimiento es sincero, yo no me pienso alejar de ella, hasta descubrir la verdad, se dijo así mismo.

Ya tarde en la noche, Bárbara no podía dormir,lo que había sucedido en Lactos era comprensible, no la habían perdonado por todos sus errores cometidos, ahora faltaba enfrentarse a su hija, pero, estaría ella dispuesta a escucharla y darle otra oportunidad?