MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.

Capitulo 44

Eduardo: eso no tiene nada que ver, estoy  harto de esta situación.

Fernanda: sé sincero y habla con la verdad.

Eduardo: bien, hay otra mujer en mi vida y quiero darme una oportunidad con ella!.

Eduardo se retiro iba a llevarle las reservaciones a Bárbara.

Eduardo: puedo pasar?

Bárbara: adelante.

Eduardo: como esta la mujer más bella del universo?

Bárbara: muy bien y tu?

Eduardo beso a Bárbara y retiro sus labios rápido antes de que los vieran.

Eduardo: te traje nuestros tiquetes de avión, y reservas del hotel en Acapulco, viajaremos pasado mañana, Anibal y Don Gonzalo creen que debemos ir antes para saber que estrategia de las que tienes funcionaria mejor.

Bárbara: bueno, hoy mismo hablo con Antonio.

Eduardo: sólo te digo que en las reservaciones hice un pequeño cambio.
Bárbara: que hiciste?

Eduardo: reserve una habitación para los dos.

Bárbara: que? Estas loco.

Eduardo: loco por ti .

Esta era la oportunidad que ellos buscaban desde que estaban juntos, necesitaban estar solos, en privado, sin interrupciones para  vivir su amor sin esconderse.

En la oficina de Gonzalo...

Anibal: asi que Eduardo viajara con Bárbara a Acapulco?

Fernanda: con Bárbara? Por que con ella?

Anibal: ella es otra accionista y domina bastante bien el mercado.

Fernanda: si creo que tienes razón.

Gonzalo: hija por que no acompañas a Eduardo?

Fernanda: papá las cosas entre nosotros no van muy bien.

Gonzalo: piénsalo bien.

Bárbara: Entonces si puedes hacerte cargo de Santi?

Antonio: claro que si,le diré a las muchachas del servicio que me ayuden.

Bárbara: muchísimas Gracias.

Los dos siguientes días se pasaron entre trabajo y organización para el encuentro en Acapulco, el dia del viaje llegó Bárbara y Eduardo estaban más que felices porque disfrutarían varios días juntos, el trabajo era la excusa perfecta, se encontraron en el Aeropuerto aparentaron indiferencia ante los Elizalde que estaban presentes.

Al subirse al avión su trato pudo ser al fin cariñoso, el vuelo fue bastante tranquilo, al llegar al hotel siguieron a su habitación, tendrían una cena con  ejecutivos, estaba temprano podrían disfrutar de una tarde juntos, se pusieron ropa de playa caminaron de la mano sobre la arena, disfrutaron estar juntos.

Llegada la noche, ambos estaba listos para aquella cena, Bárbara llevaba un vestido blanco que le llegaba más arriba de las rodillas, con brazos descubiertos y zapatos blancos, Eduardo llevaba un pantalón y una camisa  blanca.

La cena duro unas dos horas, el tema de conversación fue sin duda la alianza con lactos, Bárbara había planeado muy bien cada estrategia, los empresarios estaban anonadados con su belleza e inteligencia, Eduardo no dejaba de observarla estaba orgulloso de tener a su lado una mujer tan guapa e inteligente.

Pasada las 10 de la noche la cena termino y llegó la hora de ir a descansar, Bárbara se había adelantado a la habitación, pero cuando Eduardo llegó ya no estaba, la llamó a su celular pero estaba apagado.

Eduardo: dónde estás?