MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.

Capitulo 24

Bárbara: a caso no te das cuenta? Estamos solos en este lugar, todos se fueron y tu y yo aquí bailando quitados de la pena.

Eduardo: no lo había notado, la verdad es que sentí que solo existíamos tu y yo.

Bárbara: a mi me pasa igual, tu le has dado un nuevo sentido a mi vida.

Eduardo: y tu a la mia, quiero que estemos juntos por siempre.

Bárbara: y Fernanda?  Que significa ella para ti?

Eduardo: Fernanda es mi Esposa, la mujer con la que soñé pasar mi vida entera desde que era un  niño, no te puedo negar que la amé por años.

Bárbara: lo sé, Soy testigo de ese amor, es concebible el odio que me gané a pulso de parte de ambos, pero ahora siento que las cosas han cambiado, la sigues amando?

Eduardo: La amé por mucho tiempo, fuimos muy felices  luego de nuestra boda pero las cosas se fueron  enfriando jamás tuve ojos para otra mujer, intenté muchas veces rescatar mi matrimonio, pero me cansé de idealizarla, en cuanto a ti; te odie lo sabes muy bien, pero aprendí a perdonarte a pesar de todo, no puedo vivir con rencor en mi corazón, en este poco tiempo me has enseñado que el amor no solo cura heridas y da entrada al perdón, sino que te da la oportunidad de volver a ser feliz, de convertirte en otra persona, yo quiero estar contigo.

Bárbara: jamás me había enamorado, tu eres el primer hombre que me despierta un sentimiento tan intenso.

Eduardo: pero y entonces es  Damian? Don Gonzalo y Artemio? Que significaron para ti?

Bárbara:  Tu primero dime que harás con Fernanda después de lo que me acabas de decir?

Eduardo: bien, Desde que nos casamos mi sueño siempre fue tener un hijo, pero Fernanda me ha dado vueltas largas todo este tiempo y siempre que hablamos terminamos discutiendo, ahora sé que no está entre sus planes formar una familia.

Bárbara: No sabia que querías ser papá.

Eduardo: Quiero darle a un hijo mio todo el cariño que no pude tener  de mi padre por haberlo perdido prematuramente.

Bárbara: ya veo, pero solo por eso ya no quieres a Fernanda?  el amor a veces te hace renunciar a personas o situaciones.

Eduardo: eso me queda claro, pero Fernanda y yo no tenemos los mismos ideales así que no tiene sentido que sigamos juntos.

Bárbara: entonces que vas a hacer?

Eduardo: he decidido acabar con mi matrimonio.

Bárbara: entonces es una decisión definitiva.

Eduardo: es la única manera de estar contigo.

Bárbara: me alagas pero Piénsalo bien, soy una mujer trastornada con un pasado oscuro.

Eduardo: pero la vida te ha dado una segunda oportunidad y estás reivindicando, o a caso no quieres estar conmigo?

Bárbara: por supuesto, pero piensa que al estar conmigo traicionarías la confianza y el cariño de los Elizalde.

Eduardo: si es el precio que tengo que pagar, no me importa, quiero estar a tu lado.

Bárbara Sonrió...

Eduardo: ahora respóndeme la pregunta que evadiste hace unos minutos.

Bárbara:  me haces sentir apenada, bien, Artemio me sacó del reformatorio cuando era una niña vi en él a mi salvador, y fui su mujer  porque no tenia de otra,me dio una nueva identidad, por años lo odie por separarme de mi hija pero no olvido que por él soy una mujer preparada.

Gonzalo, sabes de sobra los motivos que me obligaron a casarme con él, jamás sentí nada.

Eduardo: y Damian?

La mirada de Eduardo a Bárbara Ahora estaba un poco llena de curiosidad.

Bárbara calló unos segundos..

Bárbara: fuimos amantes durante tres años, lo nuestro sólo era algo físico, jamás involucramos sentimientos.

Eduardo: Entonces?

Bárbara: Necesitaba salir de la rutina, Casada con Gonzalo tenia una vida aburrida, Cuando conocí a Damian y lo hice parte del plan de Artemio, me dejé llevar por la atracción, entre nosotros jamás hubo amor, finalmente terminó por enamorarse De Fernanda.

Eduardo: Eso lo supe cuando murió , en fin, ya es hora de dejar todo lo que nos hemos dicho y pensar en nuestro presente y futuro juntos.

Bárbara: es cierto, de hoy en adelante estaremos juntos y disfrutaremos cada momento.

Un apasionado beso selló este gran inicio del bello romance, todo iba bien hasta que los dueños del bar los sacaron por que ya iban a cerrar, Bárbara y Eduardo acordaron no decir nada deslo que estaba naciendo entre ellos hasta que  Eduardo pudiera terminar su matrimonio con Fernanda.

Eduardo entró a su habitación con la intensión de cambiarse a la habitación de huéspedes.