Cap 44 "Problemas"

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Narra Lizzie

Quedé mareada. Quién diria que las teletransportaciones serian tan complicadas. Me encuentro en las gradas del campo de croquet de mi madre. Hay un gigantesco armario en el fondo del campo donde se guardan todos los accesorios del juego. Empiezo a caminar hacia el armario lo mas rápido que puedo aunque tengo que disimular bastante ya que no quiero que nadie sospeche. Hay naipes que guardan la puerta, estoy nerviosa cuando me acerco porque uno que me impide el paso.

- Alto ahí. Nadie tiene permitido entrar aquí a parte de su majestad la Reina de Corazones. -me dijo el naipe. ¿Quién cree que soy? Se lo dije

- ¿Quién crees que soy? naipe sin cerebro. Soy nada más y mada menos que Lizzie Hearts princesa de Corazones. Y te ordeno que habras esa puerta si no quieres QUE TE CORTEN LA CABEZA.

- Disculpe alteza pero no esta permitido....

- Shshsh. Mi madre y yo iremos a jugar croquet en el jardin y vine por los accesorios. Asi que abre la puerta de una vez. -porfin el naipe abrio la puerta y me dejo pasar. No fue tan terrible como pense.

Al entrar veo un montón de accesorios de croquet. Flamencos, erizos, aros y otros. Al final, por la parte izquiera localizo el juego de flamentos de mi madre. Estan en un estuche grande color rojo y estan marcados con un corazón. Empiezo a arrastrar el enorme estuche hasta la entrada. Saludo con mi mano al naipe y me dirijo hasta el jardin. Espero hasta que los chicos entretengan a los guardias. Luego de unos minutos oigo gritos desde la distancia. Podria asegurar que es la voz de Maddie.

- OIGAN MIS AMIGOS NAIPEESS! QUISIERAN UN POCO DE TÉ. - desde lejos veo a Maddie, Alistair y Bunny lanzandoles beyotas a los naipes.

- Forasteros, vamos -oí decir a los naipes.

Me apresure a cargar el maletín y corri a traves del jardin de croquet mientras los naipes no me veían y me adentre al laberinto.

Narra Kitty

Deje a las chicas donde me dijeron. Mi pequeño problema fue que no sabia donde estaba el salón con regalos de la reina. Sé que alguien me dijo pero, digamos que los felinos tenemos memoria de corto plazo.

Ya me he teletransportado como mil veces y nunca aparezco en el salón que es. Estoy agotada. Lanzo un suspiro, si sigo asi, tardare toda la eternidad en encontrar ese salón. ¿Por que este castillo sera tan grande?

Me teletransporto a la cocina por un poco de agua. Esto de hacer magia es agotador aunque no parezca. Oigo voces a lo lejos y me escabullo detrás de una repisa de platos. Son dos naipes que arrastran unas carretillas con regalos. REGALOS. El salón tiene que estar cerca.

Hay una enorme puerta a la derecha de la cocina por donde los naipes salieron hace unos momentos. Giro mi cabeza a ambos lados buscando guardias pero no veo ninguno. Corro rapidamente y entro en el salón. Una gran pila de regalos se extiende por todo el salón. Uff! Esto costara mas trabajo de lo que pense pero, no podemos hacer mucho asi que me pongo a buscar en la pila de regalos mas cercana que tengo.

10 minutos después

Luego de lo que me parecieron horas, días, meses y hasta años encontré el libro de cuentos legendarios. Estaba en la cima de una pila de regalos al final del salón. Agitada y muy cansada uso las últimas fuerzas que tengo en teletransportarme hacia el laberinto.

Narra Emily

Llegue a la terraza trasera. Aunque ese viaje con Kitty me dejó con la cabeza al revés. Me apoyo contra una pared mientras me pasa el mareo y espero a que los chicos hagan su trabajo. Según puedo ver desde aquí los chicos estan pintando las rosas blancas de azul. AZUL. Y estan salpicando pintura en las paredes y a los naipes. Ups! No creo que ha la reina le guste mucho ese color. Los guardias se alejan por lo que empiezo a caminar con el pecho acelerado del miedo que tengo al entrar ahí. Entro en la casita del Magnapresa. Estaba dormido pero el ruido que hize al entrar lo desperto.

Me quedo en piedra. Genial esto no era lo que queria que pasara. Haz algo Emily me decia mi conciencia.

- Perdona no queria molestarte. -le dije al Magnapresa. Me ruge y me muestra sus enormes colmillos. - Debe de ser horrible pasar todos los días aqui. Estrañas a tus amigos. - suelta un quejido y se sienta. Me siento frente a el en un rincón. Interpreto sus reacciones.

- No se lo que se siente asi que no puedo decirte nada alentador. Pero puedo ayudarte a salir de aquí. - me mira con sus enormes ojos. - Y te puedes quedar en mi casa hay un monton de jardines para que puedas estar. ¿Quiéres galletas? -le digo sacando una bolsita llena de galletas que Maddie me dio. Las pongo en mi mano y el saca la lengua para cojer las galletas. - ¿Quieres ser mi amigo? -sonrio. Él me empieza a lamer el rostro. Me doy cuenta que todavia es un cachorro con miedo - Interpretare eso como un sí. Creo que te llamare Spike.

>> Necesito la espada que esta guardada en ese cofre. Una malvada reina esta embrujando todos los cuentos y tenemos que detenerla. Me podrias ayudar? - alzó el cuello por lo que cojí la llave. Abró el cofre y saco la espada vórpica, y la coloco en el cinturón que tengo puesto.

- Bueno mi gran amiguito para salir de aqui va a ser el problema. -le digo mientras suelto sus cadenas. - Crees que puedas correr hacia el laberinto cuando yo te diga. -me lame la cara. Abró la puerta de la casita. El se agacha y me monto sobre su espalda. Me tuve que sujetar ya que creí que hiba a caer. A lo lejos veo a los chicos que son perseguidos por una gran cantidad de naipes. Es el momento. - Ya vamos. - le digo a Spike.

Spike empieza a correr hacia el laberinto. Justo en ese momento aparecen todos los chicos pero, acompañandolos un montón de guardias detras de ellos.....

Una vida soñada-Ever After HighDonde viven las historias. Descúbrelo ahora