ALBA // Crónicas de Vida.

Lluvia.

¿Cómo no amar el petricor que la lluvia me ofrende al caer en tan árido suelo?
Ese suave y hermoso aroma a suelo mojado que ya comenzaba a extrañar, añorando cada vez más... Extrañaba ese cielo grisáceo, el clima frío y el cristalino rocío en las plantas, dándoles un brillo singular y acedro, ya extrañaba la lluvia, esas pequeñas gotas rozando mi piel con tan delicado y suave tacto que inspira confianza.
¿Cómo vivir sin tan singular estado climático?
Aunque se sabe, nada es sempiterno; no logró imaginar una vida sin lluvia, sin rocío, sin... Petricor, la vida no sería vida porque sin agua no existiría, la angustia nos abarcaría y la muerte nos rondaría, la abstinencia nos consumiría...
Lluvia, lluvia...
Sin ti ¿qué haríamos?
Tu incolora presencia me ha inspirado. Hasta para escribir eres necesaria, o al menos para mi...
Que hermoso es observar al cielo y verte caer realizando tan espectacular camino, tu bonhomía presencia digna de seguir, de apreciar, en un momento de ataraxia...
Con algo de inquietud vuelvo a interrogar...
¿Cómo vivir sin ti?.