Al salir del lugar que me hizo admirar tu presencia por más de tres meses, mantuviste tu andar en pausa unos momentos.
Sólo yacías de pié sobre la acera.
Tus ojos cerrados.
Tu razón certera.
En una mano, un violín que representaba las pasiones de toda una vida.
En la otra, un pasado tan pasado como la vida misma.
En tu boca, nombres que nunca más serán pronunciados.
En tu alma vidrio roto filtrado de un corazón que quiere descansar.
ESTÁS LEYENDO
SAM ©
PoetrySam tiene secretos. ¡Oh, cuantos secretos! Sam habla con las flores, les cuenta su tormento. Pinta sus colores en un lienzo imaginario. Entre pinceladas, susurra comentarios. "Tú los mataste" "Mereces morir" "Lo siento". "No deberías vivir". Sam ama...