Capitulo 11: Contra la espada y la pared

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Sebastian vio cómo su querido rubio se llenaba de temor ante su presencia cosa que le encanto, se levantó para retornar por donde había entrado y tomó del suelo un botella que había traído consigo para dejarla sobre la mesa, Chris no sabía que tenía en mente ese castaño malcriado pero igual el miedo seguía vivo en el. Sebastian se tomo el atrevimiento de entrar a la cocina y coger dos copas para servir la bebida a el y a su presa.

–Deberíamos brindar. –dijo de la nada el castaño dando el primer sorbo.

Christopher no se movía solo le miraba fijamente.

–Vamos, no te haré nada malo.  –suplico mientras le tendía la copa.

El rubio tragó en seco, no tenia elección solo aceptar.

–Ves no pasa nada malo.  –Sebastian no duda en hablarle mientras Chris tomó de la copa que este le brinda.

Sebastian le obligaba con la mirada que bebiera mas y mas mientras el solo anhelaba que este perdiera ese maldito miedo y se soltara. Ya la hora del verdadero motivo por el cual el castaño estaba ahí se acercaba cada vez más. Christopher ya no tenía miedo, se sentía sereno a causa de que se tomó más de la mitad de la botella que Sebastian le había traído. El castaño empezaba desde su interior a pedir a gritos el cuerpo de rubio, los ojos de Chris se sentían pesados, su cabeza daba vueltas.

Christopher veía borroso pero en esos momentos de debilidad de trata de levantar, tenia sus ojos a medio cerrar y apenas divisaba donde pisaba, Sebastian no dudó en seguirle hasta su cuarto. Mientras iba tras de este se iba deshaciendo de su ropa, pero cuando sus claros ojos le brindan el momento que tanto anhelaba estos no dejaron de brillar.

Christopher había caído en su sucio juego. Sebastian no podía borrar de su perfecto rostro esa mueca de satisfacción tras haber conseguido otro juguete que le complacería.

L'instinct animal → Stucky / EvanstanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora