DIECISÉIS

198 43 66
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Vaya bienvenida que he tenido —intentó sonreír.

—Lo siento... Te recompensaré por eso.

—Tú no tienes que hacer nada, aunque me conformaría con una pequeña explicación. No entendí que pasó. ¿Hice algo malo?

—¡No! Ni lo pienses, no hiciste nada malo —le frené—. Y tampoco sé exactamente qué pasó, pero sí sé que él tiene muy poca paciencia y es muy mandón.

—Tendría que haberme quedado donde estaba viendo tu aspecto magullado —comentó—, ¿qué te sucedió?

—Es una larga historia.

—¿Tuvo él algo que ver? Porque si es así...

—Él no tiene nada que ver con ellas, tranquilo —¿O tal vez sí?

No parecía muy convencido de mi respuesta, aunque yo tampoco lo estaba, ya no tenía nada claro.

—Y, ¿qué haces aquí? ¿Cómo? ¿Dónde has estado todo este tiempo? —pregunté atónica recordando que acababa de llegar de donde sabe quién.

—¿Eso mismo puedo preguntarte yo también? —bromeó.

—En serio, ¿dónde has estado estos meses?

—Supongo que nos sucedió algo similar —añadió cabizbajo—. Vinieron unos hombres a nuestro instituto hace unos tres meses. Durante esos meses, nos estuvieron investigando como a ratas de laboratorio y luego, fuimos desechados como basura cuando ya no les hicimos falta. Más de la mayoría fuimos descartados y solo conservaron a unos escasos compañeros, a los alumnos más mayores del centro.

No sé parecía ni un poco a nuestra versión.

—A los que nos rechazaron, escapamos y llevábamos vagando por las calles por semanas, buscando a más personas, niños, adolescentes... Hasta que hace apenas dos semanas que nos llegaron rumores de vosotros y os estuvimos buscando hasta el día de hoy, que os encontramos.

—Necesito que me cuentes más cosas.

—Bien, ¿cómo qué? —rio, aun si entender—. Aunque yo primero, también tengo mis dudas.

—Me parece justo, adelante.

—¿Qué os ha pasado a vosotros? ¿Cómo llegasteis hasta aquí y cuantos meses lleváis?

—Lo que nos ocurrió no tiene nada que ver con vuestra experiencia.

—¿A qué te refieres?

—Tuvimos problemas con ellos desde el primer minuto. Llegaron cuando estábamos escondidos por nuestros profesores, hubo disparos y muchos murieron al intentar huir —relaté con la mirada ausente, reviviendo aquellas imagines que me perseguían por las noches—. No tengo ni idea de cómo llegamos tan lejos, tuvimos suerte de escapar.

Naturae «Lux» ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora