Querido Dios

Capítulo 32

Querido Dios,

Voy rumbo a la estación de trenes para recoger a Candy. Finalmente la veré. Candy, mi Candy finalmente ha venido a verme. Dios, vendería mi alma al diablo si lograra que las circunstancias fueran diferentes con lo ocurrido con Susana para desaparecer para siempre. No puedo esperar para verla; ¡La amo tanto! Estoy en la estación y la veo, ha confundido a alguien conmigo; a pesar de mi tristeza, estoy sonriendo al verla.

Caminé hacia ella, la tomé de la mano y corrí con ella... entonces me detuve porque la asusté. Estaba tan feliz de verla, quería abrazarla, pero no pude, de otra forma, no seré capaz de dejarla ir... Ella sonreía, se veía tan bella, tomó todo mi esfuerzo no abrazarla. Estaba tratando de olvidarme del asunto de Susana por un momento y disfrutar el tiempo con Candy. No quería arruinar nuestro momento por Susana, se lo diré después del estreno. Así que me dispuse a disfrutar de su compañía, me dijo que ahora me veo mayor... ¿Verdad que es una lindura? ¡Bebimos algo en un pub, después quise llevarla a su hotel pero ella quería ir a mi departamento. Fuimos, mientras yo preparaba un poco de té ella bromeaba un poco, de pronto hizo un movimiento que la hizo caer sobre mí con el té; eso me hizo recordar lo bien que la pasamos en Escocia. Ella estaba tan cerca de mí, quería tomarla en mis brazos y besarla... Pero... en cambio la llevé al hotel y regresé a casa. Entonces encontré una nota de la señora Marlowe informándome que Susana estaba molesta debido a que no fui a verla porque estaba con Candy... fui a ver a Susana... y como siempre, todo lo que hice fue escuchar su autocompasión de tal forma que mi culpa se incrementa... de regreso a casa caminé, pasé frente al hotel de Candy. Ella había venido desde tan lejos para verme actuar de Romeo. Yo sería el mejor Romeo para ella, debía ser fuerte por ella. Pero no podía dejar de pensar en Susana... cada vez que pensaba en Candy, pensaba en Susana... ¡Simplemente esto es el más puro infierno! Había deseado que Karen fuera Julieta y se cumplió mi deseo, ¡Ten cuidado con lo que deseas! Esto es un buen momento para decir eso. El ensayo general fue un infierno, no estuve del todo bien. Pero Hathaway confía en mí, tengo que estar bien para mañana.

He estado leyendo para estar listo para salir a escena y oro para que me des la fuerza que necesito en el escenario, porque estoy a punto de colapsar. Pero debo de hacer esto por Candy. Al representar a Romeo no podía dejar de pensar en Candy, en la conversación que tendríamos después del estreno. Pero después del intermedio ella no estaba ahí... ¿Qué pasa? No podía esperar a que la puesta en escena llegara a su fin y no supe cómo lo logré... pero en cuanto el telón cayó, recibí los aplausos y salí rumbo al hospital solo para descubrir que todos estaban buscando a Susana, finalmente escuché que estaba en la azotea y corrí hacia allá... ¡estaba sorprendido de ver a Candy mirándome! ¡Candy! Susana me llamó... Yo tenía dos mujeres que me amaban frente a mí y tuve que dirigirme hacia Susana y alejarme de Candy, casi corro hacia Candy... pero corrí para levantar a Susana y llevarla de regreso a su cuarto... ella es muy delgada, una carga muy ligera pero sentí que mis brazos estaban pesados como plomo y mi alma se apesadumbró más... puse a Susana de regreso en su cuarto y me dijo que deseaba ver a Candy. Fui a la sala de espera a llamar a Candy y para mi enorme sorpresa, ¡ella se levantó y me dijo que regresaría a Chicago con Albert! ¡Estaba muy sorprendido! ¡No habíamos hablado todavía! ¿Qué estaba sucediendo? Candy, tan buena como es, se resta a sí misma de esta dolorosa ecuación... Ahora la amo aún más por eso. ¡Oh Dios! Ella es la mujer que necesito! ¿Por qué has permitido esto? ¿Por qué me has puesto en esta posición? Soy demasiado cobarde para decirle a la señora Marlowe que puedo cuidar de su hija sin comprometerme a ella, ¡que si pierdo a Candy me perderé a mí mismo y moriré! Candy salió del cuarto de Susana lista para regresar a Chicago... ni siquiera recuerdo nada más, lo único que recuerdo es que le dije que la acompañaría a la estación. Ella se rehusó, bajó las escaleras, la tomé del brazo e insistí, dijo que solo sería más doloroso y continuó su camino, la vi partir y percibí cómo mi corazón, mi alma misma se iba con ella... corrí y me aferré a ella, la tomé de la cintura, hundí mi rostro en su cuello, en su cabello... le dije que no deseaba perderla, que habría querido que el tiempo se detuviera para siempre, debido al momento estaba llorando, lloraba sobre mi amor, todo este amor en vano, no pude explorarlo o vivirlo ahora que ella ha partido, se ha ido para siempre, era una despedida, así que sí, yo lloré... era mi Candy, mía, la que soñé durante mucho tiempo, y ella me dejaba ¡Para siempre! ¿Por qué? ¡Porque Susana Marlowe salvó mi vida y ahora tengo que pagar por ello por el resto de mi vida! Candy, la esencia de mi alma, mi musa, mi otra mitad, mi corazón... se iba para siempre... murmuré algo acerca de que le suplicaba que fuera feliz sin mí, o algo así, y ella lo prometió, me llevó una eternidad, pero finalmente la dejé ir... y ella corrió fuera del hospital, ella corrió fuera de mi vida, porque no tuve el coraje de decirle que se quedara conmigo y enfrentáramos a la señora Marlowe... fui al cuarto de Susana y miré por la ventana. Candy se alejaba mientras caminaba, ni siquiera volteó una sola vez... debió haber estado tan herida, no lo logramos... teníamos mucha esperanza... le envié un boleto de viaje sencillo y ella sabía que era para que se quedara a mi lado para siempre, debió haber estado devastada y es por mí culpa, por mi miserable vida que Susana Malowe osó salvar ¡solo para reclamarla! ¡Por todo eso, tuve que despedazar la vida de mi querida dulce Candy! Susana me dijo que todavía podía alcanzarla... No sé por qué no la escuché... honor, ¡Ese maldito honor que me enseñaron! Le dije a Susana algo que no estaba pensando y la más grande mentira que alguna vez le haya dicho a alguien, le dije a Susana que la había elegido a ella... pero era el rostro de Candy el que imaginaba para encontrar el coraje de mentirle de tal manera... Escocia, las mejores vacaciones de verano de mi vida... mi señorita Pecas... trajiste un rayo de sol a mi vida y ahora te has ido... adiós mi amor, te amaré por siempre. Pero lo siento Dios, Candy y yo sacrificamos nuestro amor... ¡Por deber! ¡Igual que mi padre hizo con mi madre! ¡No puedo creer haber hecho esto! Había jurado que no seguiría los pasos de mi padre... ¡Demasiado para esto! Soy solo un perdedor y una equivocación que no pudo mantener su promesa a la mujer que amó y perdió. Ya nada tiene sentido para mí solo tengo ganas de abandonarlo todo... Eso es lo que haré.

El teatro que solía ser mi sueño, ya no me parece tan atractivo. Representar a Romeo, ya no es divertido... Candy, Candy, Candy, es todo en lo que puedo pensar... Creí que la tenía asegurada... ahora la he perdido... Candy, Candy, Candy, eso es todo en lo que puedo pensar. Susana es tan linda, tan feliz, yo no puedo ser feliz con ella. ¡No puedo! La miro y pienso en Candy; ¡ella es la razón por la que amo a Candy! ¡Debió haberme dejado morir! Porque ahora, estoy muerto sin mi Pecosa, no puedo vivir... Por favor Dios, te lo ruego ¡Toma mi vida! Haz que todo esto sea una pesadilla, déjame despertar y encontrar a Candy a mi lado... Por favor, haz que todo esto desaparezca, déjame tomar el lugar de Susana... ¡No, solo toma mi vida y déjame morir Dios! ¡Te lo suplico, solo mátame ahora!