Esta es una selección de cuentos de terror cien por ciento creados por mí, les invito a leer las cosas horribles que produce mi mente, veamos que tanto puedo asustarlos con cada una de estas narraciones de terror.
Hola mi nombre es Jorge, tengo 20 años y actualmente curso el tercer año de la universidad, no sé qué es lo que estoy contando pero necesito que alguien lo sepa, hasta ahora no estoy seguro si fue un sueño o algo real, ¿por dónde empezar? Creo que por el principio ¿no?
Una feria había llegado a la ciudad, pero lamentablemente solo estaría un día, y aun más desafortunado todo ese día tenia clases de las diferentes materias de mi carrera en la universidad, bueno mi decisión fue fácil, iría a mis clases, pero ese día al llegar a la entrada de la facultad me encontré con mi amiga Ana, quien también sabia de la feria, ella trato de convencerme de que fuéramos los dos a divertirnos y por algún motivo lo logro, no sé porque ni cómo. Según dicen las mujeres manipulan a su antojo al hombre que gusta de ellas, pero ese no era mi caso, en serio, Ana no era más que mi amiga para mi, de hecho recién la conocí este año.
Bueno como sea el punto es que fuimos juntos a la feria, y estando allá nos encontramos con un amigo, David, el también decidió faltar a sus clases de contabilidad, los tres la pasamos increíble en la feria, creo que fue el día mas divertido de mi vida, aunque paso algo inesperado, mis padres estaban ahí también y casi nos ven, supongo que ellos también vinieron para pasar el tiempo, pero bueno, no nos vieron así que no hay problema.
Ya casi atardecía así que nos íbamos a casa, luego de caminar por un rato llegamos a una avenida y debíamos pasar por un puente que conectaba ambos frentes de la calle, era una calle ancha, así que el puente era largo, una vez atravesáramos el puente los tres nos separaríamos.
Todo era tranquilo, el cielo estaba nublado, apenas dimos unos pasos en el puente Ana se desplomo, parecía que había perdido el conocimiento, sin importar lo que intentara ella no despertaba, la di vuelta y cuando lo hice casi me muero del miedo, pues vi con horror que sus ojos había desaparecido, y habían dejado en su lugar dos cuencas vacías ensangrentadas.
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"David ¿Qué hacemos?" dije con la voz entrecortada, pero él no respondió, David solo veía al piso con la mirada perdida, por más que le hablaba el no me contestaba y tampoco se movía, el parecía una estatua, me le acerque y lo toque del hombro y lentamente alzo la vista.
Apenas David levanto completamente la mirada vi que a él le escurría sangre de la boca, oídos, nariz y ojos, en ese momento una lluvia comenzó a caer, mire a todos lados para ver si alguien podía ayudarnos y note que el puente y las calles cercanas estaban desiertas, busque con mi vista a quien fuera, pero lo único que pude encontrar solo fueron unas siluetas negras al otro lado del puente, estas venían acercándose, cada una a su propia velocidad y todas separadas por diferentes distancias, venían muy lentamente hacia donde estábamos, me limpie el agua de lluvia de mi rostro y apenas vi mi mano con el liquido note que la lluvia que caía era de sangre.
Estaba hiperventilándome, rogaba porque esto fuera una pesadilla, estaba al borde de la locura, entonces David por fin dijo algo, pero no lo que esperaba, con una voz demoniaca el me advirtió que si no me apresuraba en cruzar el puente moriría, cada segundo que pasemos Ana y yo debajo de la lluvia de sangre es más tiempo de vida que perdemos, después comenzó a emitir una risa demoniaca. Se me pasó por la cabeza que esto fuera una broma, pero que Ana no tenga ojos, que a David le escurría sangre de varios lugares y la lluvia de sangre eran cosas demasiado elaboradas para ser una simple broma.
