Hacia el lunes, iba camino a la escuela; llegue y divise la camioneta de Alonso, camine hasta ahí y lo mire con ella. Decidí no interrumpir y escuchar.
-Entiende Margo, lo nuestro lo terminaste hace años.
-Pero estoy segura que aun me amas-se acerco-.
-Yo no te amo, no puedo amarte, nunca más lo haré.
-¡¿Por qué no?!
-¡Porque estoy enamorado de otra!
-¿De quién? ¿De la suicida? Ayer Bryan me la presento, y no es la gran cosa, ¿Qué le viste?
-Su inocencia.
-¿Inocencia? Querido, esa es una zorra, se metió con Bryan.
-La violo que no es lo mismo.
-¿Se metió contigo?
-Eso no es asunto tuyo.
-Entonces lo hizo-sonrió-.
-Escúchame bien maldita víbora-la tomo del brazo, fuerte supongo-, más te vale que nos dejes en paz, si me entero que andas escupiendo de tu veneno con Zoe... te mato.
-¿Tú matarme?
-¿No me crees?
Vi que abrió la puerta de la camioneta y la hizo meterse un poco, no supe más, solo la vi salir de ahí mirándolo un poco asustada. Él camino y paso por un lado de mí, me miro y se detuvo.
-¿Escuchaste?
-Mm... No, no escuche nada.
-Ven.
Me atrajo hacia él y me abrazo. Beso un costado de mi cabeza y me alejo.
-¿Cómo estás?
-sonreí-. Súper-tome su mano, helada como días antes-... supongo que tu concepto de frialdad es muy estricto.
-Demasiado-entrelazo su mano con la mía-... por alguna razón contigo no puedo ser así.
-Lo fuiste al principio.
-Sí, pero eso ya paso.
Me tomo por las mejillas y me beso, yo creí que sería como esas parejas raras, donde son novios a escondidas, pero no, me beso frente a varios chicos de la escuela, frente a Alessa. Se alejo y me sonrió, tomo mi mano y caminamos hacia el edificio. Todos nos miraban, obvio Alonso ahora era popular y yo... yo era yo. Llegamos a su casillero, lo abrió y mire su interior, fotografías de él con todos, cuando digo todos incluyo también a Alan.
-¿Ese es Alan?
-Sí-tomo la foto-, antes éramos amigos-la dejo en su lugar-.
-¿Y que paso?
-Él... se enamoro.
-¿De quién?
-cerró el casillero-. De mi novia... de Margo.
-¿Hablas en serio?
-Muy en serio, Alan desde ese día siempre ha querido obtener lo mismo que yo.
-Vaya... él nunca me dijo nada.
-No tendría porque hacerlo-tomo mi mano-, es obvio que no quería que te dieras cuenta de que me envidia.
-Pues la ver...
No me dejo terminar, me dio un beso, un beso tierno y con cariño.
-¿Y eso?
-Te quiero.
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ANGEL SUICIDA
Teen FictionDicen que los suicidas son cobardes pero si yo te dijera, "toma esa navaja y córtate" tú no lo harías ¿cierto? Solo por el hecho de que duele... ahora ¿Quién es el cobarde? ¿Tú o yo? Mi nombre es Zoe y soy una suicida, no elegí serlo simplemente...