ANGEL SUICIDA

CAPITULO 20

PARTE #3

Zoe: No podía dejar de llorar. Necesitaba a Alonso y creo que hice lo correcto. Preferiría que me tuviera como un recuerdo y no como una puta.

-Zoe, ya está la comida.

-No tengo hambre, mamá.

-¿Pasa algo?

-Termine con Alonso.

-¿Por qué?

-Es que... me bese con Bryan y... Lily tomo video y dijo que si no lo dejaba se lo iba a enseñar a Alonso y lo deje.

-¿Cómo se te ocurrió, Zoe? Besarte con Bryan, ¿Estás loca?

-Ya no me digas nada, estoy muy mal.

-Mm, está bien. Pero tienes que hablar con él.

-No. Tengo que alejarme de él, para siempre.

Mi madre negó y salió de mi habitación. En eso un mensaje me hizo ir por mi laptop. Era una notificación.

-"Lily cumple lo que promete. Pero nada impide que yo suba este video." ¿Qué? "solo para que vean el tipo de mosca muerta que eres. Bien que disfrutaste." ¡¡¡Maldito!!!-avente la laptop contra la pared-.

-¡¿Qué pasa?!

-¡¡Bryan subió el video, lo subió!!!

-No es tan grave...

-Claro que lo es. ¡¡¡Tuve relaciones con él en el aula del conserje!!!

Okey, eso no estaba planeado.

-¿Qué?

Se acerco a mí y soltó una fuerte bofetada en mi mejilla, volteándome la cara y dejando que mi mejilla ardiera horrible.

-¡Eres una zorra!

Salió de ahí súper enojada. Corrí al baño y me desvestí quedando en ropa interior. Tome mi celular y mire las notificaciones del video.

-"Zorra". "Buen faje". "¿Cuándo me dejas a mí?". "Sabía que eras una mosquita muerta, cuando me dejas... ver esas piernas abiertas".-cubrí mi boca-... "Puta, como te odio".-vi el nombre del contacto-. ¿Alonso? Alonso... él...

Deje caer el celular al lavabo, no tenía agua afortunadamente; mis manos temblaba, yo temblaba, me mire al espejo y todos esos comentarios se repitieron en mi mente. Mire mis brazos, las cicatrices del martes y los nudillos golpeados de ayer me hicieron sentirme peor. Empecé a jalar mis cabellos con desesperación. No sabía que hacer. Alonso me había dicho puta, me odia. Me deje caer de rodillas y tome uno de los rastrillos que tenía ahí. Lo quebré con mis propias manos y tome la cuchilla, me mire las venas.

-"Hazlo..." no... "Vamos, acaba con el dolor." "A ellos no les interesas, es más ni cuenta se darán de que ya te moriste." Pero, Alonso... "Él ya no quiere saber nada de ti, ¿no viste? Te llamo puta." Ya basta... "Nadie te quiere aquí." ¡Basta! "Mejor muérete de una vez." ¡¡¡Basta!!! Ya déjenme en paz... "la única manera de estar en paz, es usando esa cuchilla." Eso no es verdad. Tengo que hablar con Alonso...

Me levante del piso y tome mi celular. Me coloque un suéter holgado que cubría hasta mis piernas. Me senté en mi cama cruzando mis piernas y mire el contacto de Alonso.

-Vamos, Zoe... hazlo, enfréntalo.

Toque su nombre y apareció "llamando". Espere unos segundos y nada. Hasta que entro al buzón. Colgué y volví a marcar.

Alonso: Tenía varios minutos recibiendo su llamada. Si cree que le contestare está muy equivocada.

Zoe:

-Por favor, contéstame... mi amor... contesta...

-¿S-sí?

-¿Alonso?

-¿Qué se t-te ofrece?

Su voz se escuchaba cortada, creo que estaba o estuvo llorando.

-¿Viste el video?

-Claro que lo vi, todo mundo lo vio. Te divertiste, he.

-Eso... puedo explicarlo... y-yo...

-Eres una zorra, Zoe... no me llames.

-Espera... no me cuelgues... necesito hablar contigo, por favor.

-Ahora no puedo...

-¿Cua...?

-Alonso, cuelga por favor.

-¿Qué fue eso?

-Estoy... con alguien.

-¿Qué?

-Lo mejor será que ya no hablemos nunca... volví con Margo.

-¿Qué?-mi voz ya no salía-.

-Lo siento.

-¡No, espera... no me puedes hacer esto, no puedes!

-Adiós.

-¡¡Alonso!!

Deje caer el celular al notar que me había colgado.

-Lo perdí, lo perdí para siempre... soy una idiota.

-Toc, toc-escuche a alguien, Scott-. ¿Se puede?-dijo abriendo la puerta-.

-¿También vienes a restregarme en la cara mi error?

-No. Vengo a informarte que iras al psicólogo.

-¿Qué? Yo no necesito a ningún psicólogo.

-Claro que lo necesitas. Mírate los brazos.

-Puedo dejar de hacerlo cuando yo quiera.

-Y ¿Por qué no lo haces?

-Porque no quiero.

-¿Por qué tuviste sexo con Bryan?

-mis ojos empezaron a nublarse-... No sé... él tiene razón, soy una zorra.

-No lo eres, solo estas confundida.

-Engañe a Alonso... eso es lo que soy.

-Y ¿Por qué no hablas con él?

-Ya lo hice, regreso con Margo.

Llore y mi hermano me acuno entre sus brazos. Hace mucho que no sentía el calor de mi hermano.