¡Te vi! ¡Una vez más te vi! Este fue el segundo mejor día que he tenido. Ya que el mejor día lo ocupaste cuando me dedicaste una oscura mirada, haciendo que me sonrojara como un tomate.
Tu cabello iba cubierto por un gorro de lana y aunque ibas escuchando música y con la vista fija en la ventana...cuando me subí, tus oscuros ojos se toparon con los míos. Y una vez más sentí quedarme sin respiración.
¿Qué me has hecho? Con una sola mirada logras que me sonroje, que tenga un revoloteo en mi estómago. Pero como siempre ese momento fantasioso y mágico termina cuando mi parada se acerca y debo bajarme.
ESTÁS LEYENDO
El Chico del Autobus
Short StoryMierda Mis piernas se quedan paralizadas, mi corazón palpita rápidamente y en mi estómago siento un gran vacío y a la vez un gran revoloteo al ver a ese chico sentado junto a la ventana. ¡Es tan Sexy! Que quisiera pasar mi manos por su oscuro cabel...