Camine hacia mi casa, mis pies se movían por sí solos. Sin ninguna orden de mi cerebro, ya que este no dejaba de pensar en ese chico del autobús... Ryan.
Entre a mi casa, al parecer no había nadie. Subí a mi habitación ordenándome a mí misma en que dejara de pensar en Ryan.
Saque mis apuntes de mi mochila, los exámenes estaban cerca debía estudiar. Pero un pequeño papel azul cayó al suelo llamando mi atención. Frunciendo el ceño lo recogí. Con letra pequeña y un suave trazo estaba escrito:
"Llámame"
Y un número de teléfono estaba escrito debajo de esta palabra. Pero ¿Quién me habría dejado su número de teléfono?... Oh no.
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El Chico del Autobus
Short StoryMierda Mis piernas se quedan paralizadas, mi corazón palpita rápidamente y en mi estómago siento un gran vacío y a la vez un gran revoloteo al ver a ese chico sentado junto a la ventana. ¡Es tan Sexy! Que quisiera pasar mi manos por su oscuro cabel...