Él acelera mi corazón a un ritmo que ni yo puedo controlar. Mis pies empezaban a fallar, advirtiéndome que si me acercaba más a él, ellos ya no responderían. Decidí ignorarlos al igual que mi corazón que amenazaba con salirse de mi pecho.
Todo en él, desprendía perfección. Sus jeans sea ajustaban lo necesario para lucir sus piernas que subían hacía ese increíble y apetecible trasero; que era tapado un poco por su camisa gris. Sin lugar a dudas, estaba guapo y sexy.
Al sentir mis pasos detrás de él volteo, y una sexy sonrisa se plasmó en sus labios. Un enjambre de abejas me ataco y mi corazón dejo de latir cuando me dijo:
-Hola.
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El Chico del Autobus
Short StoryMierda Mis piernas se quedan paralizadas, mi corazón palpita rápidamente y en mi estómago siento un gran vacío y a la vez un gran revoloteo al ver a ese chico sentado junto a la ventana. ¡Es tan Sexy! Que quisiera pasar mi manos por su oscuro cabel...
