Capítulo 37 - El Cumpleaños 2/2

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Había música abajo, y si la fiesta se había realizado le habían pedido permiso al profesor Dumbledore y él había aceptado, estaba arriba en mi habitación arreglándome, tenía una linda camisa de tiras  rosa bordada con forma de flores con una caída suave, y un short color celeste agua igual que mis ojos, y mi cabello castaño dorado caía suelto con risos. Y un maquillaje suave.

No tenía ánimos de ninguna fiesta pero los chicos estaban emocionados al igual que Cedric así que finalmente acepte.

Mire mi celular... nada, yo no sé porque seguía teniendo esperanzas, ¿Por qué ellos querrían hablar conmigo? Si yo solo les recordaba a la muerte... ellos estarían felices si se cumplía lo que Deborah había dicho. Quizás si yo moría, su vida estaría más tranquila. Tendrían paz, ni siquiera mi hermana Cami me quería.

Me guarde el celular en el bolsillo del short y baje, reí al ver que todos bailaban y reían. ¿her y Ron estaban bailando? Los mire con una sonrisa en el rostro, el lugar tenia globos rosas por todos lados y al lado de la chimenea una torta de dos pisos con una muñequita mágica que saludaba y se movía al ritmo de la música parecida a mí. Cedric se acercó hasta las escaleras y me tendió su mano la que no dude en tomar. Me abrazo levantándome hasta separarme del suelo y llevarme a donde todos bailaban, la música era movida, por un momento olvide todo y baile con él.

Nuestros cuerpos estaban cerca y me sentí algo incomoda así que me separe un poco el no pareció notarlo, me reí por los movimientos extraños de Fred quien bailaba con Angelina.

– parece que todos se están divirtiendo – le comente a Cedric

– la pregunta es ¿tú te estas divirtiendo?

– un poco – admití – si – sonreí – lo estoy haciendo

– eso es lo único que importa ___. – asentí sonrojada y el deposito un beso en mis labios, seguimos bailando hasta que Harry se acercó a mí para que bailara con él y Cedric con gusto lo dejo.

– Harry Potter bailando – bromee con el – nada mal ¿eh Potter?

– tonta – tomo mi mano y me hizo dar una vuelta, me reí divertida – pensé que no te vería sonreír en todo el día – eso hizo que la sonrisa se me borrara del rostro – no, no dejes de hacerlo. ¿es lo de siempre?

Asentí con la cabeza sin hablar del tema, voltee y me sorprendí de ver a Cedric y a Cho bailando, ella no dejaba de sonreír, nunca la veía así con Harry.

– También te diste cuenta – lo mire sin entender – creo que le gusta más tu novio que yo – dijo algo serio pero no molesto, ni triste. Quise decirle algo pero de mi boca no salió nada.

– ¿ya vuelvo si? Quiero tomar un poco de aire – el asintió – si Cedric te pregunta le dices que fui a dar una vuelta ¿está bien?

– cuídate, no tardes.

Al salir de allí lo primero que hice fui ir a la torre de astronomía, ese lugar me daba tranquilidad, tenía tiempo sin ir y necesitaba aire. Al llegar arriba me recargue de una columna y me deje caer al suelo, recogí mis piernas y las abrace y metí mi cabeza en ellas mientras el llanto comenzaba a salir.

Lo había intentado había intentado que esto no me afectara de esta manera pero no podía más. Si me distraían quizá no explotaría pero yo sabía que esa diversión no duraría toda la noche, saque mi celular del bolsillo y mire la hora faltaban solo dos horas para que mi cumpleaños terminara y no me habían llamado ni mandado una carta ni un mensaje. Lo lancé con fuerza hacia el suelo mientras las lágrimas salían a montones de mis ojos.

Volví a ocultar mi cabeza en mis piernas y llore, tenía que soltar todo esto... mi cuerpo temblaba y me sentía más sola que nunca. Solo quería que este día acabara.

– Feliz cumpleaños Granger – escuche, mi llanto ceso un poco al escuchar esa voz, pero no me moví de mi posición, levante poco a poco la cabeza y ahí estaba el, agachado justo al frente de mi mirándome fijamente con esos ojos grises que me derretían. ¿Pero que hacia aquí?

Draco Pov

Había subido a la torre de astronomía, pensando en ella. Pronto acabaría su cumpleaños y ni siquiera había podido hablar con ella. Ni para molestarla solo un poco. Cuando llegue arriba un llanto desconsolador atrajo mi atención, camine sin hacer ruido y me encontré con ___, estaba en el suelo llorando con las piernas en su pecho y su cabeza escondida.

Sentí algo extraño en mi pecho, pero lo ignore, ¿Qué le pasaba? Porque las dos veces que la había encontrado aquí estaba llorando. Aquella vez la culpable de sus lágrimas era su madre cuando hablaba con ella con el aparato muglee que ahora estaba en el suelo, roto.

Con el máximo cuidado me acerque a ella hasta quedar justo al frente y me agache para estar a su altura, ella no me escucho, supongo que porque sus lamentos se hacían cada vez más fuertes.

– Feliz cumpleaños Granger – dije por fin luego de unos segundos, su cuerpo dejo de temblar y se tensó, sonreí levemente al ver su reacción, ella había reconocido mi voz, poco a poco elevo su rostro hasta mirarme fijamente eso me destrozo, sus ojos estaban rojos y llenos de lágrimas su labio inferior temblaba y su pecho se movía rápidamente junto con su respiración – no llores – limpie su mejilla con delicadeza, no sé por qué carajo estaba actuando así, ella parecía sorprenderse por mi gesto, yo estaba igual que ella.

Me senté a su lado y ella recargo su cabeza en mi hombro, mientras lloraba, yo tome su mano y la acaricie haciendo círculos con la mía, esperando que se calmara, toque con mi mano libre el bolsillo de mi pantalón y sentí lo que había dentro, dude unos segundos pero al final lo saque.

– sabes, pensé dártelo después – hable y ella se separo un poco de mi para prestarme atención – luego pensé en no dártelo nunca pero... creo que lo mejor es hacerlo ahora ya que estas así de triste – me miro sin entender y le extendí la pequeña caja que tenía en mi mano

– ¿Qué es esto? – dijo tomándola y hablando por fin, su voz estaba ronca y debil.

– es para ti, ábrelo

Ella lo hizo y sus ojos se abrieron como platos al ver lo había dentro, sonreí un poco al ver que había dejado de llorar, ella saco el relicario de plata en forma de corazón que había allí. Su boca se abrió levemente sorprendida y me miro con un brillo en los ojos.

– ¿de verdad es para mí Draco? – Asentí – ¿Por qué?

– sabes, no lo sé – dije sincero negando con la cabeza– solo tómalo, es tuyo – ella lo abrió y se rio

– tiene una D grabada adentro, esta precioso, gracias... ¿Me ayudas? – pregunto extendiéndome el relicario, lo coloque mientras ella tomaba su cabello hacia un lado y se lo puse, sintiendo el olor de su perfume de vainilla.

Estábamos cerca, tanto que podía escuchar los latidos de su corazón no paso un minuto cuando tome su rostro entre mis manos y nuestros labios se juntaron. La verdad es que jamás había besado a alguien con tantas ansias, jamás había sentido ese vacío al separarme de alguien. Esto estaba mal... yo tenía que odiarla, igual que antes. Pero creo que ya era demasiado tarde. Cuando nos separamos para respirar ella hablo.

– ¿entonces que pasara ahora? ¿Fingimos que nada ha sucedido entre nosotros? – me miró fijamente a los ojos

– es la única opción que tenemos, además tú tienes a tu novio esperandote ¿no es asi? – ella bajo la vista

– no podemos seguir así – dijo finalmente y estuve de acuerdo

– siempre hemos sabido que esto no iba llegar a ninguna parte, adiós Granger – antes de levantarme le di un último beso en los labios y me fui.

Sαy Soмєтhιng ~ Drαco MαlfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora