Todo el partido de Quidditch estuve pensando en aquella risa burlista y los ojos color gris que me hacían temblar, no sabia como podía gustarme una persona como el, lo único que rescataba era que su mirada muy en el fondo mostraba un inmenso dolor, como si el sufriera por algo, quizás de soledad. No lo podía decir con exactitud pero la verdad es que jamás lo sabría, pues el nunca se acercaría a mí ni yo a el aunque quisiera.
Luego del partido nos fuimos nuevamente a la tienda de acampar, ya hay Ron no dejaba de mencionar a Viktor Krum el buscador del equipo nacional de Quidditch de Bulgaria. Todos reíamos hasta que un momento se escucharon gritos de terror afuera y el Sr. Weasley llego rápidamente a sacarnos.
– ¡debemos irnos de aquí rápido! – grito el sr. Weasley
Harry y yo nos miramos y el sin dudar un segundo me tomo de la mano y corrimos, afuera todo era un caos, gente gritaba y corría tropezándose con los demás y con nosotros.
– ¡Son mortifagos! – alguien grito y mi corazón se aceleró de miedo
Nosotros seguíamos a los Weasley pero de pronto todo empeoro y ellos agarraron otra dirección, Harry y yo seguíamos luchando por no soltarnos de las manos pero la multitud termino separándonos, yo grite su nombre pero alguien me tomo del brazo fuertemente y vi a Harry caer al suelo y varias personas pasándole por encima.
Chille de miedo y cuando vi quien me estaba tomando del brazo mi corazón se detuvo, no podía verle el rostro pues era un hombre con túnica negra y una capucha realmente escalofriante.
– ¡suélteme! – le grite –¿Quién demonios es? – busque mi varita pero era inútil la había dejado en la tienda – ¡ayúdenme! – grite mientras aquel hombre seguía arrastrándome lejos del brazo. Entonces lo vi, vi al rubio platino por quien mi corazón palpitaba.
Él me estaba mirando a una distancia no tan lejana, tenía su varita en la mano y parecía no saber que hacer, por primera vez en mucho tiempo lo vi con una expresión que no sabía descifrar.
– ¡Draco ayúdame! – le suplique gritando – ¡Draco no me hagas esto ayúdame por favor! – mi corazón cada vez palpitaba más lento al darme cuenta que el solo se quedó hay mirando, sin hacer ningún esfuerzo por ayudarme. Mis ojos pronto comenzaron a empañarse de lágrimas.
– ¡Inmobilus! – escuche de una voz conocida, pero no la del rubio. Y la persona que me tomaba del brazo había quedado inmovilizada, rápidamente me solte de su agarre y me gire para ver quien me había ayudado.
– Cedric – dije su nombre aliviada y rápidamente corrí hacia el a abrazarlo
– ¿estás bien? – me pregunto con un tono de vez dulce y yo asentí con la cabeza, no quería hablar pues la voz se me rompería. Con mis ojos busque a Draco pero ya no estaba – tranquila ___, te levare a la tienda.
Todo el camino estuve abrazada a él, temblaba por el miedo que había sentido minutos antes. No entendía como una persona que había conocido hoy, no había dudado en ayudarme y a Draco que lo conocía de hace cuatro años… yo jamás pensé que él me odiara tanto o que su corazón no tuviera salvación.
No sé porque un lugar muy dentro de mí se ilumino cuando lo vi, como si estuviera salvada. Yo de verdad pensé que él me ayudaría en un momento así.
Al llegar a la tienda solo estaban Ginny y los gemelos. Sus caras denotaban preocupación los gemelos se mostraron felices al verme, Ginny no tanto y Fredd corrió hacia mí.
– Gracias a dios estas bien – me abrazo – ¿tú la encontraste? – le pregunto a Cedric
– sí, un mortifago la tenia del brazo, no sé a dónde se la quería llevar
– ¿Qué? – exclamo George – ¿lograste verle el rostro? – negué con la cabeza aun sin hablar
– creo que esta en shock, ella no ha dicho nada desde que la encontré
– ojala los chicos tengan la misma suerte que tú y encuentren a Harry – cuando Fredd dijo aquello el otro pelirrojo lo miro regañándolo con la mirada, yo me sentí mareada.
– ¿Cómo que no han encontrado a Harry? – dije lentamente con la voz casi como un susurro – yo lo vi caer y había mucha gente no pude ayudarlo.
– ¿estuviste con él? – me grito Ginny – ¡tanto que dices quererlo y no fuiste capaz de ayudarlo! – sus palabras me dolieron, pero ya no me dejaría lastimar, estaba cansada de que ella descargara su odio cada vez que podía.
– ¡mira Ginevra no te voy a permitir que me hables así! – todos incluso Ginny se impresionaron por mi contesta, pues siempre me quedaba callada cuando ella me hablaba mal – tú no tienes ningún derecho a decir que no quise ayudarlo y menos ¡que no lo quiero!
– tranquila ___. – dijo Cedric tomándome de los brazos
– ¡no! – Chille – porque ella siempre hace eso, siempre cuando algo malo pasa me reclama a mi como si yo fuera la culpable de todo los males del mundo, y ya me canse. Así que ya basta Ginny, no pude ayudarlo porque todo fue un maldito caos y el mortifago me tomo, ni siquiera tenía conmigo mi varita.
– si como digas – dijo la pelirroja volteando los ojos y dándome la espalda.
– deberíamos ir a ayudar a buscar a Harry
– ya mi papa, el Sr. Diggory, Ron y Hermione están buscándolo ___, es peligroso y tu estas muy nerviosa ahorita.
– ¡Harry! – grito Ginny, me gire y la tranquilidad me volvió al cuerpo. Hay estaba la persona que más necesitaba en este instante.
Hermione llego a mi lado rápidamente a abrazarme pues ellos también me habían estado buscando y se aliviaron de verme. Cuando todo se calmó y Harry llego a mí a darme un abrazo no pude soportarlo más y comencé a llorar. Estaba desecha.
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Sαy Soмєтhιng ~ Drαco Mαlfoy
RomanceYo Draco Malfoy estaba malditamente enamorado de ella aunque hice todo lo estúpidamente posible para no hacerlo, de ______ Granger, aquella chica Gryffindor de sangre impura de la que tanto me empeñe en odiar. Di algo, estoy a punto de renunciar a t...