Capítulo 18 - la verdad/ Segunda parte

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– ¡___! Baja a cenar – escuche a mi madre llamarme, bueno llamar a la pequeña. La niña soltó la muñeca y resoplo molesta, la segui por las escaleras hasta llegar abajo, en donde estaban mis padres en la mesa junto a mi Hermana Cami y... ¿Quién era el?

Mire confusa al chico como de unos 12 años en el mueble viendo tv, el al girarse y verme... bueno al ver a la pequeña sonrió y yo corrí a abrazarlo. Mire la escena sintiendo un vacio en mi estómago, de pronto algo se despertó en mí y lo recordé el... él era mi hermano él era Paul ¿Cómo pude olvidarlo? ¿Por qué él no estaba en mi vida ahora?

– ¿sigues triste? – le pregunto dulcemente a la pequeña ___ que ahora estaba en su regazo, ella asintió haciendo puchero sonreí – tranquila enana yo te prometo de que convenceré a mama para que te deje ir a esa escuela de magia que tanto deseas, por algo te lleno esa carta.

– ¿de verdad Paul? Me prometes que ire – pregunto feliz la niña

– te lo prometo

– ¡eres el mejor hermano del mundo! – grito la pequeña yo

– los escuche y no cambiare de opinión – hablo mi madre malhumorada – vengan a comer ya y dejen de hablar tanto.

La pequeña ___ de ojos celeste agua miraron a Paul triste pero él le dio una mirada cómplice y le guiño el ojo transmitiéndole con aquella mirada que todo estaría bien

De pronto aparecí en otro recuerdo, ya no estaba en mi casa de mis padres si no en la camioneta de papa, mama estaba al frente junto con papa que manejaba y mi yo pequeña estaba atrás junto con mi hermano Paul, pero este recuerdo era distinto Paul estaba enojado, rojo de furia. Mi yo de pequeña lloraba y yo me tome el pecho con dificultad pues aquella escena me hacía mal.

– ¡papa di algo por dios! – hablo Paul molesto – no es justo para ___, es su destino

– yo estoy de acuerdo con tu madre Paul, así que basta ya – rezongo molesto

– ella es especial y ustedes lo saben, tiene poderes

– esta es una familia normal y ___ seguirá yendo a su escuela para niños normales como lo ha estado haciendo Paul, así que se acabó ponte el cinturón de una buena vez que está lloviendo y es peligroso

– ¡no me voy a poner nada!

– ¡¡no me hables así mocoso malcriado!!

– ¡dejen de pelear YA! – grito la pequeña ___ y de pronto algo me expulso de la camioneta para ver el recuerdo desde afuera y vi con terror como la camioneta se volcaba sin razón alguna. Grite de dolor y caí de rodillas en el suelo llorando. Mientras los otros recuerdos regresaban a mi mente, recuerdos que antes no estaban.

Recuerdos que me habían robado, la vida me está dando una sobredosis de verdades sin anestesia que sentía que en cualquier momento moriría de tanto dolor en mi corazón, en mi alma. Recordé como Paul había muerto ese día. Por mi culpa, yo había volcado la camioneta, yo lo había matado.

Salí del pensadero y mire a Dumbledore con lágrimas en mis ojos Me tome el pecho con fuerza, tenía un dolor agudo que me estaba empezando a ahogar.

– Los recuerdos tristes dormitan largo tiempo en una de las innumerables cavernas de la memoria, se mantienen allí durante años, decenios, la vida entera... Después, un buen día vuelven a la superficie y el dolor que los había acompañado vuelve a estar presente, tan intenso y punzante como lo era aquel día de hace tantos años señorita granger – hablo el lenta y pausadamente mientras yo sentía como mil agujas se clavaban en mi corazón sintiéndome la peor persona del mundo

– ese recuerdo no estaba dormido, alguien me lo saco, ¡sin mi permiso! – grite dolida – yo... lo recuerdo todo – sollocé – ¿fue usted? – pregunte con rabia – ¡¿usted me saco mis recuerdos?!

Entonces el asintió y me sentí traicionada

– ¿Por qué me hizo esto profesor? – solloce – ¿por qué?

– Querida, con tus padres creímos que era lo mejor – dijo tratando de calmarme se acerco a mi pero yo retrocedí – para ti, les prometí a tus padres que aquí en Hogwarts te enseñaríamos a controlar tu poder

– yo... no usare nunca más este poder, yo lo mate – dije temblando

– la muerte de tu hermano fue un trágico accidente ___, cuando los niños tienen poderes asi, y tienen emociones fuertes estos se salen de control, por eso te quitamos todos los recuerdos que tuvieran que ver con tu don y con tu hermano, para que cuando estuvieras lista te dieras cuenta tu misma de tu poder y ahí te devolvería tu memoria

– mis padres, ahora entiendo porque me odian – dije con el corazón roto – es porque soy un monstruo

– eso no es verdad, eres una bruja muy poderosa ___ Granger. Y ahora que ya tienes la madures ya no volverá a pasar un accidente así

– quiero que me escuche muy bien profesor, jamás... jamás volveré a usar mi poder – me limpie las lágrimas y salí del despacho corriendo.

Tenía una bronca, un dolor inexplicable dentro de mi... estoy harta, yo no elegí esto, ¡no lo elegí!... quiero, solo quería ser feliz no es mucho lo que pido. Pero eso no pasaría jamás no luego de lo que había recordado hoy, mi vida nunca sería la misma. Estaba destrozada seguía corriendo aunque las lágrimas no me dejaran ver ya que eran demasiadas, tropecé con alguien, estuve por caerme al suelo pero unas manos frías me sujetaron con fuerza.

– ¿Por qué no te fijas por donde caminas Granger? – dijo aquella voz malhumorada, solloce y lo mire a los ojos y vi como el cambiaba su expresión de arrogancia a una que no supe descifrar, pero no me importaba, ahora mismo no me importaba nada, hay instantes en la vida en que creemos haber caído en un agujero oscuro y profundo del que no lograremos salir jamás, como si una bomba hubiera estallado sobre nosotros y hubiese destrozado nuestra vida, este era ese instante así que sin pensarlo lo abrace, lo único que necesitaba ahora era eso, un abrazo lo sentí tensarse y pensé que me separaría de él de un empujon, pero para mi sorpresa el me rodeo con sus brazos devolviéndome el abrazo entonces rompí en un llanto desconsolador.


Sαy Soмєтhιng ~ Drαco MαlfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora