El cabrón lo había negado. Vi con mis propios ojos como manoseaba a su secretaria y tuvo la jodida hipocresía de negarlo.
Miré al techo con los labios fruncidos.
— Dios, ¿este lenguaje de trailera me enviará al infierno? ¡Encima me arrebata mi lugar en el cielo!
Tomé la camiseta de Coldplay que había en mi cajón y la acaricié con melancolía.
— Lo siento, Chris. No eres tú, soy yo... Y mi mala elección de novios, por supuesto.
Arrojé la camiseta por la ventana y oí el grito de mi nuevo ex novio.
— ¡Laila, por dios! Tienes que creerme, cariño. No te engañé con nadie, ella se me ofreció.
— ¡Y tú no podías mantener tu polla dentro de tus pantalones para rechazarla!– grité de vuelta.
Encontré una de sus caras camisas de Calvin Klein y la lancé en su cabeza.
— ¡Ahora lárgate de aquí, cabrón!
Cerré la ventana y me dejé caer en el sofá con un suspiro, cubriéndome el rostro con las manos.
— No llores. Joder, no.– exclamé mientras un sollozo salía de mi pecho. — Debieron llamarme Mari Carmen o algo así– (En mi país es común decir "sin llorar Mari Carmen" que vendría siendo "sin llorar marica.")
Me limpié el rostro y mi estómago rugió. No comía desde hace horas por lo que busqué entre los montones de anuncios de comida que tenía en la mesa del comedor.
Pizzas Carlo's, leí en uno de los promocionales. Mi pizzería favorita.
Lloré más. ¡Yo comía pizza con él!
Sin pensarlo, marqué el número y esperé a que contestaran. No iba a dejar que él arruinara mi relación de años con la pizza. La pizza es amor, la pizza es vida.
— Pizzas Carlos's, ¿en qué puedo ayudarle?– contestaron.
Mi corazón se apretujó porque normalmente él era quien ordenaba. Solté las palabras sin pensarlo.
— Mi novio es un hijo de puta... Bueno, ex novio. Me engañó y gracias al cielo que no tengo tantas cosas de él en mi casa. Sólo tuve que lanzar un par de camisetas por la ventana. Como sea, quiero una de pepperoni.
Cerré mis ojos con fuerza al ver la diarrea que había sacado por la boca. Sólo Laila le dice eso a un desconocido. Al principio la línea permaneció en silencio y tras un par de segundos, contestaron.
— Lástima, hubiese sido divertido imaginar sus bóxers volando por la ventana. ¿Queso extra?
Medio sonreí.
— ¿Puede llevar veneno? Tal vez debería enviársela– suspiré.
El hombre del otro lado de la línea, río.
— Me gustaría ayudarte con eso pero iría a prisión y tengo una vida por delante. No estoy hablando con una psicópata, ¿cierto?
— No estoy segura de eso. ¿Querer cortársela a mi ex novio me convierte en una?
— Creo que no– soltó una risita.
— Como sea. ¿Piensas enviar mi pizza?
— De acuerdo, señorita cambio de humor. ¿Pepperoni con queso extra?, ¿algo más?- preguntó regresando a su tono profesional.
— No olvides el veneno– ambos reímos. Le indiqué mi dirección y él siguió el protocolo.
— Bien, tú pizza llegará en menos de 30 minutos–
— O será gratis. Espero que alguno de tus hornos se descomponga, una pizza gratis sería lo único bueno que me ocurra hoy–
— Nunca pierdas la fe. Todavía quedan cuatro horas para que el día termine–
— Con mi suerte, si un auto no me atropella, el cielo estaría sonriéndome.
— Si te engañó, no vale la pena. Sólo piensa en eso. Bien, debo irme, lucky girl. No eres la única hambrienta. Buena suerte y disfruta tu pizza.
Sonreí y me despedí.
La pizza llegó 15 minutos después en manos de un chico con frenillos y granos en la frente. Me dispuse a pagarle cuando él negó.
— Oh, no. Es gratis.–
Lo miré extrañada mientras verificaba la hora.
— Pero no han pasado los 30 minutos.
— Lo sé. La casa invita.
Y entonces se fue. No lo detuve porque, ¿quién no quiere una pizza gratis?
Puse la caja en la mesa y la abrí para tomar una rebanada. Había una hoja sobre ella.
"Nunca pierdas la fe, lucky girl."
. . .
¡Huuuola! De acuerdo, antes que nada quiero agradecerles por leer. Esto es solo el comienzo y de verdad espero poder avanzar más y que se lleguen a enamorar de esta historia. Soy un poco nueva en esto de subir historias, así que perdón si mi falta de experiencia es notoria.😂🙄
Espero poder estar actualizando dos o tres veces por semana, aprovechando que estoy de vacaciones. La portada no es muy cool pero espero poder cambiarla pronto.
De nuevo, ¡muchísimas gracias por leer! No olviden agregarla a su biblioteca🌚😂
Hasta la próxima,
Barbie.
ESTÁS LEYENDO
El chico de la pizza.
Genç Kurgu- Pizzas Carlo's, ¿en qué puedo ayudarle? - Mi novio es un hijo de puta... Bueno, ex novio. Me engañó y gracias al cielo que no tengo tantas cosas de él en mi casa. Sólo tuve que lanzar un par de camisetas por la ventana. Como sea, quiero una de pep...