Destiny [T.1]

Capítulo 22

POV DAKOTA

Luego de la conversación con mamá, de casi romperme una pierna al salir corriendo hacia el set, y de hacer mi escena en apenas tres tomas, decido que lo mejor es irme a descansar y olvidar todo por un rato.

Me despido de todos, y cuando voy saliendo del estacionamiento, me fijo en que Jamie está parado solo y muerto de frío esperando un taxi.

Me estaciono frente a él y bajo la ventana del copiloto.

-¿Vas a algún lado, gran James?.- la pregunta más idiota en la historia. Como si a Jamie solo le gustara cagarse de frío fuera del set. Bien Dakota.

-A mi casa, pero el maldito taxi que se supone que iba a estar esperándome aún no llega.- Jamie se mueve de un pie al otro intentando meter un poco de calor a su cuerpo.- Mi camioneta tenía unos problemas y no me la devuelven hasta mañana.

-Sube, yo te llevo.- le respondo automáticamente.- Que se joda el tipo del taxi, ojalá gaste todo su combustible en solo venir aquí para no encontrarte.

Jamie suelta una carcajada y se sube al asiento del copiloto.

-Dios, pobre hombre, despertó tu vena asesina.- nos reímos.- Dak ¿podrías poner un poco de calefacción? No siento mis pies.

Hago lo que me pide en menos de un segundo y su cara es de placer puro cuando, poco a poco, el aire comienza a calentarse.

-Gracias.- me dice bajito.

-De nada, Jamie.- le respondo con una sonrisa.- Ahora...¿dónde queda tu casa?

Jamie me da la dirección y comienzo a reírme. Vive en el mismo condominio que yo, no sé como no se me ocurrió que a todos nos habrían puesto ahí.

-¿De qué te ríes?.- dice Jamie sacado de onda.

-Lo que pasa, mi gran James, es que vivimos en el mismo condominio y hasta ahora es que me estoy enterando.

Jamie me mira con un poco de sorpresa y termina uniéndose a mis carcajadas.

-Somos los peores, Coqui. Ni siquiera usamos el cerebro para atar cabos de que posiblemente la producción nos pusiera a todos juntos ¡o para preguntarnos nuestra dirección!

-Completamente de acuerdo.- le digo riendo.- Aunque, para ser sinceros, pasamos más tiempo en el set que en nuestra casa.

-Tienes toda la razón.

Luego de un asentimiento, enfilo camino hacia casa.

Llegamos en apenas unos minutos, durante el camino conversamos de mamá y de como le había ido la vida desde que dejamos de verlo. Rogaba internamente para que nunca saliera una pregunta sobre Dul, y solo respiré tranquila cuando entramos al condominio y di por sentado que mi "pequeño" secreto seguía a salvo.

-Okey...el mío queda ahí.- le señalo la torre a Jamie.- ¿Dónde queda el tuyo? Para acercarte un poco más.

Jamie comienza a reírse otra vez. ¿Y a este qué? ¿Sam le dio drogas y no me avisó?

-Eh...el mío también es ahí.

-Júramelo.- le respondo con sorpresa.

-Te lo juro por mi diente perdido a causa tuya, Coqui.

¿Es qué nunca olvidará eso? Sigue riéndose y sólo me queda unirme. De verdad, somos un asco y un par de despistados.

Aparcamos, y comenzamos a subir hacia nuestro piso. Dentro del ascensor, descubrimos que, además de vivir en la misma torre, Jamie tiene su departamento en el mismo piso que yo.