Amor De Niños || Andy Biersack ||

Capítulo X

Más noches como esas pasaron, la confianza aumento entre las dos familias. Andy y Mandy se volvieron inseparables, ivan a la misma escuela, siempre se apoyaban el uno al otro, compartian todo, se conocian perfectamente... al grado de saber cuando mentian, lo que sus miradas expresaban, saber sus más profundos secretos, sus mayores miedos, sueños, esperanzas, metas, etc.

Pero paso algo en la vida de Mandy que la cambio para siempre.

7 de septiembre

- P-pronto... vendre a... ve-verlos, ¿Si?... por favor no llores... corazón.- Los sollozos del hombre no lo dejaban hablar con claridad.
- Papi no te vayas... no nos dejes.- La pequeña de ojos verdes no paraba de llorar, estaba aferrada a la cintura de su padre. Su madre desviaba la mirada de la dolorosa escena mientras sostenia en sus brazos a su hijo de solo un año.
- Sera mejor que te vayas de una vez, Herny.- La voz de Elena tenia un tono de indiferencia. El pelinegro aparto los pequeños brazos de su hija y subio a si carro.
- No, papi.- Mandy estaba a punto de ir tras él pero la mano de su madre la detuvo, trato de safarse del agarre cuando eschuco al carro encender. A Henry se le desgarro el corazón al ver esa dolorosa escena pero ya no podia hacer más, Elena le habia pedido el divorcio sin darle una razón consisa. Solo comenzó a conducir para ir al aeropuerto.
Mandy no dejaba de llorar, no sabia porque su padre se habia ido sin decirle el motivo. Sin que su madre se diera cuenta, la niña tomo el telefono y marco a la casa de Andy, necesitaba hablar con el... necesitaba su consuelo, no tenia a nadie en quien confiar en ese momento. Por suerte Andy fue quien contesto el telefono, no queria preocupar a los señores Biersack porque la escucharian llorando, con esfuerzo hablo con su amigo ya que sus sollozos no la dejaban hablar claramente.

Al día siguiente Andy fue a la casa de Mandy, ella estaba encerrada en su cuarto, cuando entro la encontro abajo de su cama sollozando y abrazando un cojin en forma de corazón.
-¿Estas bien?- Se tiro en el suelo y rodo a un lado de la niña. Ella solo negó con su cabeza.
- ¿Quieres contarme que paso?- El pequeño no sabia exactamente como ayudarla a sentirse mejor pero aún así Mandy le conto todo, pero su voz se iba apagando conforme hablaba. Despues se miraron a los ojos, a Andy siempre le habian gustado los ojos de Mandy porque en ellos veia felicidad, esperanza y amor, pero en ese momento solo reflejaban dolor, tristeza y temor.
- Mandy, te prometo que no te dejare sola y siempre voy a estar ahí para ti.- Sujeto la mano de la ojiverde y la acerco a su pecho. Desde ese momento las cosas cambiaron para Mandy ya que nunca más se volveria a sentir sola.

7 años despues...

17 de junio

Las burlas, los maltratos y los golpes aunmentaban, Andy ya no sportaba más el infierno que era el tener que ir a la secundaria. Todos los días llegaba lleno de rabia a su casa, la agonía crecia con el paso de los días, se encerraba en su habitación hasta que sus padres llegaran.

Y ahí estaba él, frente al espejo de su baño, en sus mamos sostenia una navaja de afeitar, lagrimas llenas de dolor y rabia resbalaban por sus mejillas.
"No lo hagas" sonó una voz dentro de su cabeza, el sabia que era más fuerte que... esto, necesitaba desahogarse pero esta no era la manera.
Dejo la navaja de lado, salió del baño, saco una libreta y comenzó a escribir en ella mientras escuchaba música.

En cada parrafo expresaba su odio, impotencia, coraje, triateza, etc. Esto le ayudaba a relajarse, pero no dejaba de pensar en los demás chico y chicas que pasaban por lo mismo que él... incluso pensaba en Mandy, se preocupaba mucho por ella, no queria que algun día llegara a cortarse o lastimarse por culpa de un idiota. No lo soportaria, tenia miedo de que llegara hasta ese extremo.

- Tengo que ser fuerte... por ella y por mi.- Sentia la necesidad de ser una ayuda para los demás y por eso el tenia que dar el "ejemplo" aunque siendo honestos el sabia que no era el mejor. La sociedad se habia encargado de esteriotiparlo como el "chico malo".

En eso decidio marcarle a su amiga.
-¿Bueno?- Escuchó al otro lado de la linea.
- Hola, Mandy.- Bajo el volumen de la música para ser eschuchado con claridad.
- Andy, ¿Pasa algo?- Él solo suspiro.
- No es nada...-
- Estas escuchando Forever de Kiss, ¿Otra pelea?- Andy no pudo evitar sonreir, vaya que lo conocia.
- Ellos se lo buscaron.- Entro al baño para poder verse en el espejo y mirar un leve moretón en su mejilla izquierda.
-¿Quieres que vaya a tu ca...-
-¡No! Yo voy a la tuya, te veo en la tarde.- Mandy ya habia ido 3 días segidos a su casa, no queria causarle más problemas con su madre.
- Ok, acá te espero.- Ambos colgaron al mismo tiempo.

Mandy estaba comenzando a tener un cierto grado de dependencia a Andy.
Mientras que Andy, sin darse cuenta, empezó a querer a Mandy de una manera diferente a la que se quiere a una amiga.

Qué sera lo que les depara el destino para estos dos.