¡PERRAS! Nuevo comienzo. (P#2) (BORRADOR)

No son buenas noticias.

Michelle

Tras esa salida tan abrupta del restauran, o mejor dicho, luego de esa llamada extraña que recibió Marc, estaba muy raro, no podía comprender lo que le sucedía y tampoco contestaba a mis preguntas, solo conducía con rapidez y apretando con fuerza el volante.

Me asustaba, no tenia porque negarlo, me asustaba demasiado, no era normal verle así, tan preocupado y sacado, que tan grave pudo ser esa llamada.

—¡Auch! —me toque el vientre sintiendo un pinchazo extraño, seguramente producto del estrés, me sentía tan cansada.

Marc freno de golpe que por poco me golpeo contra la ventana y luego se acerco preocupado tomando de mi vientre y el hombro.

—¿Estas bien? ¿Te duele algo? ¡¡Dime que sientes amor!!

—Bebe calmate, no es nada, estoy bien...¿me piensas decir a donde vamos? —se alejó mas relajado sosteniendo su cabello, eso sólo lo hace cuando esta nervioso o busca escusas.

—¡Marc!

—Vamos a la clínica ¿ok?

—¿Que? ¿Por que o que? —Otra vez no con testó y ahora no sabia exactamente que prefería, si estar así con la duda de porque había de volver a la clínica o de adónde íbamos....prefiero la segunda.

Al llegar nos bajamos del auto y rápidamente Marc de exagerado pidió una silla de ruedas para trasportarme, Marc a raíz del embarazo se ha vuelto insoportablemente tierno y frustrante a la vez de molesto con mi cuidado, como si yo fuese un cristal que en cualquier momento quebraba... o una bomba a punto de explotar también podría ser.

Entramos al frío y triste ambiente de clínica con olor a farmacéuticos y Marc se apartó solo un segundo para hablar con la recepcionista y pedir avisar al doctor de nuestra llegada.

Luego me arrastro por los pasillos hasta llegar al ascensor y una vez dentro empezó a pisar de manera inquieta el suelo.

—¿Te puedes calmar? Ya me estas poniendo de los nervios —se abrieron las puertas y el tomó mi mano para intentar tranquilizarme mientras sentía el sudor de sus manos por los nervios.

—Tu tranquila, no debes alterarte porque no le hace bien al bebé.

—¿Y que su papa esté como esté si le hace bien? ¿Te puedes calmar ya Marc? Tienes toda la mano transpirada, suelta. —le batí la mano y él no paro de disculparse, que insoportable resultaba a veces.

—Que bueno que llegaron, pasen —El doctor estaba esperando por nosotros en el pasillo y nos guió dentro de su oficina y nos invito a tomar asiento, bueno...ya yo estaba sentada y todo por una paranoia de Marc.

—No entiendo aun ¿que hacemos aquí? Doctor ¿ustedes si tendría la amabilidad de explicarme? Juro que no entiendo nada.

—No tienes porque preocuparte demasiado, es solo que me gustaría realizar algunas pruebas mas solo para verificar que todo este en orden

—No entiendo doctor, ¿encontró algo raro en las pruebas? —se creó un incómodo silencio que el doctor supo manejar bien al acabar con el.

—Ehm solo me gustaría corroborar que todo esta en orden, eso es todo, no te preocupes, ahora necesito que te cambies y coloques la bata y luego me acompañes.

Asenti dudosa y tensa pero el doctor parecía que no me daría mas detalles, Marc me arrastro en el carrito tras una cortina y me levanto para deshacerse de mi ropa, no se porque exageraba si eso podía hacerlo por mi cuenta.

Si se que sonara tonto lo que estoy por decir, pero aun me sonrojaba el que me viera desnuda y solo me hacia pensar cosas... Cochinas.

—Saca la idea de tu mente —Me reí a carcajadas y le di la espalda para que me sujetara la bata.