Seducelo, Enamoralo & Rompelo.

|3| Consejo 4: Acto natural.

-Ya, Pinky - su voz resuena sobre la música y continuo en mis pensamientos - apenas pasaron veinte minutos, te aseguro que tus amigos se olvidaran de ti antes de que te des cuenta.

-Gracias - respondo de forma sarcástica y en sus labios se ensancha una sonrisa, por poco olvido que su profesión consiste principalmente en molestarme.

De todos los seres humanos del planeta me ha tocado viajar con Jaron Rawt, el mas idiota y chico con menos neuronas de todo el planeta. La señora Trev y mamá han sido mejores amigas desde que tengo memoria, estudiaron juntas y se volvieron reencontrar dos años después- de haber acabado con los estudios- en una guardería, y no tuvieron mejor opción que convertir a sus hermosos y "dotados" hijos en mejores amigos.

Pero el problema, es que todo salio mal. Supe desde el instante en que Jaron estampo una bola de lodo y césped en mi rostro, a los tres años, que nunca podríamos ser mejores amigos, ni siquiera amigos. He soportado navidades, noches viejas y cumpleaños su molesta presencia, lo cual son esenciales porque nunca ha echo nada en mi contra en frente de nuestras madres. En fin, su plan de "Molesta a Sky hasta que eche humo por la cabeza y no olvides llamarla Pinky", comienza cuando estamos solos. Por suerte no compartimos- o compartíamos- clases, pero eso no le impedía molestarme en los pasillos o almuerzo, mucho menos en gimnasia. Eso sin contar la vez que se paso de copas en una fiesta y comenzó a ver mi imagen distorsionada, comenzó a gritar que el apocalipsis había llegado de color rosa.

Nunca entendí su actitud, nunca le hice nada y hubo un tiempo en que intente ser su amiga. No me dejo, no ruego, solo me vengo. Y es por eso que intento poner mi nuevo plan en marcha, estoy consiente de que, si no se ha fijado en mi los dieciocho años de su pobre existencia es muy poco probable que lo haga ahora.

El ruido del motor parecido a el chillido de un animal retorciéndose me despierta de mi ensoñación, levanto la cabeza y observo como Jaron intenta arrancar la carcacha.

-¿Qué sucede? - pregunto y me regala una rápida mirada.

-Nada, solo... - el motor se vuelve a encender y sonríe satisfecho.

A lo lejos veo la larga carretera que nos queda por recorrer, aun falta mas de una hora para llegar al aeropuerto y me pregunto cuanto tiempo mas podre soportar estar aquí.

(...)

-¿Quieres ayuda? - pregunto por quinta vez y niega, hace unos minutos que el auto contrajo una extraña asma y termino por desplomarse en medio de la carretera, lo ayude a empujar a una orilla y ahora me encuentro sentada en la parte del piloto con la puerta abierta para dejar correr el aire, mi mano siente un terrible hormigueo de tanto sostener el peso de mi cabeza y comienzo a sentir sueño -¿Seguro? - Una de mis cejas se elevan.

-Que si Sky, ya calla - levanto ambos hombros dejando de observar al chico y me pierdo en el atardecer ¿Si perdemos el vuelo?

Consejo 3: interesarce en cosas de hombres funciona.

Después de releer el mensaje con instrucciones que recibí de Tyler salgo de mi lugar y camino a Jaron, he dejado la condenada chaqueta en el asiento trasero y me vi obligada a abandonar mi antiguo peinado por una coleta. Maldiciendo el calor.

Cuando llego junto a el, destapo mi botella de agua y comienzo a llenar el famoso recipiente. Me inclino para soplar la superficie y agito rápidamente un trapo intentando bajar la temperatura.

-Si esto no funciona... - digo intentando alcanzar la tapa, continuo por l que no recibo respuesta - deberemos abandonar esto aquí, seguro alguien nos... ¿Jaron?

-¿Donde has estado escondiendo ese bendito culo toda la vida, Pinky?

-¿Ah? - me despego del vehículo llevando una mano a mis short y me doy cuenta que se han elevado mas de lo usual, mi rostro comienza a arder y le tiro el trapo en la cara. -Hey - cierro el pico antes de decir algo, y sonrió.

Consejo 4: A vecés seducir será un acto natural.

Se ha fijado en mi... Y no tuve que hacer tanto esfuerzo.

Menea la cabeza y vuelve la mirada a la carretera.

-Ni creas que fue un cumplido -gruñe - entra al coche de una vez y mira si arranca - asiento comenzando a caminar, una vez dentro enciendo el motor y subo las manos hacia arriba para después bajarlas con fuerza sobre el volante. Lo intento una y otra vez, hasta que me doy por vencida- ¿Estas segura que lo has echo bien?- pregunta asomando la cabeza por el capo.

Ruedo los ojos, por supuesto que lo hice bien.

- Creo que deberemos parar un auto- digo bajándome, camino hacia el y antes de pisar la carretera me detiene.

- Créeme, harás que se espanten- dice señalándome, le saco la lengua, cierro el capo y me siento sobre el.

- Vamos, Mrs. sexy- digo con los brazos cruzados, sonríe colocándose las gafas y estirando un brazo.

Falla, dos, tres, tal vez cuatro veces y los autos no hacen mas que pasar de largo. Estamos un largo rato bajo el sol, ya se ha quitado la remera dejando su abdomen al aire y se la enroscó en la cabeza. Ahora mismo cubre sus ojos del sol con una palma, mientras que yo utilizo un folleto que encontré en la guantera.

-Ya, he llamado la grúa hace mas de una hora y nadie quiere detenerse. Perderemos el vuelo.

Me ignora y continua pegando silbidos a cada vehículo que pasa junto a nosotros.

- Tranquila, Pinky. No perderemos nada

-Dios, si lo haremos si no se detiene un jodido coche ahora mismo.

Me bajo de mi lugar y estiro mi brazo, pasan tan rápido que todo mi cabello se ha adherido en mi rostro. Lo escupo encontrándome con unos ojos color negro.

-¿Que?

-¿Por qué estas maquillada y vistes así?- pregunta con una sonrisa ladeada, cruzandoce de brazos -¿Acaso tratas de seducirme?

- Engreído- golpeo su brazo- no todo es por ti.

Si, lo es.

- Ya se- chasquea su lengua- es por Travis.

- Si cuando hablas de Travis te refieres a Tyler, no, no es por el.

- Entonces es por alguien, dime. Si no es por mi, tampoco por Travis y estas a punto de mudarte a un lugar donde no conoces a nadie ¿Que queda?

- Tal vez quiera un cambio- miento y lo miro, pestañeo una y dos veces lo que hace que voltee.

-¿Porque haces eso?- pregunta volviéndose.

-Eso ...¿Que?

-¡Eso!-señala su rostro -con tus pestañas...es ¿Tienes algún tic?

-NO entiendo.

- Pestañeas varias veces, así- comienza a mover sus parpados sin evitar estrechar sus labios, lo que hace que lance una carcajada retrocediendo. Sus ojos se abren de par en par y antes de darme cuenta tengo su mano en mi brazo empujándome hacia el.

Estuvo cerca, salvo mi vida.

- Diablos, Pinky- dice soltándome- no quiero ver tu asquerosa sangre rosa esparcida por toda la carretera. Ten mas cuidado.

- Por supuesto- susurro sintiendo aun su tacto en mi piel.

-De nada- dice llevándose un cigarro que sacó de sus jeans a la boca, retira la remera de su cabeza y me la tiende. Lo miro con mi ceño fruncido- póntela, no querrás vestir así todo el camino.

¿Qué? Pensé que le gustaba.