-¿Algo más? - niego a la pregunta que hace la camarera y espero a que se retire para levantar la vista, encontrándome con unos grandes ojos negros.
Después de salir de la universidad, decidimos ir a comer. Así que nos encontrábamos sentados uno en frente de otro sin decir nada. Luego de que me dijera lo primero que hicieron los presentes en cuanto lo vieron entrat vistiendo común- y siete minutos tarde- le pedí, casi por favor. Que no contara nada. Porque sabía que si lo hacía, terminaría por confesarle la verdad y todo se hiría por un caño. Pues por ahora no podía decirle la verdad por más que quiciera.
-¿Qué sucede? Parece cómo que has sido tú la que no pasó el exámen- ríe tratando de aligerar el ambiente.
Llevo un trozo de carne a mi boca y mastico sin dejar de observarlo, hasta que contesto.
-Y tu pareces como si- trago sin saber que decir, sintiendo un gran nudo en mi estómago- ¿Podemos hablar otra cosa que no sea ese exámen? Nuestras madres- propongo- ¿Saben que ya estamos en Boston?
-Si, le envíe un mensaje a mi mamá- aclara- le dije que hiríamos a comer algo.
-¿Y sabe lo del exámen? -en cuanto esas palabras salen de mi boca me arrepiento, ¿No fui yo la que propuso dejar de lado ese tema? Si.
-La verdad.. No se lo he dicho, pero ambos confiabamos en que pasaría.- se detiene dejando el cubierto en su plato y con un trapo limpia su boca- ¿Es acaso una conversación civilizada la que estamos teniendo, Pinky?- enarca una ceja.
Ay, ya comenzamos.
-Pues claro- enderezo mi espalda.
Consejo once: a un hombre siempre le agrada que la mujer tenga modales.
-Aburre- se pone de pié- te esperaré afuera.
¿Afuera?¿Me esta dejando comer sola?
Idiota.
Cuando la puerta se cierra, y veo su espalda apoyarse en un pilar de afuera comienzo a contar hasta diez para no estallar. Estabamos hablando bien ¿Enser...
¡No lo puedo creer!¡Acaba de dejarme sola, solo para ir tras una chica!
Mis ojos se ensanchan y trago con dificultad cuando lo veo hablar con la morena, y yo que tenía pensado comprarle un helado como ofrenda de disculpa porque lo veía "mal". Pues parece todo lo contrario, yo lo veo sonreir.
-Gracias- digo entregadole el dinero a la camarera.
-Voy por tu cambio- dice y desaparece, golpeo mi talon con el pizo de madera esperando impaciente.
Miro a Jaron conversando fluidamente con aquella chica, no puedo creer que hace mas de diez horas yo este intentando seducirle y ella que apenas lleva minutos ya tenga la mano de el en su cintura ¿Y la camarera?
Estiro mi cuello buscandola y la veo a lo lejos hablando con un hombre de gorro ¡Mi cambio!, la apuro mentalmente. Después de lo que parecen horas de charla, por fin me ve y sonríe a su amigo pidiendole disculpas.
-Tu cambio.
Ebozo una sonrisa y salgo lo más rápido que puedo.
-¡Jaron!- le grito para llamar su atención, el se gira pero solo me hace un gesto de que espere. Me acerco- ¿Qué haces?
-Sky, Hally. Hally, Sky- nos preseta.
-Hola- saluda.
-Hola- respondo.
Miro a Hally, es morena unos diez centimetros menos que yo, tiene los ojos color café y viste con ropa deportiva, pero aunque pareciera que acaba de salir del gimnacio mantiene su peinado intacto y piel radiante.
-Va al instituto en el que iremos-me dice con una sonrisa
-Genial- le devuelvo el gesto- ¿Nos vamos?
-Hally- se voltea dandome la espalda y la sostiene por ambos brazos- ¿Me das tu número?
Ay, no. No tiene que ser cierto.
Ambos me miran y fruncen el ceño ¿Acabo de decirlo en voz alta?
Claro que si.
-Claro que si- la voz de ambos suenan a la vez y se miran antes de soltar una fuerte carcajada.
Mi pie cada vez suena más fuerte contra la acera viendo los transeúntes pasar esperando a que dejen de reir , hasta que una cabellera rubia se me hace conocida.
Ay, no.
-¡Sky, hola!- grita. Alyssa se acerca dando pequeños saltos sin soltar la mano de aquel chico hasta quedar en frente de nosotros - el es mi hermano.
-Wow, hola- sonrío algo molesta.
-Michael- el rubio de ojos celeste nos extiende la mano a todos en forma de saludo.
-Hally.
-Jaron.
-P.. Sky- toco su suave piel y espero a que alguien hable.
-Asi que tu eres Sky, Ally ha hablado sobre ti desde que le dije a mamá que la llevaría al parque.- la mira de reojo antes de decirle que no se acerque a la calle- eres tal como describió.
-¿Cómo me describió? -pregunto curiosa.
-Le dije que parecías una princesa de cabello rosa y que aun no tienes a tu príncipe- chilla sosteniendo la mano de Michael.
Mi rostro se torna de un color rojizo y siento el calor subir por mi cuello.
-¿Pinky te parece una princesa?-Jaron pregunta con el ceño fruncido y ambos brazos cruzados, tardo en darme cuenta y cuando lo hago descubro que no es a Ally a quien habla.
-Es hermosa- Michael se encoge de hombros sin importancia ¿No se dan cuenta de que estoy aqui?
-Ella...
Hally carraspea, ahora obteniendo la atención de ambos.
-Jaron- nos da la espalda y de inmediato su mano va al brazo de él. Bufo no queriendo ver como una chica que apenas conoce logra lo que yo no pudé.
Tal vez le pida consejos.
-Nunca antes ví a una princesa de cabello rosa- había olvidado que no estabamos solos.
-No lo puedo creer- llevo una mano a mi pecho- ¿Acaso nunca has visto Hora de Aventura? Me ofendes Michael.
-Mike- ríe mostrando sus hoyuelos- y no.
-Tienes que verlo- aconsejo.
-El televisor de mi habitacion solo sintoniza tres canales- hace una mueca- mis compañeros de cuarto son un poco... Dificiles.
-Siempre he querido ir a la universidad ¿Cómo se siente?
-Al principio es raro, pero poco a poco te acostumbras. Y no tienes el porque hacerte problema por tu cabello, he visto hasta verdes- lleva una mano a mi cabeza y la sacude haciendo que ambos riamos.
Su mirada sube sobre mi y detiene los movimientos y cuando giro me encuentro con un pecho a pocos centimetros de mi, digo, milimetros. Mis labios chocan con su camiseta. Es Jaron y tiene cara de pocos amigos.
-Tenemos que irnos- señala el auto que alquilamos.
-Si, espera- me vuelvo al rubio- ¿Cuando puedo...
-Es hora de irnos. Ahora.
-Solo quiero...
-Ya- gruñe y tira de mi más fuerte, no encuentro a la chica por ningun lado lo que significa que se fue.
Mi nuevo amigo me mira con una sonrisa y se acerca a plantar un beso en mi mejilla.
Tal vez, cuando acabe las cosas con Jaron sea un chico al que me gustaría conocer.
-Nos vemos luego.
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Seducelo, Enamoralo & Rompelo.
Novela JuvenilLos colores no son para tontos, son para aquellos que sueñan sus aventuras y se aventuran por sus sueños. #894 Novela juvenil. (Es tan lejos pero nunca en la vida me pasó )