Lo Imposible No Existe

Capítulo 24

Sin darme cuenta, ya estamos en el mes de Diciembre.

Se acercan las vacaciones por Navidad y noche vieja, y también mi tan ansiado cumpleaños.

Tendré diecisiete años por fin.

Ahora he quedado con Laura, hacía un mes casi que no quedábamos.

-Holi- me saluda la morena apareciendo a mi lado
-Hola Lau- sonrío y la abrazo.

*****

-Entonces, me estás diciendo que Cristian hace su vida, y tu estás con... ¿Iván?- la miro con el ceño fruncido y una sonrisa amenaza con salir
-Iñaki- la corrijo y río- pero si, así es- doy un sorbo a mi café- ¿y qué tal va este chiquitín?- sonrío posando mi mano en su ya abultado vientre de cuatro meses
-Dando guerra a su madre- niega con la cabeza- la verdad es que mi madre me está ayudando muchísimo, ella pasó por lo mismo con menos años y bueno, supongo que me entiende- sonríe y acaricia su tripa.

Seguimos hablando de un tema cualquiera, y siento una mano en mi hombro.

Me levanto y cuando voy a girarme, noto un tirón en mi melena castaña, un grito sale de mi garganta haciendo que Laura deje su móvil y me mire para después acercarse e intentar ayudarme.

-¿Pero qué coño haces?- consigo girarme y reconocer a la que me está tirando del pelo, es Silvia
-Es que, no me gusta que se tiren a mi futuro marido- se cruza de brazos
-Ah, ¿y por qué me lo dices a mi?- pregunto casi riendo
-No te hagas la tonta, se que eras su amante- mi corazón se para.

No por nervios ni miedo.

Se para por recordar todo lo que ha pasado.

Hace ya dos meses que me entere de todo, y hace un mes que estoy con Iñaki tratando de pasar página.

Quiero a Iñaki pero no estoy enamorada de el, todavía.

Amantes, joder.

-Mira Silvia, el está contigo, vais a tener un hijo, yo tengo pareja y no quiero a tu futuro marido, sed felices y déjame en paz, que estás embarazada- me pongo el abrigo, cojo mi bolso, y Laura deja el dinero en la mesa para pagar nuestras bebidas.

Dejando así a Silvia con la palabra en la boca.

*****

-¿Esa era la amiga de tu cuñada?- pregunta Laura mientras seguimos caminando en busca de alguna cafetería mas tranquila en la que no me encuentre a personas indeseables
-Si, esa es la amiga de mi cuñada y la prometida Cristian- río
-Menuda gilipollas- ríe ella también
-Ya... Oye Lau, te quería comentar algo- la castaña me mira para que siga- la semana que viene es mi cumpleaños y me gustaría que vinieras, será una merienda pequeña con unos amigos y ya- le explico y ella parece dudar
-No se Becca, son tus amigos, al principio habrá buen rollo y tal, pero luego tendrás que estar por ellos y por mi, no creo que sea buena idea que vaya- hace una mueca, no voy a permitir que no venga
-Porfaaa- junto las palmas de mis manos empiezo a dar saltitos
-Esta bien iré- sonríe
-Bieeen- la abrazo y luego pongo mi mano sobre su vientre- no te preocupes enano, no habrá alcohol- esta vez la que ríe es mi amiga.

*****

23 de Diciembre

Me indica mi teléfono.

Joder, ya tengo diecisiete años, me parece increíble hasta a mi.

Me visto y cuando bajo encuentro a mi madre y a Rosa preparando mi desayuno favorito.