-¿Listos para saber qué esperáis?- pregunta la doctora Figueroa sonriendo
-Si- contesta Cristian emocionado
-¿Y la mamá qué cree que va a ser?- esta vez me mira a mi
-Una niña- sonrío esperando haber acertado
-Esa intuición de madre no falla- me guiña un ojo -esperáis una niña muy sana, que ya es una suerte después de haber pasado lo tuyo-
-Entonces, doctora, ¿Becca espera una niña?- cuestiona mi novio y ella asiente.Llevo mis manos a mi cara, emocionada.
Y Cristian me besa.
*****
Estamos en la cafetería de siempre todos reunidos.
Mando callar hasta que por fin se dignan a hacerme caso y se quedan todos en silencio.
-Chicos, estamos esperando una niña- sonreimos y todos empiezan a aplaudir y a felicitarme
-¿Ya habéis elegido nombre?- cuestiona Montse y yo asiento
-Hemos seleccionado ya- habla Cristian
-¿Y cuáles tenéis?- pregunta Laura
-Verónica. Michelle. Noelia. Esos son los que me han gustado a mi-
-Claudia. Miriam. Rebecca. Eson los que me han gustado a mi- prosigue mi novio y padre de nuestra futura hija -aunque Becca no le quería poner su nombre, así que nada. Me gustan Claudia y Miriam-Aurora hace un mohín, y Laura y Víctor sonríen triunfantes.
Al igual que también lo hacen Montse, Cloe y Marta.
-Tenemos uno mas en mente- me miran todos esperando mi propuesta -Ainhoa- sonrío
-¿De verdad que Cristina no os gusta?- interviene Alan y yo suelto una carcajada irónica
-¿De verdad crees que le iban a poner Cristina a su hija?- cuestiona Fran con sarcasmo haciendo que todos riamos.Parece que Alan no entiende a que se refiere mi mejor amigo, hasta que abre la boca sorprendido y pide perdón.
*****
Me siento en la cama, cansada, y coloco un cojín detrás de mi espalda.
Cristian sale solo con una toalla alrededor de su cintura.
Que vistas.
-¿Algo que te guste, cariño?- pregunta con sorna al ver que me he quedado embobada mirándolo
-No es justo- me cruzo de brazos -me tientas y no es justo- se acerca a mi y me besa.Después se da la vuelta y se viste directamente.
Cristian está perfecto, delgado.
Yo estoy ya de siete meses y me siento como una puta ballena porque estoy así.
-Estás muy guapa con esa tripita de siete meses en la que tienes a nuestra pequeña Ainhoa- habla como si me leyese el pensamiento y yo río
-Gracias cariño- le beso.Nos dirigimos al salón y Martín está encima de la alfombra que le compramos jugando con unos peluches.
Ya puede gatear e incluso ha caminado alguna vez.
Cristian y yo nos sentamos en la mesa y lo observamos ambos con una sonrisa en la cara.
-Cristian, ¿qué ha pasado con Silvia al final?- noto como se tensa.
No habíamos tocado ese tema aún.
-Ha huido y está en paradero desconocido- niega con la cabeza -el día que te disparó, había dejado a Martín en casa de tu hermano, con Elena- me asombro ante sus palabras y veo como se enfada a medida que habla
-No te es cómodo hablar de esto. Dejemos el tema- pongo mi mano sobre la suya y sonrío.Nos dirigimos al sofá y yo me siento en la alfombra junto a Martín y juego con el.
Y pensar que dentro de poco yo voy a tener a mi pequeña Ainhoa entre mis brazos para poder jugar con ella al igual que lo hago con el chiquitín de ahora.
*****
Ahora mismo estamos comiendo con mi padre, su pareja, mi hermano y mi cuñada.
-¿Al final cómo se va a llamar mi nieta?- cuestiona mi padre emocionado
-Se va a llamar Ainhoa. Cómo la abuela- le sonrío y mi padre sonríe mas por el hecho de que se vaya a llamar como su madre
-Un nombre perfecto princesa- coge mi mano y sonríe.César, Raquel y Elena se levantan y nos felicitan.
Nos volvemos a quedar en silencio hasta que Elena y César se vuelven a levantar.
Extrañados todos, les miramos.
-Bueno Becca, siento copiarme- ríe Elena flojamente -pero yo también estoy embarazada-
No
Me
Jodas
-Eso es una buenísima noticia cuñi- la abrazo.
Me alegro mucho por ella y por mi hermano, las cosas como son.
-Me alegro mucho primita- la abraza Cristian.
Yo abrazo a mi hermano y acto seguido mi novio también.
-¿Y de cuánto estás, cielo?- pregunta Raquel con dulzura
-De siete semanas- toca su muy plano vientre, plano de momento.*****
Estoy a un mes de dar a luz.
Ahora mismo estamos Ruth, Sandra y yo en el piso.
-Sandra, ¿qué tal con Gabriel?- cuestiono con curiosidad a la pelirroja que se ha quitado el septum
-Juzga tu- sonríe y me enseña su mano en la cual hay un anillo en el dedo índice
-¡Felicidades!- la abrazo y Ruth se suma también.Terminamos de pintarnos las uñas y mientras esperamos a que se nos seque el esmalte vemos un poco la televisión.
Cuando parece que ya están secas, me levanto para ir a la cocina y a medio camino, siento como un líquido resbala entre mis piernas.
Joder, menudo momento para romper aguas.
-¡Chicas, tengo un problema!- grito desde la cocina.
La castaña y la pelirroja vienen corriendo y ven el charco que se ha formado a mi alrededor.
Rápidamente cogen sus chaquetas y me dan la mía y nos dirigimos hacia el coche de la pelirroja.
-Becca, llama a Cristian- me pide Ruth desde el asiento del copiloto.
Así lo hago, saco el móvil y marco el número del castaño de ojos marrones.
Al cabo de cinco minutos y unas siete llamadas, me llama el a mi.
-Por fin- suelto nada mas descolgar la llamada
-¿Qué pasa, cariño?-
-He roto aguas, vamos camino del hospital-
-Joder. Voy corriendo hacia allí-
-Martín está con Laura, han venido esta mañana súper temprano y se ha quedado con él y David- le informo algo agitada
-Vale cielo, ya estoy de camino al coche- me informa y cuelga.En cuánto Sandra aparca, viene una enfermera corriendo con una silla de ruedas y me ayuda a sentarme en ella.
Rápidamente me llevan al paritorio.
Dentro de nada, voy a ser madre, junto al hombre al que quiero.
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Lo Imposible No Existe
RomanceRebecca, es una adolescente como todas las demás, tiene amigos, va al instituto (y lo odia), de fiesta, etc... Ella es divertida, amable, está ahí cuando la necesitan, pero detesta estudiar con toda su alma y no es muy responsable en el sentido est...