Secrets {harry styles}

Capitulo 3

CAPITULO 3:

-Jordan. –Mira extrañado mi gesto anterior, pero no dice nada, así que supongo que lo entiende.

Le sonrío y espero a que Mary y Josh vuelvan, muy impaciente.

-Y bien... ¿Qué te apetece hacer? ¿Dar una vuelta por la ciudad?

Supongo que eso está bien.

-Claro. –Digo mientras asiento con la cabeza. Intento bajar de la cama pero él baja primero y pone una mano sobre mi vientre, impidiéndome avanzar.

Le miro a los ojos, esperando una explicación sobre su repentina acción.

-¿Qué haces? –Digo por fin al ver que no habla.

-¿Estás segura de que puedes? –Me mira preocupado, y por primera vez, me entra la risa.

-Claro que puedo, no tengo ningún problema en las piernas.

Quita la mano y me deja bajar. Yo doy un paso al frente, con cuidado, y empiezo a caminar hacia la puerta.

-Oh, esto se siente bien. –Le digo.

Él solo se ríe, con una risa muy forzada, alta y rara. Bueno, nadie es perfecto, tendré que aguantarlo.

Me dirijo a abrir la puerta cuando es Mary la que lo hace, y ella también, con una expresión angustiada.

-Estoy bien. –Le sonrío y pienso dos veces antes de volver a hablar. –Mamá.

Se lleva una mano al corazón y Josh me indica la salida. Los cuatro nos dirigimos al piso de abajo. Vamos en el ascensor hasta la planta principal y allí espero a que hablen con la secretaria encargada de internos a largo plazo, como pone en su bata.

Me siento en una butaca y Jordan hace lo mismo, delante de mí. Mis... 'padres' están lejos, lo suficiente como para no poder oír lo que decimos.

Jordan me mira con una sonrisa un tanto pícara, traviesa. Se acerca a mí y posa su mano sobre mi rodilla. Bajo la mirada en signo de desaprobación hacia ella y vuelvo a mirarlo, él solo sigue subiéndola, hasta llegar al muslo.

Me levanto enérgicamente de golpe y él la quita rápidamente.

-Antes te gustaba. –Dice con los hombros encogidos.

-Antes, ahora, ¿no entiendes que no sé nada de mí? Todo esto es nuevo, por favor, actúa como si nos acabáramos de conocer. Solo te pido eso. –Intento ser abierta y comprender su comportamiento, pero eso no hace que no sea un punto negativo para él, muy mal, Jordan. No sé a quién se le ocurriría intentar nada con una persona que acaba de despertar del coma después de tres meses, aunque sea tu novia.

Seguido, él se levanta y se sacude un poco los pantalones.

-Vámonos ya.

Sin decir una palabra, aún un poco molesta por lo que acaba de hacer, le sigo y salgo fuera del hospital.

El sol de las tres de la tarde me ciega y me obliga a taparme los ojos, poco a poco se me va acostumbrando la vista y puedo observar correctamente todo lo que me rodea.

El cielo está despejado, los pájaros vuelan encima de mi cabeza y hace un día maravilloso, se está genial sin chaqueta. Josh se acerca a un Audi A4 negro que parece recién comprado, abre la puerta trasera y me indica que me siente. Lo hago, y veo como cierra y va a sentarse delante.

Una vez estamos todos en el coche, nos quedamos en silencio. Tengo la extraña sensación de que no voy a estar bien con estas personas. Y no sé porque pienso eso, soy horrible porque se me haya pasado por la cabeza. ¡Son mi familia y mi novio! Me sacudo un poco el pelo e intento deshacerme de esos pensamientos intrusivos.