Muchos dirán que no es normal o que es estúpido, pero a mi me parece que es tierno vivir la misma situación.
Pasé una linda tarde con Jack, hablamos mucho, salimos... Esto cada vez más me demuestra que mi otra mitad es él. Tener varias cosas en común, casi los mismos gustos musicales y gustos; me parece que es bueno.
Llegó la noche, Jack se fue y me quedé en mi habitación, salí al balcón y prendí un cigarrillo. A mi padre no le gusta que fume dentro de la casa, por eso me dieron la habitación con balcón.
Miraba la calle mojada, estaba lloviendo... Y había un carro y dos motos paqueadas, supongo que habían personas, no sé... Sólo pensé: ¿Será que Jack está ahí? Sería genial, pero espero que no, no quiero que se enferme.
Mi celular sonó, entré a mi cuarto y lo tomé. No vi el numero, sólo contesté.
—Te ves muy linda... Es triste que no seas mía. —La voz de Chris. Era él.
—No es conveniente que me llames.
—No me cuelgues, déjame hablar contigo, lo necesito.
—Habla rápido, no quiero problemas con Jack.
—No quiero que dejes de ser mi amiga. Sé que no te puedo tener como mi amante, pero por lo menos quiero sentir que te tengo cerca. Ana, créeme, nunca llegué a amar a alguien como lo hago contigo. No sé como en tan poco tiempo lo hiciste, pero si esto no es amar, no sé cómo más se le pueda llamar. Sólo sé que de mi mente no sales... No debo estar diciendo esto, pero tengo que hacerlo, sólo te pido que no te alejes de mi, por favor.
—Chris...
—Perdóname por haberte dejado que me vieras drogado, en mal estado... Siento una gran vergüenza de tan sólo acordarme; lo único que quiero es una segunda oportunidad, para que veas que soy una buena persona y cambies la imagen que tienes de mi.
—¿Qué quieres?
—Quiero salir contigo, quiero que me conozcas en realidad, si quieres le puedes decir a Jack, no haré nada malo, te lo juro.
—No lo sé, no es algo prudente hablar con mi novio de su rival, y decirle que me deje salir con él, pero en realidad necesito hablar contigo. Hablaré con él.
—Te espero a fuera.
—¿Qué? ¿Estás afuera?
—Vamos.
Colgué el teléfono, pensé: ¿Será buena idea? Supongo que debo arreglar las cosas y dejar clara mi posición, debo hablar con él, saber que tiene para decirme y intentar conocerlo mejor.
Hablé con Jack, no le gusto, obviamente la idea de que yo hablara con Chris, pero aún así aceptó, él confía en mi.
Me coloqué un saco y me solté el cabello, cuando salí, ahí estaba... Parado al lado de su carro, recibiendo toda el agua que caía. le pasé mi sombrilla. Él me la aceptó, no podía verlo bien, era como si quisiera evitarme la mirada.
—Ana...
—Chris, ¿Por qué lo haces?
—¿Qué cosa?
—Drogarte.
—Ana, primero debo hablar contigo, pero no será aquí. —Dijo Chris abriendo la puerta del carro. —Acompáñame.
Dude por un momento en subirme en su carro, tenía miedo, pero eso no importó, simplemente me subí.
La noche era muy fría, tenía ganas de nevar... Chris se veía muy raro.
—¿Dónde vamos a ir? —Pregunté.
—¿Quieres conocerme, no? Entonces iremos a mi casa.
—Ah.
Fue un camino largo, casi no hablamos, hasta que llegamos a su casa, su palacio. Él me invitó a pasar, era la primera vez que entraba a su casa... Una fina decoración con cuero azul y blanco, cuadros muy grandes de celebridades de los años 80, paredes blancas, alfombra de piel, piso de mármol... Era hermoso.
—¿Tus padres no están? —Pregunté.
—Están en la habitación, ni cuenta se dan a que hora salgo o quien está en la casa, así que no hay problema, vamos... Quiero que vengas.
Lo seguí. Me llevó hasta una gran puerta blanca que tenía muchos cuadros de su familia, y hubo una que me llamó mucho la atención, la foto familiar. Estaban, su padre, supongo, su madre, él y su hermana, una chica muy parecida a... A la novia de mi hermano. Es alta, ojos azules, pelo azul alocado y un tatuaje en el antebrazo. ¡¡Es ella!!
—Chris... —Le tomé la camisa. —¿Ella es tu hermana?
—Si.
—¿Por alguna casualidad se llamaba Devorha?
—Si, ¿Cómo sabes su nombre?
Entre en shock, ¿Cómo es posible que esté hablando con el hermano de la novia de mi hermano? ¿Cómo es que no sabía? ¿Algo más que tenga que saber?
—No, no puede ser...
—¿Qué?
—Olvídalo.
Chris me invitó a pasar a su habitación, llena de posters de bandas pero más organizado todo, su cama estaba vestida de rojo y las paredes del cuarto estaban llenas de frases escritas a mano. Una habitación un poco extraña.
Nos sentamos en una sala que tiene en su habitación, abrió la puerta de su balcón que daba una vista panorámica de la ciudad.
—Ahora sí, Ana. —Dijo Chris. —Háblame del porqué conoces a mi hermana.
—¿Ella tenía novio?
—No que yo sepa.
—¿Enserio? —Pregunté. —Y... ¿Por qué murió?
—Está bien, hablaremos de ella. —Dijo Chris. —De una sobredosis de droga.
—¿Ustedes sabían que ella hacía eso?
—No, fue una sorpresa descubrirla ese día muerta en el baño. —A Chris se le aguaron los ojos. —No voy a superar nunca la perdida de mi mejor amiga.
—¿Por qué entró al mundo de las drogas?
—Verás, cuando ella estaba pequeña, hablo de cuando tenía 11 años, tenía un cachorro, era una raza criolla, ese perrito era la adoración de ella y aún más un día que casi muere. Ella no sabía nadar y nunca aprendió. Un día caminando por la piscina se resbaló y cayó en ella, casi se ahoga, pero el perro empezó a ladrar para llamar la atención de la nana que nos cuidaba, el perro se lanzó y logró sostenerla... La nana fue corriendo y la ayudo... El perro la salvó, y desde ese día, ella lo amaba aún más, era su vida prácticamente. Ya tenía 21 años, y llegó a la casa borracha, dejó la puerta del parqueadero abierta y cuando salió a saludarla, un carro pasó a mucha velocidad y lo atropelló. Fue desde ese día que empezó a encerrarse y a no hablar con nadie, salía todo el tiempo, cambió radicalmente, hasta que... Un día la encontramos muerta... Ni sé como reaccionar, o qué pensar.
Chris estaba totalmente mal, me acerqué y lo abracé. Él me aceptó y también lo hizo, se aferraba muy fuerte, pero eso no importa, yo también me puse mal, pues es cierto. La hermana de Chris era la novia de mi hermano, por la que también me dejó.
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Ana Moon #Wattys2016
Fiksi RemajaLa vida de una chica casual... ¿Casual? Si, la definición de la normalidad es la rareza, ¿Qué? Y ajá, aquí no se trata de comprender. Te invito a descubrir la ''Casual vida'' de una chica de 17 años. Amores, risas, música y algo más, ¡no te lo p...