Solo soy una ARMY {BTS}

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Mi alarma sonó, puse como melodía la canción de BTS Save me, me ponia de buen humor con solo escuchar la voz de Jimin, lo admito, soy Jimin biased, pero todos los demás son mis bangtan favoritos, bueno puede que Suga un poco más, pero los quiero por igual. El simple pensamiento de que tienes la posibilidad de conocerlos en persona es... Todo un sueño hecho en realidad de parte de las fans internacionales que morimos por verles en persona, ojalá hubiera nacido en Corea jajaja.
Son las cuatro de la madrugada, tengo la maleta ya hecha, me he duchado rápidamente y me puse unos pantalones negros vaqueros, una blusa azul marino y mis zapatos favoritos, Tinberlands. Sé que os preguntaréis que ha go con esta ropa que da tanto calor, pero habrá ac en el avión, además me avisaron que en Corea hará frío aunque estuviésemos en julio. Mejor para mí, odio el calor.
He llegado al aeropuerto y me encontré con las demás. Todas teníamos sueño menos Haneuñ, estaba hiperactiva y sonriendo como nunca, así es como estoy yo pero en mi interior solo que no tengo fuerzas suficientes para exprésalo.
Seis de la madrugada, subimos al avión, el viaje iba a ser largo pero yo estaba acostumbrada ya que con frecuencia viajaba a China a visitar a mi familia.
Llevábamos como diez horas en avión, creo que perdí la cuenta. Todas estaban dormidas, me fui al baño un momento, y cuando regrese Kuri se despertó y me miró con su mirada asesina de 'Me despertaste de mi dulce sueño con Jhope te voy a matar más tarde'. Sonreí para mí misma y estaba pensando en lo afortunada que era en aquellos momentos. Junto a mis mejores amigas, viajando en el mismo avión con destino a Corea, para cumplir nuestros sueños.
Compartía asiento con Ailin, yo en donde la ventana y ella en el medio junto otra persona, al parecer un chico pelinaranjo que llevaba gafas de sol y mascarilla, estará durmiendo, es bastante guapo.
Detrás mía estaba Kuri, Molly en el medio y Haneul a lado del pasillo el viaje se me hizo agotador, fui quien menos dormí así que estaba muy cansada, no podía dormir, más bien. ¡Llegamos al fin!
'Wow...' Era todo lo que conseguí formular. Era precioso el paisaje nocturno en aquella cuidad, Seúl.
Eran las diez de la noche, llegamos al apartamento que estaba preparado para nosotras. No era muy lujoso pero es lo que hay, esto solo era el comienzo de todo. Le envié un mensaje a mi padre diciendo que hemos llegado bien y que no se preocupe, y a Wizel le informe que hemos llegado ya a Corea. Las chicas se fueron a dormir al igual que yo, estaba exhausta.

Al día siguiente, por la mañana nos despertamos a la hora exacta, las ocho en punto. Estábamos todas cansadas del largo viaje y teníamos solo un día de descanso. Pero igualmente estábamos muy contentas. Wizel me envió un mensaje de vuelta diciéndome buenos días y preguntándome que qué teníamos planeado hacer hoy. Nos. Hemos vuelto bastante cercanos en poquísimo tiempo y eso me alegra. Ailin y Kuri estaban ya preparadas, Haneul seguía en la cama, ya sabia yo que la que estaba tan activa ayer hoy estaría K.O. Molly como siempre se pasaba toda su vida en el baño arreglándose.
Yo: Molly sal ya que Han tiene que entrar tenemos solo media hora -grite un poco.
No recibí respuesta alguna hasta que escuche un golpe, al parecer se le cayó algo.
Molly: ¡vale, vale, lo pillo! -dijo con su acento raro, mejor dicho, con aquel acento gracioso que hacía cada vez que decía eso.
Han se fue al baño, salió y nos pusimos en marcha, nuestro plan era ir por los alrededores de Seúl para conocer la cuidad y no estar tan pérdidas. Se notaba que éramos extranjeras por nuestro aspecto, bueno más bien no el de todas, pero teníamos algo con que presumir, estudiamos muchísimo los últimos dos dias antes del viaje coreano, para así poder interactuar con la gente. No teníamos mucha dificultad ya que entendíamos y sabíamos hablar algo antes pero no lo suficiente como para entablar una conversación normal y corriente con cualquier persona, pero ahora sí que podíamos.
Buscamos en el mapa si había algún parque cerca. Fuimos al más cercano, uno enorme y con un lago precioso. Dimos un largo paseo hasta llegar a una especie de cabaña donde había bancos con mesa. Como eran las tres decidimos descansar y comer allí. Todo estaba tan pacífico, había poca gente allí, a lo mejor porque comían a otras horas o por el día. Estábamos todavía con ganas de dormir ya que el cambio de horario era demasiado. Ailin y Kuri echaron una siesta apoyadas en la mesa mientras que nosotras hablábamos tranquilamente disfrutando de las vistas. El tiempo pasó rápido y sin darnos cuenta eran las nueve, como es verano no estaba tan oscuro pero teníamos que volver para descansar bien.
Yo: chicas, entrar primero yo iré a comprar ramen y bebidas que está aquí al lado la tienda tardaré unos minutos solo.
Ailin: ¡Okey¡

Me despedí de ellas y entre en la tienda minutos después.

'Mmm vaya comida nueva que tengo que conocer, esto será ramen'

Cogi cinco bolsas para la cena, tres super picantes y otras dos normales. Salí de la tienda y gire hacia la izquierda, entre al edificio pero tenía un mal presentimiento, un chico llevaba siguiéndome creo que desde que entré a la tienda. Empiezo a tener miedo pero no quiero perder la calma. Estuve disimulando hablar por teléfono antes de entrar al ascenso, dando unas vueltas por los alrededores. Bien, creo que ya no me seguía, y me dirigí hacia el ascensor. Entre y pulse el botón dieciocho. Empezó a ponerme nerviosa y a asustarme cuando la misma persona que me seguía entró en el mismo ascensor.

'¿Acaso me está acosando?¿Planea secuestrarme o asesinarme?¿O será que simplemente vive aquí y será coincidencia?' Solo podía pensar en eso, es imposible q sea coincidencia el hecho de q entro en la tienda y me siguió hasta aquí, era el mismo chico de pelo gris con un toque de azul, llevaba unos vaqueros azul claros rotos y unas botas grandes amarillas. Ocultaba su cara con una gorra blanca con dos ... ¿Pendientes en él? Oh, me gusta su estilo, pero esto no me está gustando.
La puerta se cerró, mierda, esto era lo peor, solo estábamos nosotros dos,
'voy a morir aquí' es lo único que pensé.
Deseaba que el ascensor vaya lo más rápido posible o que se bajase pronto. Maldigo el estar viviendo en un decimoctavo. Estábamos en el quinto solamente, me costaba respirar cuando vi que el chico me estaba mirando fijamente con un semblante serio. Estaba pegada a la pared intentando evitarte pero se iba a cercando cada vez más. No me atreví a mirarle. No quitaba su mirada y era amenazante, su piel tan pálida me dio aún más miedo. Quería gritar pero me detuve cuando puso su brazo al lado mía golpeando la pared. Tenía su cara a cinco centímetros. Creo que mis fuerzas y energías me abandonaron completamente porque era incapaz de hacer nada, solo mirar en qué planta estábamos: 12.
Acercó lentamente su cara y la posicionó tras mi oreja, me susurró algo: 'yeppuda Jaeil'
¿Yepoda? ¿Escuché mal? E-espera... Dijo... ¿¡Jaeil!?
Se apartó lentamente sin dejar de mirarme ni un segundo, una cosa tenía clara, ese chico me conoce pero también me resulta algo familiar. Antes de irse me sonrió con una sonrisa enigmática y se bajó en el piso 17.
Cuando se abrió la puerta eche a correr y me abrió Haneul.
Haneul: ¿pasó algo? -dijo al verme toda agitada
Yo: eh...solamente...casi me quedo encerrada en el ascensor y tenía mucho miedo, lo sabes mi miedo a la oscuridad.
Haneul: dios que susto me has dado creía que alguien te hizo algo. 'Casi aciertas Han'
Yo: ¡bueno ya compre la cena vamos a comer!
No queria reocuparlas así que lo dejé pasar, podríaa haber sio un simple acosdor pervertido.

Al terminar de cenar abrí el Whastapp y tenía tres mensajes, mi padre, Wizel, y un número desconocido...
Desconocido: Te estaré vigilando.