capítulo#35: "Hasta siempre"

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Nota: NO olvidar leer el EPÍLOGO

-Vamos chicos ¡sonrían y miren acá! -exclamó alegre Rosse. El precioso anillo destelló en su dedo cuando enfocó la cámara-. Uno no se gradúa todos los días.

Me hice para atrás evitando que el birrete de Cáterine me saque un ojo. No paraba de cambiar de pose junto a Jhulisa, atrás Erick le gruñía a Greg que no era necesario que lo abrace a él y a Sophie para la foto, Matt ponía caras graciosas y yo insistía en que esperemos al estúpido de mi novio mientras lo buscaba con los ojos.

Solo Darwin a mi derecha sonreía quieto hacia la cámara, vestido en una toga azul oscuro y birrete como todos nosotros.

-Skylar ¡sonríe! -me chilló mi hermana.

Fingí una sonrisa hacia la cámara al darme cuenta que ya todos estaban listos para la foto y me resigné a que Dylan no apareciera en ella.

Cuando mi hermana se disponía a tomar la foto un muchacho rubio apareció donde había estado mi amigo. Antes de que pudiera decir nada me tomó el rostro y estampó su boca sobre la mía.

Abrí los ojos como platos y solo atiné a tomar mi birrete con una mano para que éste no se cayera de mi cabeza. Dylan me dio un ansioso beso mientras el flash nos deslumbraba.

-¿Dónde estabas? -le espeté cuando se apartó.

-¿Me extrañaste mucho? -sonrió arrogante y yo le pegué en el hombro antes de que todos nos fundiéramos en un enorme abrazo.

Era el fin de nuestra vida escolar. Todos estábamos emocionados y nerviosos por empezar una nueva etapa en nuestras vidas, la universidad era algo nuevo y aterrador, un gran salto a la vida adulta.

Seguiría los pasos de mis padres y me metería de lleno en el mundo de los negocios, quería ayudar en la constructora de mi amado abuelo pero aún tenía mucho que estudiar para ello.

Miré a mi hermana mientras su prometido la estrechaba en brazos.

¿Llegaría a ser tan buena como ellos algún día?.

Lo sentí abrazarme por la espalda y volví a la realidad.

-¿En qué piensas?

Miré a Dylan.

-Solo en lo que nos espera -sonreí-. Y en el traje que usarás para la boda.

Resopló, me reí mientras me abrazaba.

-Tenía la esperanza de que hubieras olvidado ese pequeño detalle.

(...)

Todos aplaudimos mientras Nick besaba dulcemente a mi hermana en el altar. Me sequé las lágrimas, Rosse era seguramente la novia más hermosa en todo el planeta y la más feliz también.

Con la misma boba sonrisa los observé mientras bailaban el vals en su fiesta.

-Soy yo o te has vuelto una sentimental llorona -comentó Dylan bebiendo su champán.

Me encogí de hombros. Ambos miramos a los novios un momento.

-Es una fiesta preciosa pero creo que me divertiría más con mi hermosa novia en otro sitio -susurró en mi oído y pude sentir su sonrisa.

-Es la fiesta de bodas de mi hermana, no me puedo ir.

-Vamos, estoy seguro que no notara tu ausencia -me lanzó aquella mirada centellante de desafío aunque yo no la necesitaba para irme con él.

Sin la remota idea de a dónde me llevaba monté su motocicleta. Habían pasado un par de meses luego de la graduación y yo todavía no me acostumbraba a no montar aquel vehículo suicida cada mañana para ir a la escuela, como lo había hecho desde mis quince años.

La Vida Secreta de Skylar GrayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora